Desde que el Comandante Chávez, definió, siendo cierto o una mentira piadosa, que su actividad política, empezó a vislumbrarse cuando a penas era “Tribilín”, comenzó allí su responsabilidad histórica de los primeros pasos, tal como lo hicimos, siendo liceístas, toda una generación de muchachos venezolanos en los años 70 siglo XX, con el mismo arrojo, espíritu de sacrificio, riesgo y valentía de historia, guiados por la orientación política e ideológica de Douglas Bravo y Francisco Prada, cuando empezamos a militar en el Mov. Pol. Ruptura algunos, otros en el Partido de la Revolución Venezolana; sin embargo, al asumir la carrera militar, Hugo Chávez, marcó una diferencia con el resto de nosotros, esto porque el hacer conspiración revolucionaria en las FAN, no era cosa fácil si tomamos en cuenta que en las Fuerzas Armadas hubo muchos y bien conocidos intentos infructuosos, basta revisar los acontecimientos heroicos de Carúpano y Puerto Cabello, así como las deserciones de oficiales que tuvieron que irse, unos a la lucha directamente en los frentes guerrilleros, como Moncada Vidal, otros de baja al ser descubiertos, como los comandantes William Izarra (voluntaria) y Luis Alfonso Godoy (por expulsión) porque en los cuarteles se corría el riesgo de perder cualquier proyecto revolucionario y peligrar hasta de muerte cuando los aparatos de inteligencia y represión si funcionaban.
Esta situación de paciencia y mesura que llevó el comandante Chávez, seguramente y en los primeros años orientado por Douglas, para permanecer como militar activo y con la visión de conformar una fuerza militar capaz de enfrentar a la oligarquía para derrotarla, no debe verse como un hecho casuístico, pues, a mi juicio tuvo que ver con la convicción y la capacidad de organización, el desprendimiento y el compromiso de historia mantenido por Chávez, presentándose como un planificador de tácticas que lo llevó a esperar que las condiciones combinaran lo objetivo y lo subjetivo, cerca de 20 años, moviéndose en un terreno sumamente cuestarriba, para captar jóvenes oficiales que se incorporarían al embrión del Ejercito del Pueblo Bolivariano, hasta que apareció el pueblo para dinamizar los acontecimiento el 27 y 28 de abril 1989 en adelante, marcando la estrategia en el tiempo para la actuación de los militares patriotas el 4 de febrero y 27 de noviembre 1992.
Ahora, que culpa personal tiene el Comandante Hugo Chávez de que Henry Falcón no haya agarrado la carrera de las armas para que fuera el gobernador de Lara el líder de la Revolución y se hubieran invertidos los roles en la historia actual? Acaso no puede entender Henry Falcón que no se puede romper con la historia en presente que coloca a Chávez en el sentimiento del Pueblo de la actual generación? Por qué no se analiza bien y entiende que su protagonismo debe ser regional o a lo sumo como Diputado Nacional o en algún Ministerio porque de lo contrario, independientemente de los errores cometidos por el Comandante Presidente, tiene que ubicarse en el lado de los que confrontan y odian a Chávez y por ende a quienes lo aman y lo seguimos abrazados de las luchas antiimperialistas que se tejen por toda Latinoamérica? Lo demás es perder la perspectiva que esta historia del Siglo XXI nos tiene.
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