12 JULIO 2016 - La especulación y el acaparamiento de los alimentos, principal expresión de la guerra económica, viene atacando desde hace meses la producción de los panes salados, tanto así que algunos dueños de panaderías imponen el horario de servicio para la venta del producto, lo que acentúa las colas en determinado momento del día.
En un recorrido realizado por diferentes locales de las avenidas Baralt y Fuerzas Armadas se conoció que las colas empiezan a formarse a partir de las 3:00 pm, en algunos casos inician a las 5 cuando ya muchos han salido de sus trabajos.
Los panes más vendidos son las canillas y el campesino en Bs. 200 y 350, respectivamente. En la panadería Selecta C.A ubicada en la esquina San Enrique de la Av. Fuerzas Armadas, comenzaron a vender a la 1:30. Al preguntarle a una de las vendedoras sobre la frecuencia en la que expenden este rubo, dijo que dependía de cuánta harina disponían y que por lo general cuando hay, venden. “De resto no”.
En la panadería Zena, también de la referida avenida, uno de sus gerentes indicó que “yo trato de hacer todo lo posible por venderle a todos los clientes para que puedan llevarse sus panes y estén satisfechos, porque a veces me resulta difícil adquirir la harina que me distribuyen Monaca y Cargill”.
En las panaderías de la avenida Baralt, la mayoría no tenía largas colas de personas en busca de panes. Uno de los vendedores de un local que no poseía identificación, en la esquina Piñango, dijo que las personas ya conocían el horario de venta y por ello “nadie viene temprano. Todos saben que cuando hay pan, se vende a partir de las 4:30 pm”.
Con estas medidas han estado trabajando estos locales que apenas expenden dos panes por persona. Ante esto la Superintendencia de Precios Justos a realizado diversas fiscalizaciones en todo el país a fin de multar a aquellos que incurran en esta practica que genera colas y caos.