De entrada, comer no espera, así que si no se lo hace hoy y se afirma que mañana sí, el punto es que no se comió ayer.
Por ejemplo 1, los bombillos ahorradores, si los presupuestan para Valencia, posiblemente sean interceptados en la ruta, tal vez, a la misma salida de los depósitos correspondientes. Por ejemplo 2, a Valencia los tales 5 bombillos de reemplazo de los otros brillan por su ausencia, en esta parroquia, El Socorro. Los vi una vez que los traficaba sin organización alguna un “prebachaquero”; de eso hace varios años. Sin embargo, muchas ferreterías de poco capital, y afines los tenían como arroz en ese entonces.
Si antes eran desviados, cuando esos bombillos valían 1 testículo, ¿cómo lo serán ahora que valen hasta 2 y más testículos? Ya hicimos notar la carencia de mercados a cielo abierto. De las tales bolsas de comida, tal vez, las de Valencia, parroquia El Socorro, ya fueron digeridas y descomidas o alguien desconocido está haciendo sus reservaciones.
El Pdval, otro ejemplo, tiene semanas que no vende sino productos extraños a la cesta básica. Pero no se nos informa qué se está planeado, no se nos habla de la posible logística que podría justificar semejante ausencia o tardanza de servicios como los nombrados.
Basten esos ejemplos para inferir que todo lo demás funciona de igual manera. Las cadenas burocráticas están luciendo más encarecedoras de la vida que las comerciales, y cuidado si los comerciantes marcan sus precios al que se los venderían esos contactos desviadores de esos servicios y demás ofertas que con tan buena intención salen de Miraflores. Esta inferencia no niega que dólartoday tiene su partecita en dicho encarecimiento.