El gobierno nacional acelera la ofensiva económica y en esta segunda etapa se incorporará la contraloría social a la inspección y fiscalización del cumplimiento de las leyes inherentes al área económica y específicamente a la Ley de Precios justos.
Ya han sido publicados los precios de los vehículos de la ensambladora Mitsubishi y de la Chrysler, teniendo los modelos más lujosos que llegan al país un tope máximo de 920 mil bolívares, que comparado a los precios que se comercializan en el mercado es prácticamente un 70% menos; situación que nos llena de beneplácito, pero hay que tomar las previsiones para que todos los ciudadanos puedan acceder a comprar dichos vehículos, evitando la mafia de algunos intermediarios y trabajadores de las agencias de vehículos, a quienes hay que darle bajo cuerda una suma considerable para que se anote al interesado entre los primeros de la lista; lista por cierto que debería ser verificada y chequeados los datos de quienes se anoten para corroborar no sean revendedores o que aparezcan personas que no tienen capacidad para comprometerse por un monto determinado y solo sea utilizado ese cupo como se hacía con los dólares de viajero. Otro aspecto que hay que meterle la lupa urgente, es el de las pólizas de seguro de vehículos, porque hay quienes cancelamos primas con las cuales se podría comprar un vehículo a los precios regulados en este momento.
Para efectos del control que se debe llevar es bueno la activación de la contraloría social por parte de los ciudadanos, en este sentido ya el gobierno nacional ha fijado las pautas, y en el caso de Margarita nuestro Gobernador Carlos Mata Figueroa anuncio la creación de jefaturas de la Superintendencia de Precios Justos (Sundde), dependientes de la superintendencia, pero propuestas y controladas por nuestro gobierno regional y el poder popular, a cuyos efectos también se designará un fiscal por municipio y por parroquia.
Esta segunda fase de la Ofensiva Económica busca impulsar la producción nacional y garantizar el abastecimiento de bienes y servicios a precios justos; en este sentido también está previsto apoyar la pequeña y mediana industria en proyectos de distinta índole dirigidos a elevar sus niveles de producción tanto en el área petrolera, petroquímica, construcción, industria, automotriz, agropecuaria, agroindustrial, turismo, textil, calzado, minería, comunicaciones y tecnología.
A los fiscales de la Sundde los estarán apoyando en forma mancomunada los efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, las autoridades locales y regionales, los consejos comunales, las comunas y el ciudadano común, cuya opinión será tomada en cuenta y verificada su respectiva denuncia para proteger el dinero que se gana con mucho sudor nuestra clase trabajadora.