De alguna manera me pregunto ¿qué hace que, de alguna manera, los medios que, de alguna manera, están encargados de enseñar a mi pueblo a, de alguna manera, expresarse, sean, de alguna manera, precisamente los que, de alguna manera, están destruyendo, de alguna manera, el lenguaje?
De alguna manera tengo una "digamos" teoría, "enlemarcodeloquesería" el tamaño de la cobija. Primero y "digamos" principal, "dealgunamanera" es una muletilla importada del único país de la America "Latina" (es decir, violada y magreda por españoles y portugueses) que cree formar parte de Europa. "Veamos."
Un intelectual de la talla de Julio Cortázar, XL aunque algo holgado, tenía una forma muy particular de hablar. Julio Cortázar usaba una muletilla: "dealgunamanera". Si a Julio, como a cualquier hijo de vecina, le picaba el culo, y le urgía comentarlo a quienes le rodeaban, de forma de poder justificar la inquietud que le causaba estar sentado en una sola posición durante largo tiempo, decía: Dealgunamanera, me pica el, digamos, uhhhhh, culo. Y en ese pais, donde todos son inteligentísimos "intelectuales", que manejan con igual facilidad las teorías de Freud y las llaves inglesas (¡claro!), hablar con muletillas que dan ese toque de hermetismo, de estar pensando, de estar buscando la palabra adecuada, se regó como verdolaga. Y como nos usan de trampolín para ir a buscar famas más al Norte, nos dejaron de regalito esa forma tan balurda de decir pendejadas, pero ahora con energúmenas muletillas.
Ahora resulta que cualquier hijo de vecina que quiere darle un toque "intelectual" a las pendejadas que dice, y las dice por la radio y la televisora nacional, custodios de los sagrados templos de la cultura y del idioma, y principal docente en la ciencia del uso efectivo de la tapara, piensa que agregándole esas muletillas a sus idioteces se convierte automáticamente en un "intelectual".
Dejeme decirle, a riesgo de parecer intolerante: ¡NO!!!
Desde San Carlos, la puerta del Llano, hasta mas alla del Guaviare que es donde vienen las tragicas guarichas, se dice que hay que arroparse hasta donde alcanza la cobija. Ninguna muletilla, ninguna "duda" teatral, ninguna pose "cortazariana", puede esconder la falta de lo que Natura y Salamanca dan por partes iguales.
Guerra al "dealgunamanera", que algo queda...
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