Los hechos políticos que están sucediendo a diario en el avance del proceso revolucionario, aparte de tener muy preocupados a los fascistas del variopinto panorama opositor, reducidos ellos mismos a su mínima expresión, debe servir para que desde el proceso de la revolución bolivariana revisemos un par de hechos.
Se avecina un nuevo escenario político-electoral: La Enmienda Constitucional. Llama preocupadamente la atención que en cada proceso electoral se activan las sanciones desde el SENIAT, BANFOANDES y el IVSS. La primera modalidad dentro de estos organismos, específicamente es que no se hable de política, la derecha cómoda incrustada allí, de criterios políticos, ni idea tiene.
En estos cuerpos suceden cosas extrañísimas, y es que dentro de su nivel gerencial no se nombra el concepto política, menos aún en lo referente a los empleados. Como no existe criterio político el resultado es que no haya conciencia crítica, por lo tanto se creen una especie de súper gerentes y empleados, donde nada ni nadie los toque.
Un significativo número del personal en estas instituciones es extraño ante cualquier avance revolucionario que desde el gobierno se desprenda, el trato belicoso de estos organismos hacia el público, marcadamente técnico y sin ningún acompañamiento social, explica cómo estos organismos mantienen en sus nóminas un importante número de opositores, ¿cómo entran? Quiénes de los gerentes o directores aprueban el ingreso de tanto contrario a las instituciones de la revolución.
Por esto tenemos que justo antes de cada proceso electoral se observe un gran movimiento en las actividades de estos organismos, cerrando avenidas y cuadras de cuanto negocio de gente humilde y trabajadora se les atraviese, se multa por cualquier cosa, cualquier aberrante elemento es usado para imponer grandes sanciones.
Cualquiera vulgar explicación es esgrimida por los funcionarios del SENIAT al momento de penalizar cualquier negocio, practican un catálogo sacado de los más vulgares argumentos técnicos utilizados para justificar sanciones. Me quedo corto y es que estos operativos se intensifican justo antes de cada proceso electoral. Lo mismo, pero en otro nivel de descaro ocurre con BANFOANDES al momento de embargar humildes productores a quienes les han otorgado créditos sabiendo desde un principio que no tenían ninguna accesoria. Pagan igual situación todos aquellos que sirvieron de fiadores en estos préstamos proporcionados al estilo de la cuarta republica, es decir, no se asesora y esta fórmula quiebra a quienes creyeron ver en la esperanza de un crédito la salisa de su pobreza y desempleo.
Aparte de esto, nos preguntamos ¿qué elemento gerencial se utiliza en BANFOANDES para publicar por todo el país y a qué costo todo lo que significa estar anunciando la apertura de cientos y cientos de agencias? Acaso la alta gerencia no observa lo que impávidos miles de usuarios tienen que soportar al entrar en el colapso de sus oficinas. En cuantas de estas mínimas agencias a estas alturas se planifico, entraran en un plan de servicios con la amplitud de una agencia donde los ciudadanos se sientan atendidos con decencia, donde se trate al público de la mejor manera, cosa que no sucede en ninguna de estas micro-malas agencias.
Como si fuera poco los abusos y mal trato que ofrecen los del SENIAT y BANFOANDES, ahora se le suman los del IVSS, señalando a un gran número de negocios que están en mora y no hacen nada con los organismos del estado que deducen del sueldo de sus empleados lo referente a la seguridad social y nunca lo depositan. Esto sucede en nuestro gobierno bolivariano y revolucionario con una veintena de ministerios y otros cientos de organismos autónomos dependientes de gobernaciones, alcaldías, entre otros, que se quedan con las deducciones de sus empleados.
En estos cuerpos apolíticos incluso se prohíbe manifestar la voluntaria adhesión al ciudadano Presidente Hugo Chávez. Todos los organismos han crecido exponencialmente, se ha quintuplicado sus sueldos y beneficios, esto sin contar con los bonos, créditos de sus cajas de ahorro, aguinaldos, entre otros; y prohíben, léanlo bien, prohíben que cualquier ciudadano respetado de esta país entre incluso a los estacionamientos de sus sedes con una calcomanía en apoyo al PSUV o en apoyo al ciudadano Presidente, Hugo Chávez.
Esto no es ecolalia, relato de la manera más llana y franca a lo que han llegado, incluso al descaro de enviar a militares, si, los militares del ejercito legendario y héroe de las cinco republicas, los mandan a exigir en el peor de los tonos que abandonen la instalación con su vehiculo porque tienen en sus vidrios una calcomanía del Señor Presidente Chávez con el fondo del PSUV. Aberrante todo esto dentro de un proceso bolivariano, donde el Presidente Hugo Chávez realiza esfuerzos día a día para que todos nos sintamos incluidos y la cuestión de la diferencia se suprima.
Por esto los funcionarios que deniegan de lo político, maltratan a sus naturales usuarios: el soberano. Parte de estas cosas tenemos que revisarlas o acaso no saben que el ciudadano es un ser sensible, delicado, que a la hora de votar ya ha pensado como los organismos más importantes del país los ha tratado, es decir, mal. Porque los que desde allí se esconden agazapadamente dañan este proceso, diariamente atacan, persigan, pantallean y se inflan de sus cargos, esgrimen que son intocables, maltratan al pueblo humilde, humillando sus más nobles intenciones. La mayoría que desde allí se mantiene sojuzgan la valentía y decencia de nuestra población.
Tomemos el caso del Estado Táchira de donde son la mayoría de los que dirigen y han dirigido estas instituciones. El estado Táchira tiene 29 municipios, antes de las elecciones del 23 de noviembre se tenían 23 alcaldías en manos del PSUV, ahora, solo se tienen 16 y las restantes 13 cayeron en manos de la oposición. Es el estado de toda la republica donde se perdieron más alcaldías, sacó uno de los números más elevados de legisladores de la oposición, aunque la mayoría la mantiene el chavismo. El Táchira junto con el Zulia está en el apátrida proyecto opositor de La Media Luna, esto sin contar con el avance paramilitar.
El Gobernador saliente, Ronal Blanco La Cruz, desaprovechó el impulso que desde el Táchira se les debió dar a estos organismos. Ojala en el país no vuelva a repetirse determinados hechos que desde este estado facilito un gobernador con un gabinete de Directores en su mayoría Evangélicos. La Conferencia Episcopal Venezolana cometió el error de enviar a este estado al Señor Obispo, Mario Moronta, para sacarlo de los alcances del Presidente Chávez por el afecto que ambos se tienen.
El Señor Obispo se mantuvo firme, como un verdadero militante de la verdad, ha sido ejemplo de altruismo a las ideas en las cuales está formado. De haber enviado a este estado a un Baltazar Porras o a un Licker la derrota hubiese sido peor, hubiesen activado a todas sus iglesias contra el avance evangélico que en esta zona fue repugnante.
