Ofrendo la vida por ti héroe sin capa,
sin avión... sin recompensa efectiva.
Descargo en ti mi dolor
y tu partida queda sin sentido por un segundo.
Libero mis manos del vil metal
que arranca el último suspiro de tus labios amados.
Vierto en ti la ternura que recorre tu dulce mirada.
Dejo en ti mis caminos
acariciados por tus manos eternas.
¡Ché mío…hombre nuevo!
Escucha el grito
arrancado desde la profundidad
que vence a los hipócritas.
Camina encima del fuego maligno
que se torna bondad frente a tus ojos.
Detén el andar del falso guerrero
que esconde el temor para dejar morir.
Levanta la voz de nuevo
y advierte la luz del día y la sombra de la noche.
Regresa Ché y soñemos lo imposible.
Hindu Anderi
19-10-06 - 5:00 p.m.