Cynthia Machado Zuloaga está alterada. Se mueve inquieta en la silla que está a mi lado, allí, como siempre, en el Centro San Ignacio, y su cuerpo escultural gira embravecido en torno a la mesa. Y dice así.
- La Universidad de Los Andes, Roberto, acaba de cometer una aberración. Un acto asqueroso, una vil provocación. Una indecencia. Una basuratura, si se puede decir así. Eso de graduar a Nixon Moreno en la Nunciatura, aquí en Caracas, es un acto que habla muy mal de la universidad y de sus autoridades universitarias.
Se detiene y toma directamente de la botellita de agua Evian y vuelve en sintonía con su discurso.
- Así no se puede pedir reconciliación, amigo, con qué moral. Cómo un hombre que tiene más de quince años estudiando en la ULA, y que tiene además un expediente donde se le acusa de querer violar a una mujer policía, viene la Universidad, su rector, y 120 estudiantes pagados por la misma universidad, a un acto asqueroso a darle el título de politólogo. Yo estoy haciendo oposición, es decir, estoy en desacuerdo con este, tu presidente, pero yo no apruebo este tipo de actos, Roberto., esto es lo que nos lleva a que las clases más pobres nos tengan rabia.
El mesonero la está viendo con admiración, porque la ve protestando, y sabe que cuando Cynthia Machado Zuloaga protesta se ve más bella, más elegante, más sensual, más Cynthia, más Machado, más Zuloaga. Y dice.
-El Colegio de Politólogos, si existe, debe pronunciarse contra esta aberración. Cómo se graduó. ¿Por Internet? Es una cosa sin explicación. La próxima vez que abran inscripciones en la Universidad de los Andes en Politología me voy a inscribir, me asilo en la Nunciatura y me gradúo en un año. Esto es una canallada del cuerpo rectoral, de la Nunciatura, -un pecado-, y también tengo que decirlo papi, papito, papitote, de Globovisión. Es crear un acto para tener noticia todo el día y provocar a los chavistas y al gobierno. En este momento, me siento tu camarada, Roberto, estoy de acuerdo contigo.
Se detiene y vuelve a tomar agua, y de un solo sorbo termina la botella, y el mesonero se acerca pronto a atenderla y ella lo aguanta y con una señal le dice que no quiere más, que está molesta y que mucha agua le hace daño. El mesonero pide disculpas y vuelve a su lugar y Cynthia remata diciendo:
- Hay que gritar: NIXON, GO HOME. Y tenemos que hacer todo lo posible por aplicarle su Watergate.
Y digo yo, palabra de Cynthia. Y el mesonero contesta: Te alabamos, señor.
robertmalaver@cantv.net