Estando sentados en una reunión familiar Ramón, Arturo, Manuel, Luis, Carlos, Francisco, María, Luisa, Carmen, Teresa entre otros, el tema más sonado fue el controversial Dólar Electrónico.
Suben el telón y aparecen sentados en el patio de la casa Manuel, Ramón, Teresa y Luisa. Cada uno de ellos muy interesado en saber cuando el gobierno autorizaría los dólares electrónicos y si sería verdad el aumento de ellos. Toma la palabra Luisa por ser la más experimentada y dice:
- Creo que los dólares electrónicos quedaran iguales que el año pasado, muchas serán las vagabunderías que se han hecho y las que se podrán hacer, ya que el propósito del gobierno es que sean disfrutados por el pueblo y el mismo pueblo los desvía y comenten ilícito cambiario con ellos.
- Dice Manuel- yo apenas los utilice el año pasado y compre un resort en Margarita, disfrute muchísimo y no contribuí al ilícito cambiario.
- Dios de mi vida – comento Teresa- mis hijas si lo utilizaron, se fueron a Aruba y trajeron efectivo para cambiarlos, así recuperarían los gastos del pasaje aéreo, que de paso les salió bastante caro y los cambiaron en el mercado negro.
- Ramón que no se quería quedar atrás, dijo- yo si me fui con mi esposa a Miami, no salíamos del hotel, solo comíamos sardinas, atún y galletas, ahorramos todo lo que pudimos y aquí en Venezuela los cambiamos, con el dinero que obtuvimos compramos un carro.
En la cocina comentando estaban Arturo, Carlos, María y Carmen, sobre la disposición del gobierno para el otorgamiento de los dólares y el buen uso que deberían darle. Unos a favor del ilícito y otros argumentando que si los vendían podrían mejorar su economía familiar.
En todas las discusiones (Las del patio y las de la cocina) Luis caminaba de un lado a otro, escuchando las 2 conversaciones. Cansado de ir y venir, realizo las siguientes preguntas al aire, para ver quien tendría los pantalones bien puestos y respondería.
1.- ¿Quién será más socialista: La persona que vende los dólares o quien los compra? Quienes escucharon su pregunta, se miraron unos a otros e hicieron caso omiso.
2.- ¿Ser socialista que significa? Continúo escuchándose un silencio sepulcral.
3.- ¿Puedo yo, siendo socialista vender o comprar dólares electrónicos, para darle un uso indebido?
4.- Si la ley me indica que al darle uso diferente a los dólares electrónicos estoy cometiendo ilícito bancario, ¿Podría decir que soy un ladrón?
Cada vez que Luis indicaba una pregunta el silencio se hacía más profundo, unos a otros se miraban y no sabían que decir.
Luis dejo pasar un buen rato y concluyó:
Si yo soy socialista utilizaré mis dólares tal como lo estipula la ley, los gastare comprando algo que necesite o viajare. No caeré en el delito de venderlos, revenderlos o comprarlos, para no desangrar más al país. Así cuando me de golpes de pecho indicando que soy Chavista en mi mente no estarán revoloteando los dólares electrónicos como ovejitas al matadero.
Para reflexionar: Ponte tu a pensar en eso, día a día se escuchan comentarios como los presentados, se hacen las compras y las ventas y no pensamos en el hueco negro que se le genera país con ello. Solo vemos en el beneficio que podríamos obtener. Más de un chavista no piensa con el corazón de la Patria de Chávez, piensa con el bolsillo, por ello y otras cosas más, el país esta cómo esta, caminando torcido sobre líneas derechas.
Amigo y amiga, antes de vender o comprar, `piensa cuanto invierte el gobierno para darte ese beneficio.
adela_p@hotmail.com