En esta etapa de discusión a favor y en contra de la enmienda han aparecido verdaderas razones para su apoyo, así como otras que responden a la necesidad de “usar” ese especial “amor” entre Chávez y el pueblo.
Ciertamente la empatía entre el Presidente y el pueblo venezolano ha permitido animar de nuevo a vastos sectores de la población a apoyar el SI a la enmienda. Como método publicista puede ser muy bueno, así parece demostrarlo el avance en el apoyo, sin embargo sirve también para simplificar el debate, porque y ¿si Chávez se muere el 16 de febrero?
En estos días pasados en un debate en la Escuela de Ingeniería Eléctrica de la ULA donde estaba presente el Presidente de Fundayacucho Jorge Arreaza, este habló de la necesidad de mantener el proceso para llevar adelante los planes de país. No hay dudas de la necesidad y la importancia de mantener un gobierno que pueda planificar, desarrollar y lograr durante el tiempo necesario un proyecto de país.
A raíz de esta intervención se me ocurrió profundizar sobre un hecho poco explicitado en el debate en general. La alternancia ente AD y Copei, o entre demócratas y republicanos en USA, o liberales y conservadores en Colombia, poco tiene que ver con los planes de país de cada uno de esos sectores. Es posible que históricamente las distintas organizaciones políticas representaran a sectores burgueses distintos, con distintos planes de construir país; claro cada uno en función de los intereses de esos sectores. Pero la realidad capitalista es que lo que más les interesa, con más razón en Venezuela por la renta petrolera, es meter las manos en las arcas del estado y la administración del enorme presupuesto petrolero. De manera que esa supuesta “alternabilidad” que daban los cinco años de gobierno y la no reelección por más de dos períodos, no era por demócratas, sino por el “quitate tú pa ponerme yo”; o sea, déjame ahora gobernar a mí. La idea es engañar al pueblo con una supuesta democracia que no era, sino para alternarse en el robo de los fondos estatales. De allí la famosa frase aquella de “sí, los adecos roban pero dejan robar”. La moral de algunos sectores de la población había llegado al punto de perdonar al ladrón si deja robar a los demás. Por supuesto que no estoy dispuesto a meter al fuego ni una uña, por algunos funcionarios del más alto, medio y bajo rango del gobierno actual. No es esa la discusión aquí. Lo que quiero resaltar es esa falsa supuesta democracia o alternabilidad anterior.
Pero estas mismas razones llevaban a otro hecho, resaltado por Arreaza en su intervención. Los planes de país. En efecto estos posibles cambios en el gobierno, así como el no tener interés en el desarrollo del país y eliminar la pobreza llevaba a que la máxima preocupación de cada uno de eso gobiernos adeco-copeyanos era como robar en los cinco años, porque después no sabían. Así el país iba de gobierno en gobierno, cada uno cambiando los planes del anterior, porque no le servían para robar ellos y el sector burgués que los apoyaba. Durante el gobierno del cometorontos Luis Herrera Campíns se dio el conocido viernes negro cuando el dólar pasó de 4,30 a 7,15 bolívares. Justamente durante varios meses antes de la medida el sector burgués representado por lo montesdeoca del estado Lara compraron el 80% de los dólares que vendió el Banco Central, algún pajarito les dijo que venía la medida. ¿Se imaginan de cuanto fue la ganancia? Los planes justo antes del triunfo de Chávez eran entre otras cosas vender a precio de gallina flaca la empresa petrolera!
Así que no es por Chávez. Es porque ahora hay el plan de construir una patria socialista. Para construir una PATRIA SOCIALISTA, seguro Chávez no es imprescindible. Pero se necesita tiempo, fuerzas, ánimos, organización y dirección. El triunfo del NO debilitaría enormemente al pueblo y truncaría el proceso de acumulación de fuerzas que lleva adelante. En este momento lo que si es imprescindible es que gane el SI. Los que juegan a otra cosa, juegan a la derrota del pueblo.
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