No se puede negar la diferencia entre la intervención de los bancos por el gobierno del Presidente Chávez y la crisis bancaria del año 94. Ahora se defiende el dinero de los golpistas y en el gobierno de Caldera se le inyecto dinero a los bancos quebrados para que la final siguieran tan quebrados como siempre, olvidando el interés de la gente común.
Era de imaginar que al gobierno de Caldera poco le interesaba la gente como lo demostró, simplemente su discurso el 4 de febrero fue para revivir como muerto político que era, pero al final terminó acatando los mandatos del Fondo Monetario Internacional.
Pero como siempre aparecen los defensores de la democracia representativa, la escualitud, y empiezan a atacar al gobierno complaciente supuestamente con la quiebra de los nuevos bancos por el apoyo prestado a una “supuesta” burguesía bolivariana”.
La actitud asumida por el gobierno ha sido la más acertada en defensa de los ahorristas y la pronta detención de los banqueros y cómplices de la quiebra de los bancos ya conocida.
¿Cuántos banqueros presos existieron en la crisis del año 94?
Bueno que se podía esperar de un gobiernito que llego al poder asumiendo un papel de defensor del pueblo para terminar aplicando medidas por poco más extremas que las de su antecesor CAP. Que podía hacer Caldera representante de la oligarquía más rancia en Venezuela.
Pero como es de imaginar con esta problemática bancaria la esculitud usaría de cuña en contra de la Revolución Bolivariana pero no contarían que el Presidente Chávez saldría con mejor imagen al enfrentar con tanto tino la crisis.
Esos son los comentarios que se escuchan en las calles de nuestro querido país que cada día existen menos personas que creen en los rumores de los medios de comunicación escualidos que no solamente son impresos y audio visuales sino repartidos con los comentarios que dejan de entrever tratando de crear angustia los mismos detractores del gobierno.
Les guste o no Venezuela cambio y no volverán.
La Patria de Bolívar dijo un NO rotundo a volver a los tiempos de la IV republica, a los tiempos en que FEDECAMARA definía los precios de los productos de la cesta básica, los años de los atropellos policiales, a la corrupción de los adecos y copeyanos y a todos los desaciertos que se vivieron en los tiempos del Pacto de Punto Fijo.
Sabemos que en este proceso existen muchos errores pero nunca como los cometidos en aquellas épocas ya superadas. Vamos en construcción la Patria que nuestro Libertador soñó. Y ahora Venezuela es de todos.
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