EL PUEBLO VENEZOLANO NO MERECE ESA HUMILLACION.
11 de Julio de 2008, fecha para recordar, por lo significativo del momento histórico que nos tocará vivir; Una vez mas una bota insolente esta a punto de hollar nuestro sagrado suelo; se trata de un vecino que a pesar de todas las humillaciones, Vejaciones e insultos que ha proferido a nuestra patria, nuestros ciudadanos y nuestro gobierno; viene como invitado, a todavía no sabemos que.
Esta vez no recibiremos al insolente a cañonazos (como en siglos pasados), sino que las salvas de nuestros gloriosos cañones lo saludarán, pasará revista en el callejón de honor de nuestro glorioso ejercito y para colmo de humillación a nuestro gentilicio, nuestra banda marcial le rendirá honores militares, incluyendo la entonación de nuestro sagrado Himno Nacional, el cual estamos seguros escuchará con la mano en el corazón, con la misma hipocresía con la que Santander besaba las manos del Libertador y luego lo mandaba a matar.
Nos preguntamos desde las calles, desde los campos, desde los corazones; ¿Qué motiva a nuestro comandante a recibir a uno de los narcotraficantes mas grandes de Colombia?, ¿porque el jefe de los paramilitares colombianos viene a nuestra patria?, ¿que beneficio puede traernos el recibir al aliado número uno de los Estados Unidos de América?; aliado comercial (el mayor negocio de compra y venta de narcóticos del planeta), aliado militar (el territorio colombiano se ha constituido en una base militar norteamericana desde donde se lanzan ataques a algunos vecinos y se vigila a los demás), aliado estratégico (el gobierno colombiano es actualmente el mayor saboteador de la unión suramericana por ordenes expresas del gobierno de Washington). Entones, camarada comandante, con todo respeto, le preguntamos: ¿A que carajo viene semejante personaje?.
Nosotros respaldamos decididamente la política exterior de nuestro presidente, siempre lo hemos hecho; hemos confiado en su inteligencia y, sin hacerle preguntas, le hemos dejado desarrollar su estrategia aunque a veces no entandamos la intención de la misma; pero esta vez creo que merecemos una explicación, no puede ser que después de la indignación que sentimos cada vez que ese delincuente abre la boca para insultar a nuestro comandante, ahora tengamos que recibirlo con ¡VIVAS!; no comandante creo que esta vez no lo vamos a acompañar en esa orden, ese miserable no merece los honores que usted pretende rendirle el 11 de julio.
Los honores a ese tirano-delincuente nos ofenden y nos humillan; ¿que vamos a hacer dentro de poco, muy poco, cuando vuelvan a las andadas y entonces usted vuelva a decir pestes del fulano?…dígame ¿que haremos con nuestra moral, si hoy nos ordena aplaudir y mañana nos ordena pitar?.
Comandante, el pueblo venezolano lo respalda y lo quiere, no nos ponga como una veleta, no queremos recibir a ese narco-presidente; si se le puede llamar presidente, yo he dicho antes que uno de las dificultades para llegar a un entendimiento con el gobierno de Colombia es que el presidente (Santos) nunca da la cara y mantiene como vocero de la casa de Narc-iño, al señor Uribe Vélez; entonces comandante, no hable con segundones, si tiene algo en mente con la relaciones con Colombia, entonces hable con el papa de los helados (el jefe del cartel, quise decir).
Le suplicamos camarada comandante no nos ordene vitorear al traidor, que ya bastantes humillaciones hemos sufrido del déspota en cuestión.
¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE…!
¡PATRIA, SOCIALISMO…O MUERTE!
¡VENCEREMOS!
“Esta Patria es Caribe y no Boba”.
Simón Bolívar
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