Me he dedicado a escudriñar en Internet y recabar información acerca de las noticias que han generado las diferentes autoridades nacionales que de una u otra manera tienen que ver con el desarrollo aguas abajo en Venezuela de la Industria Petroquímica y las 200 Empresas Socialistas planificadas.
De esta búsqueda se puede concluir que vamos en una dirección contraria a la indicada por el Comandante Presidente Chávez cuando pregona la Fábrica de Fábricas, pero aún estamos a tiempo de evitar, que con las inversiones que realiza el estado para apuntalar nuestro desarrollo industrial sustentable, se repitan los errores cometidos durante la IV República en casos de empresas emblemáticas como SIDOR, ALCASA, VENALUM, FERROMINERA DEL ORINOCO.
Por una parte inversiones e instalación de empresas productoras de materia prima, por otro lado empresas de generación de productos elaborados y/o semi-elaborados tales como ensambladoras de Automóviles, ensambladoras de electrodomésticos, ensambladoras de partes automotrices, en general se instalaron en el país siguiendo la partitura de empresas franquicias. El grueso de la producción de materia prima, terminaba y sigue terminando en el exterior, para luego retornar a nuestro país como productos terminados, con precios infinitamente elevados, repito estamos a tiempo de evitar repetir este error, estamos ante la oportunidad de gerencial un verdadero desarrollo endógeno en nuestro país tal como lo visualiza el Presidente Chávez.
Estas empresas franquicias, por definición están subordinadas a los intereses de los grandes centros de producción, sus maquinarias ya diseñadas para productos que obedecen a sus casas matrices, la consecuencia: casi el 100% de estas maquinarias se importaron, perdiendo el país la oportunidad de desarrollar una industria metalmecánica que obedeciera a nuestros intereses y patrones de consumo.
Algunas de las 200 empresas socialistas, serán potenciales consumidoras de resinas de poliolefinas (polipropileno y polietileno) y PVC, y generarán productos terminados como tuberías, bolsas, jeringas, sillas, autopartes, envases, pañales, módulos para PC´s (VIT), módulos para teléfonos (VENTELCA), electrodomésticos (Convenio con la empresa china Haier para fabricar línea blanca), para que esto ocurra se deberá prever la creación ó promoción de los eslabones intermedios que requieran c/u de las cadenas de producción de estas empresas. En caso contrario, nos pudiera ocurrir lo mismo que sucedió en la planificación de empresas en la IV República, si no hacemos los correctivos necesarios y visualizamos que necesitamos unas empresas intermedias en esa cadena de producción, para darle a nuestra propuesta mayor alcance en el tiempo y autonomía.
El procesamiento y transformación del plástico, requiere de un fuerte desarrollo de empresas con requerimientos de una alta capacidad tecnológica, algunos de estos eslabones intermedios son: LA INDUSTRIA DE MOLDES Y MATRICES que en nuestro país no tiene un desarrollo significativo, ni capacidad de producción que exigirán las empresas antes señaladas; ALEACIONES DE ACEROS Y ALUMINIOS ESPECIALES que no se producen en el país. En el primer caso, un alto desarrollo de una Industria Metalmecánica especializada, requerirá de la formación de técnicos y profesionales de altísimo nivel y exigencia, por lo que será el estado el responsable de prever su formación.
¿Repetimos los errores de la cuarta república?, importaremos de nuevo maquinarias y juegos completos de moldes y matrices necesarios en la industria de producción en serie del plástico. Como dije al principio, no he escuchado ni encuentro por Internet referencia de los responsables de estos proyectos acerca de estos eslabones de producción, necesarios para llevar a feliz término la misión. Sin una planificación eficaz, sin la previsión a tiempo y con solo voluntarismo se estará condenando a estas empresas socialistas a nuevas relaciones de dependencia y peor aún al fracaso. Ahora bien qué hacer, veamos:
Tenemos el ejemplo de una industria petrolera que en buena parte promovió el desarrollo de una industria metalmecánica que hasta el momento es confiable y con altos niveles de calidad. Por analogía, estoy convencido del desarrollo a corto plazo en el país de las industrias intermedias que se requieren aguas abajo, para un completo procesamiento industrial del plástico y de esta manera ser consistente con lo predicado por nuestro Presidente Chávez.
Finalmente el efecto colateral del desarrollo de estas empresas socialistas será catalizar e impulsar el desarrollo industrial. Como lo he dicho en otras oportunidades, no existe una potencia industrial sin un fuerte desarrollo entre otros, de una industria de mecanizado, utillajes y máquinas herramientas.
De verdad espero que los encargados de estos desarrollos, Saúl Ameliach en Pequiven, MILCO, Ramón Mendoza y los compañeros comprometidos con el desarrollo endógeno, si estoy en lo cierto tomen medidas pertinentes y si estoy equivocado, tomen mi inquietud como una señal de alarma. Estoy a la orden para cualquiera de las autoridades de realizarles una presentación sobre el tema.
Ing. Metalúrgico
Montes-r@hotmail.com
