Caracas, mayo 2 - El diputado suplente a la Asamblea Nacional (AN), Ricardo Sánchez, denunció que la fracción de la derecha que ha dirigido los ataques violentos de los últimos días contra instituciones y personas que apoyan al Gobierno Bolivariano, pertenece al mismo sector que perpetró el golpe de Estado de 2002.

"No catalogaría a la oposición como un solo bloque, son varias fracciones las que están allí, por un lado, una que transita por la vía democrática, y por otra, una fracción que no escapa de la sospecha del golpismo, aunque en este momento quiera hacer ver que está ante una lucha electoral, una lucha democrática", destacó en entrevista con AVN.

Describió que en los sectores radicales de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), "sin duda están los partidos Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular, que tienen una agenda oculta, distinta a la democrática (...) hay otro sector que es el que quiere continuar trabajando en democracia".

El parlamentario insiste que "Henrique Capriles no representa a toda la oposición venezolana", que apenas es el dirigente de una fracción de la derecha nacional, y comparte una toma de decisiones "sectaria y cupular" con Leopoldo López y Julio Borges, a quien describió como el más violento de la dirección de derecha.

Señaló que es comprensible que "el sector oficial sienta una amenaza a la paz ciudadana, en virtud de las situaciones de violencia que hemos visto en los últimos días", y que han dejado como saldo nueve muertos y 78 heridos, todos agredidos por grupos de choque de la derecha, por defender y apoyar la propuesta socialista.

"Aunque nos distanciamos de esa tendencia (violenta) de la oposición, sabemos que hay gente opositora que no está de acuerdo con los hechos violentos" que han enlutado al país en los últimos días, comentó Sánchez, por ello abogó por robustecer el diálogo entre todos los sectores políticos del país.

Criticó que la derecha exiga "el reconocimiento de una victoria que nunca obtuvo", y la exhortó a unirse al llamado diálogo que hizo el presidente de la República, Nicolás Maduro, aunque destacó que "no se puede dialogar con una piedra en la mano, como lo ha pretendido hacer un sector irresponsable de la oposición".

Sánchez enfatizó que el plan de desconocimiento de los resultados que dieron ganador a Nicolás Maduro "fue diseñado para darle una sombra de ilegitimidad a la presidencia. La idea de ellos era boicotear el inicio de la gestión de Maduro. Que no viviera tranquilo la 'luna de miel' que vive todo presidente recién electo".

La puesta en duda del triunfo de Maduro, vendría acompañada de una serie de acciones de agitación en la calle, y una vigilancia por parte de la oposición de las medidas aplicadas por el presidente para ir incorporando sectores descontentos a estas protestas. "Si el aumento del primero de mayo no era satisfactorio para los trabajadores, tratarían de vincular al sector estudiantil con el sindical", agregó.

El 26 de marzo pasado, Sánchez, junto a los parlamentarios suplentes Carlos Vargas y Andrés Avelino Álvarez, se deslindaron de la coalición de la MUD al no estar de acuerdo con su manera de hacer política.

"Nosotros nos desmarcamos de una política, nos separamos de la candidatura de Henrique Capriles, y denunciamos al país el plan preparado por la oposición para desconocer los resultados electorales", señaló.

Destacó que tras el retiro del apoyo a Capriles, por parte de estos tres parlamentarios, algunos sectores calificaron de ilógicos los señalamientos "por tratarse de una oposición que venía participando en espacios electorales, como en las (elecciones) legislativas de 2010, y que aparentemente se alejó de la trocha del golpismo, de esa vieja y mala forma de hacer política, como fue el Golpe de Estado de 2002, el Paro Petrolero y el retiro de todas las candidaturas en las elecciones legislativas de 2005".

Agregó que "en 2007 la oposición ganó con 50.000 votos un referéndum y el presidente Chávez reconoció a la oposición. Es ese mismo espíritu que quisiéramos que se expresara ahora".

Con el fin de aprobar una Reforma Constitucional, el presidente Hugo Chávez convocó un referéndum consultivo en 2007, en ese momento la opción del No —que rechazaba la reforma— alcanzó apenas una diferencia de 150 mil votos, en promedio, por lo que el mandatario reconoció la victoria de la oposición, apenas emitido el primer boletín de los resultados electorales por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Destacó que en aquél momento, el líder bolivariano no vaciló en reconocer la victoria de su adversario político "no es que esperaban los votos del exterior, o un error en las máquinas de votación para ver si alcanzaban el triunfo, el reconocimiento fue inmediato".

El diputado forma parte de la Comisión Mixta para la investigación de la agresión fascista de la derecha, la cual estará presidida por el parlamentario de la bancada socialista Pedro Carreño, y contará con la participación de 15 diputados de las comisiones de Política Interior y Justicia, Contraloría, Seguridad y Defensa, Desarrollo Social, y Administración y Servicios, con el propósito de investigar los hechos de violencia perpetrados el 15 de abril, por grupos de choque afectos al ex-candidato Henrique Capriles.