Nueva Orleans — Las operaciones de combate están en curso en las calles, después de las repercusiones del huracán Katrina, “para retomar por la retaguardia esta ciudad.”
“Este lugar se parece a una pequeña Somalia,” dijo este viernes el General de Brigada Gary Jones, comandante de la Guardia Nacional de Louisiana articuladas al comando de la Task Force. El general declaró a "Army Times" que centenares de tropas armadas bajo su mando preparadas para lanzar una misión masiva de seguridad. “Saldremos y tomaremos por la retaguardia la ciudad. Esta será una operación de combate para retomar el control de la ciudad.”
Jones dijo que la prioridad del ejército era establecer la seguridad en la ciudad. Funcionarios del ejército y la policía han dicho que existen grandes áreas en completo estado de anarquía.
Decenas de camiones militares blindados y Humvees arribaron este viernes, mientras centenares de tropas llegaron a misma zona en helicópteros Black Hawk y Chinook.
“Nosotros haremos cualquier cosa que haya que hacer,” dijo el Sgt.de primera Ron Dixon, de la Guardia nacional de Okahoma. “Empacamos para permanecer el tiempo que sea necesario.”
Mientras algunos pelearán contra la insurgencia en la ciudad, otros continuarán con las operaciones de rescate y evacuación. Los helicópteros retiran todavía centenares de personas desamparadas en los tejados de hogares inundados.
El Ejército, la Fuerza aérea, la Armada, el Cuerpo de Marines, helicópteros del servicio de guardacostas y la policía llenaron el cielo de la ciudad este viernes por la mañana. Según el oficial Jeremy Grishamn, portavoz del barco anfibio de asalto Bataan, la nave mantuvo sus helicópteros en el mar la noche del jueves después que varios helicópteros militares informaron haber recibido disparos desde el suelo.
Numerosos soldados dijeron a Times Army que habían sido víctimas de disparos por parte de civiles armados en Nueva Orleans. Portavoces de la sede del grupo de Comando de trabajo del Superdome declararon que ignoraban de que militares fueran heridos en la calle, aunque un soldado se recuperaba de las heridas de una escopeta producto de una lucha con un civil en la noche del miércoles.
“Jamás pensé que en un soldado de la Guardia Nacional sería el disparado por otros norteamericanos,” dijo el Sg. Philip Baccus del Batallón 527 de Ingenieros. “Nunca pensé que tendría que llevar un rifle en una misión de alivio de un huracán. Esto es un vergüenza.”
El Sg. Cliff Ferguson del Batallón 527 de Ingenieros indicó que sabe que hay muchas personas decentes en Nueva Orleans, pero dijo que debería permanecer allí motivado a las circunstancias.
“Esto hace que muchos de nosotros pensemos en renunciar.” dijo Ferguson. “Usted tiene que pensar acerca de si vale la pena arriesgar el pellejo cuando usted se da vuelta y alguien disparara contra usted. Nosotros no vinimos a aquí luchar una guerra. Vinimos aquí ayudar.”
