Sucedió en el supermercado al cual acudo a hacer mis compras, y fue tan desagradable presenciar lo que les voy a contar que si de mi dependiera, todos los funcionarios responsables de no tomar previsiones estarían de patitas en la calle.
Quien sabe por decisión de quién a ese Supermercado privado, de nombre Premium, en donde acude gente de clase media y alta, porque los precios no son muy apetecibles que digamos, para que sea frecuentado por el pueblo llano, llegaron buena cantidad de pollo y carne de MERCAL, y fue tal el desorden que se armó y el abuso de muchos, cual rebatiña en piñata rota, que incluso salían hasta con 12 pollos y muchos kilos de carne, sin que se les pusiera ningún inconveniente en la caja, cuando bien se pudieron haber previsto tales reacciones de la gente, y por los altavoces del supermercado, que siempre están activos informarle a los consumidores, que sólo podían llevar cierta cantidad, por ejemplo dos pollos y unos pocos kilos de carne; yo por supuesto me abstuve de cometer la desproporción, y preferí antes de someterme a empujones y hasta quien sabe que otras cosas, no llevar nada y me limité a observar mientras pensaba en lo mal planificado que se había hecho ese operativo, que no entiendo ni justifico, porque con ello se estaba seguramente privando de esos rubros de la dieta básica a muchas personas que en verdad sí los necesitaban para su consumo por sus condiciones de ingresos.
Se supone que los dueños del supermercado, que pienso no debió ser el único en que se realizó tal actividad, permitió el desorden pues seguramente como buen escuálido estaba consciente de que le iban a achacar la culpa al gobierno como en efecto se lo oí expresar a muchos.
Me pregunto, ¿quién fue el cerebro del que salió tal desaguisado?, ¿Estarán informados el Ministro del área y Samán de esa decisión, o fue con anuencia de ellos que se llevó a cabo?. La verdad es que me he devanado mis sesos y no le encuentro explicación lógica a lo que vi, que no pudo ser más deprimente.-
