Para Dante Rivas, otra vez, Dios quiera lo lea

Abrigo la esperanza, y más cuando un funcionario como al que me refiero en el título, escribe también por esta página, que lea no sólo mis comentarios, reflexiones y autocriticas que pretenden ser constructivas y a veces intentos por aportar con propuestas, que muchos de mis lectores reciben como positivas pero que lamentablemente no llegan a las instancias a que deberían llegar, donde se toman decisiones a nivel de gobierno.

Dante, quien ahora está al frente de la lucha contra la guerra económica, que según el Presidente obrero y primer chavista en la primera magistratura, estamos ganando, pero que al menos aquí en los estados fronterizos la sensación es que estamos siendo derrotados, es un funcionario que llega a este cargo precedido por una fama bien ganada de eficiente, que logró al enfrentar en un organismo como la antigua DIEX y ahora SAIME, al monstruo de una corrupción incontrolada que afectaba no sólo a quienes por obligación teníamos que recurrir a sus servicios, sino lo que es peor que conspiraba contra nuestra soberanía y era prácticamente una rendija por la que se coló todo tipo de criminales de las más variadas características.

Dante logró darle a ese organismo otra cara, depurarlo y ponerlo de verdad al servicio del pueblo.

Después en el INTT, en poco tiempo hizo lo propio. Ahora ha sido colocado por el Presidente, quizá ante el más difícil reto, hay fe y esperanza del pueblo que sufre las consecuencias de la voracidad capitalista puesta al servicio de los intereses imperiales y sumada a la guerra económica conspirativa con armas como la baja producción, el acaparamiento, la especulación y la usura.

Ahora bien, Dante solo, no va a poder si no acomete a la mayor brevedad la ampliación de manera significativa del contingente humano, (aclaro, no me refiero a más burocracia) a todos los niveles de la estructura territorial, es decir en las capitales, y en ellas en cada municipio, parroquias, barrios y caseríos, para que en una especie de operación envolvente se llegue hasta el más pequeño expendio y que se busque una fórmula para que las inspecciones dejen, definitivamente liquidadas, las armas que la contrarrevolución está utilizando en esta guerra, pues bien sabemos que cuando una inspección llega a un comercio, descubre violaciones evidentes a la Ley, sanciona e incluso informa casi que exclusivamente por los medios oficiales, pues es una realidad que los privados están sumados a la conspiración, y los inspectores se retiran, casi que automáticamente, los delincuentes vuelven por sus fueros lo que hace prácticamente imposible ganarle definitivamente la guerra a una derecha que pretende con el respaldo evidente del gobierno gringo, repetir aquí, lo que en Chile dio al traste con una revolución muy parecida a la que aquí Chávez inició, enfrentando todo tipo de acciones conspirativas, y continúa Maduro enfrentando también otra réplica, pero contra armas más sofisticadas, que incluyen, como sabemos, acciones violentas que nadie duda en llamar terroristas.

Lo dije en un artículo anterior, en el país hay un altísimo número de personas que estamos dispuestos a que si se nos dota de una credencial que nos autorice a actuar, podemos. en todos los rincones del territorio, accionar los recursos de la Ley y garantizar con inspecciones ulteriores que no haya reincidencia.-

Es un contingente de voluntarios en el cual se ubican miles de jubilados de todos los organismos, cuya data reposa en los mismos y por lo tanto son fáciles de convocar para por esa vía contar con un alto número de personas que con seguridad se sumarian, ad honorem, a la lucha pues es un sector de los más afectados, por oro lado la milicia, como componente de la FAN, que cuenta a estas alturas con más de un millón de personas, bien puede ser ocupada con los mismos fines y si a ellos le sumamos los voluntarios de Comunas y Consejos Comunales, que incluso en cada cuadra, en cada manzana o vereda podrían convertirse en soldados de esta guerra, estoy seguro que la sensación de que estamos siendo derrotados, cuando por obligación por ejemplo hay que comprar un kilo de cebolla en más de 120 bolívares, una batería en 3.500 si no se quiere hacer una cola de semanas, un kilo de leche en polvo en 150, cuando se consigue en manos de revendedores, pues en los expendios ni para remedio, un repuesto que vale 700 en 3000 o más, también si se encuentra, un medicamento que cada semana sube más del 20 por ciento, y cientos de etcéteras.

A este suplicio nos enfrentamos todos los días, aquí en frontera más que en el resto del país, como sabemos por el fenómeno del contrabando tradicional, ahora sin renunciar al que se hace con grandes gandolas con complicidad de funcionaros, como ha sido reconocido, incluso pos la más alta autoridad militar del Táchira, cuando declaró a los medios que se estaba investigando sobre estos casos, pero lo grave es que no pasa nada, los culpables nunca aparecen y ahora con la suma de la modalidad del llamado bachaqueo interno y hacia afuera que deja vacíos los anaqueles.

Es de suponer que Dante está bien enterado, su bien ganada fama no sólo de eficiencia sino de honestidad es óbice para que así lo creamos, entonces como buen revolucionario que es, no cabe duda, sinónimo de inclusión, tiene que recurrir a recursos que permitan pasar de una etapa de acciones esporádicas, casi que espasmódicas o los llamados operativos, a los que no se les hace seguimiento y que parecieran simples actividades efectistas, a una etapa agresiva, masiva y envolvente simultánea en todo el país, que no deje desde el comercio más grande hasta la bodega más pequeña sin someter al imperio de la Ley y no permitir que involuntaria, voluntariamente, o sin querer queriendo, los inescrupulosos operen en beneficio de las pretensiones imperiales de, con la participación abierta de los apátridas de aquí, ponerle la mano a nuestras riquezas.

Dante a estas alturas ya debe, seguramente, tener listo un plan estratégico para enfrentar con éxito la guerra que hoy mismo, existe la sensación estamos perdiendo. Hay propuestas que no han sido oídas, por este medio, personalmente he hecho algunas, igual que otros articulistas pero pareciera que nuestros funcionarios con poder de decisión no leen esta página y si la leen se hacen los de la vista gorda, sobre todo cuando con críticas constructivas se les quiere decir lo que oímos del pueblo a cada día.-

Voy a poner toda mi fe y esperanza para que Dante lea estas humildes opiniones, aunque sea por curiosidad, si es que ve el título y así como una vez cuando se iniciaba como jefe de la antigua. ONIDEX, después DIEX y ahora SAIME, me leyó, me escribió y solucionó, esta vez, él tenga la misma actitud y yo la misma suerte.-

Dios quiera y en próximo artículo les pueda contar de nuevo a mis lectores que al Dante de la DIEX, ahora SAIME, no le han hecho mella los cargos, ni los reconocimientos o alabanzas y que sigue siendo el mismo muchacho de los comienzos de la Revolución, decidido, sin miedo, diligente y dispuesto a repetir, en este su mayor y difícil reto, los éxitos del pasado. Veremos.-

Mi dirección de correo se encuentra en mi cuenta como articulista de Aporrea por si Dante me lee y escoge por esa vía contactarme, si no pues simplemente tiro la toalla y seguiré refugiado en mi catarsis de escribir, a veces para pocos, a veces para muchos.-


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Saúl Molina


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