Estimados camaradas socialistas, he de reconocerles que de católico tengo muy poco y de religioso mucho menos, pero aprovechando esta época del año, donde todo es regocijo, paz, amor, respeto, cariño, confraternidad, en fin, donde todos somos un poquito socialistas, claro esta, todos aquellos que tenemos dos dedos de frente y no nos dejamos engatusar por San Nicolás, el Tío Sam y el cochino capitalismo, para los cuales estas fechas son otra cosa, pero como les dije, tengo dos dedos de frente y el consumismo estupido no es para mi, así, que he decidido dejar salir ese dejo de cristianismo que aun debo tener, eso si, muy en el fondo de mi psiquis y yo también, le he escrito mi cartita al niño Jesús, para que me traiga “algodón” en esta navidad.
Después de pensarlo y meditarlo largamente, me he dado cuenta de que solo tengo tres pequeños deseos, que me gustaría mucho, que se me cumplieran para esta navidad y como no, también para el año nuevo de 2010, obviamente, año nuevo para todos aquellos que estamos esclavizados al almanaque gregoriano, y mis tres deseos son muy específicos y posibles de realizar, pero eso si, como a estas alturas mi raciocinio me ha hecho despertar, de esa breve nebulosa religiosa, con la que comencé a escribir este articulo y a estas alturas, ya me olvide del niño Jesús, total es inútil pedir algo, a quien es la representación de la natividad, del filosofo y socialista mas grande que ha tenido la historia humana, como es Jesús de Nazaret, y que como buen mortal que fue, ya hace casi 2000 años que desapareció de la faz de la tierra y realmente, le resulta imposible conceder ningún tipo de deseo, así que, he preferido pedir mis deseos, a quien en realidad corresponde y a quien a ciencia cierta puede cumplírmelos.
El primero de mis tres deseos va dirigido a la humanidad y es muy sencillo y esta en cada uno de nosotros cumplirlo, que no somos otra cosa que la humanidad misma y aunque, no creo en toda la parte espirituosa, por calificarla de alguna manera, con la que han envuelto la vida de Jesús de Nazaret, si me gustan muchos de sus dichos y reflexiones y para este mi primer deseo, quiero usar la que mas me gusta entre todas, a saber: “es fácil respetar a quien te respeta, lo verdaderamente importante, es respetar a quien NO te respeta”.
Ese es mi deseo, tan sencillo como eso, tan antiguo como hace mas de 2000 años, tan claro y diáfano y tan complejo y extenso, porque medítenlo por un segundo, si Ud. es capaz de respetar al que lo irrespeta, tarde o temprano va ha ocurrir una de dos cosas o el ofensor recapacita y cambia su aptitud o el entorno de Ud. y de su ofensor tomara parte y hará corregir al ofensor, haciéndolo deponer su aptitud y así de sencillo, se acabaran las guerras, los conflictos y todas las muertes inútiles de nuestros compatriotas, porque hay que recordar, que todos vivimos en el mismo planeta, por ende, todos somos compatriotas.
El segundo deseo, es mas local, es para mi país y este se lo pido, al único ser capaz de realizármelo y no es otro, que el presidente Chávez, es a el a quien le dirijo este deseo y no es otro, que de una buena vez y por todas, haga que nuestra sociedad sea realmente, una sociedad SOCIALISTA, ya basta de tanta cháchara, ya basta de tanta retórica, ya basta de tantos lapsos, que mas vamos a esperar, a que la revolución desfallezca; presidente, este es el momento, el pueblo esta con Ud. y la mayoría de los libre pensadores, lo vamos a seguir, poco importa, que ante la profundización del proceso revolucionario, se le salgan las costuras a mas de uno de sus colaboradores, a esos los sacamos del proceso y en el camino vamos anexando gente, que con el ejemplo de vida, puedan ser bases, pilares fundamentales, de este proceso revolucionario; ya han pasado 11 años, este es el momento, ya no podemos esperar mas, es por eso, que este deseo se lo hago a Ud., mi querido presidente, de una manera tan directa.
El tercero y último es el más egoísta de todos y es un deseo para mí y me lo pido a mi mismo, porque soy el único, que realmente puede hacer que se me cumpla. Mi deseo también es muy cortito, pero necesita una voluntad titánica y de ahí, que prefiera escribirlo en una carta abierta, que me obligue de alguna manera, a sentirme presionado a tener que realizar mi deseo, ya que de lo contrario, no solo sentiré que me fallo a mi mismo, lo cual resulta bastante fácil de conllevar, pero el sentir que le puedo fallar a todos aquellos que lean esta carta, me obliga en mayor medida, a cumplirlo.
Sin mas preámbulos, mi deseo es el de poder recordar, en todo momento, lo feliz que soy, por estar vivo, por estar sano, por poder comer todos los días, por llevar una vida sana y alegre y así, al recordar lo enormemente afortunado que soy, pueda de manera constante, volcar esta alegría y esta enorme fortuna, que la vida me da, en todos aquellos compatriotas míos, que no tienen la misma felicidad que yo, que no tienen la misma fortuna que yo y así, de esa manera, podré retribuirle a la vida un poquito de todo lo que ella me da a mi. Como verán, el deseo es difícil, pero de noble final y mis queridos camaradas, esas son las metas por las cuales en verdad vale la pena hacer un esfuerzo.
Mis estimados camaradas, esos son mis deseos, como verán no necesito para nada al niño Jesús, yo me imagino que el, en estas fechas, esta muy ocupado llevando estrenos y juguetes, a todos aquellos buenos cristianos, que tanto practican las palabras de su señor Jesucristo, “Caridad, Bondad, Austeridad”, pero bueno, realmente no vale la pena gastar tinta en eso, espero que al igual que yo, Uds. puedan pedir sus deseos y lograr o por lo menos tratar, de que estos se les cumplan.
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