Es el título del libro de Víctor Moreno, el cual reúne propuestas para despertar el deseo de leer y escribir poesía. Publicado por el Departamento de Cultura del gobierno de Navarra en el año 1998. En la Primera Estrofa, que vendría a ser el equivalente al capítulo primero, existen temas que pudieran parecer obvios, quizás de inicio y elementales; sin embargo, el trabajo que trata el tema poético desde los adolescentes y docentes, resulta totalmente pertinente dar inicio a la lectura de ese libro por esas lides. A la pregunta cómo son los comienzos poéticos de los alumnos. La respuesta de Moreno dice: Hagamos memoria, La mayoría de ellos, con lo que nos encontramos en Secundaria, o no han conocido ningún verso poético a lo largo de Primaria y, por consiguiente, son incapaces de recitar un poema, y de no recordar el nombre de ningún poeta; o, por el contrario, si lo hicieron, lo fue al estilo académico, de tal modo que han adquirido una cierta y comprensible propensión a renegar del verso y de sus encantos, por considerarlo sustancia de poco alimento, de nula utilidadpráctica,…Si socialmente no goza de ninguna valoración, . Y si para colmo, escuchar, en boca de algunos… que la poesía es cosa amariconada, apaga el fuego y vamos a encender otro. Sinceramente, remata, leer y escribir poesía en la institución educativa, es, cada vez, una actividad atópica, inusual, escandalosa.
Las preguntas saltan en todas direcciones como quien hace una ejercicio de mayéutica: qué es la poesía, qué es lo poético, cómo puede distinguirse la comunicación poética de otros tipos de comunicación, qué profesor de lengua y literatura cultiva el hábito de leer a sus discípulos algún poema, leer un libro de poesía en público por un adulto es un buen ejemplo para los adolescentes. Lo narrativo ha barrido sin piedad todo asombro poético. Todo puede convertirse en poesía. Todas esas interrogantes, que parecen obvias y transitadas colocan el trabajo en su punto de iniciación, en su lugarde arranque, justo y necesario. Nos interesa conocer el estado de crisálida, de capullo o de gusano, en el que se hallan los alumnos en relación con lo poético. Si un alumno no ha leído jamás un poema a lo largo de su periplo de Primaria o de Secundaria, quién será el culpable de este vacío, él, o el profesorado que le ha tocado en mala-suerte. Si los alumnos de Secundaria siguen considerando que leer y escribir poesía es caso de maricones, a quién atribuir la creación de tan impresentable prejuicio y estereotipo.
Propone dos métodos, el divergente y el convergente, para alcanzar, de algún modo, el concepto de lo poético con sus respectivos ejercicios con los alumnos. El más sencillo de todos: conversar, dialogar, darle a la lengua, perder el tiempo en esa cháchara insustancial, sin transcendencia alguna, dalequedale a la saliva; puro gozo de jugar con las palabras. Cada uno suelta su lengua por los cerros de la labia. Método divergente, diversificador, respetador de salidas incongruentes, irracionales, también lógicas, llenas de sentido común, irreverentes, mediocres, en definitiva, poéticas.Propone que cada participante llene el siguiente cuestionario de manera libre y libérrima:
La poesía es………… Y yo la entiendo como…….. Y me sugiera……..La simbolizaría……….. A mi modo de ver, las características de un poema son……….Y esa persona me huele a poeta porque……….En general, denotan comportamiento poético los siguientes………Ahora voy a escribir las fechorías de la poesía……..En definitiva, me pregunto por qué hay poesía………..Observo a mi alrededor, y a veces en mi misma persona, que las consecuencias de que exista poesía en el mundo son…………Concibo un mundo lleno de poesía del siguiente modo y moda…………..Qué pasaría si todos fuéramos poetas……….En definitiva: qué poesía……..
El otro método el Convergente, también sencillo,parte y termina en la propia lengua, pero, con más reposo, con más orden, con más racionalidad, con más respecto, intentando converge con la opinión del otro, afirmándola, contrariándola o negándola.Este método es indudablemente académico. Debatiendo, madurando la propia idea, adornándola con razonamientos. Su nombre intenta alcanzar que todos los participantes lleguen a una misma costa teórica, a un mismo puerto conceptual. Intenta definir lo poético. Víctor Moreno se apoya en el libro de Martínez García, Propiedades del Lenguaje Poético. Este autor clasifica un conjunto de asertos para referirse a la poesía como realidad anímica, comunicación, medio de conocimiento, como medio de sensación y emoción y como lenguaje especial. En ese sentido precisa: propone las siguientes definiciones:
La poesía es una realidad anímica y psíquica.
La poesía es comunicación
La poesía no comunica nada, sólo sugiere.
La poesía es comunicación ilusoria o ficticia.
La poesía es un medio de conocimiento.
La poesía supone una deformación interesada, parcial, de la visión del mundo y de las cosas.
La poesía no tiene ninguna finalidad práctica.
La poesía es una sensación interna, espiritual, producida por todo lo bello, lo armonioso, lo perfecto.
La poesía es un lenguaje especial.
La poesía es un lenguaje desviado. Pero corregible, de la lengua habitual.
La poesía es un lenguaje sin referencia a la realidad, porque la realidad a la que se refiere no existe, es imaginaria, o existe sólo como creación metal en el lenguaje mismo.
El lenguaje se refiere a sí mismo.
La poesía no es exclusivamente un lenguaje figurado, pues este tipo de lenguaje se da también fuera de la poesía.
El libro Va de Poesía, cuya autoría le pertenece a Víctor Moreno, invitaa una lectura necesaria, obligadamente gozosa: por un lado permite abordar el estudio de lo poético desde lo lúdico para abrir el apetito poético.Trabajo y juego no tienen por qué ser dos realidades contrapuestas. No obstante, previamente acota: Todo el mundo que lo sabe conoce el origen etimológico de la palabra trabajo. Exactamente procede de tripallium…era un instrumento de tortura que servía para que el prisionero, generalmente un voluntarioso hereje, cantara lo incantable. Y cantaba.Por otro lado, la escritura poética desarrolla el habla literaria, así como las pautas formales y temáticas. Los juegos poéticos con letras, palabras y frases, así como las técnicas vanguardistas, los elementos poéticos por antonomasia y un tema, muy particular, cantar y bailar el poema. Todo lo citado forma parte del contenido programático del trabajo. Víctor Moreno en esa misma colección ha publicado sendos trabajos: El deseo de leer y el deseo de escribir, Es, sin duda, una francotirador instalado en la escuela. El libro, Va de Poesía, constituye un goce lúdico con las palabras.Moreno cita el poema El Oficio de Poeta de Agustín Goytisolo:
Contemplar las palabras
sobre el papel escritas
medirlas, sopesar
su cuerpo en el conjunto
del poema y después,
igual que un artesano,
separarse a mirar
como la luz emerge
de la sutil textura.
Así es el viejo oficio
del poeta, que comienza
en la idea, en el soplo
sobre el polvo infinito
de la memoria, sobre
la experiencia vivida,
la historia, los deseos,
las pasiones del hombre.
La materia del canto
nos ha ofrecido el pueblo
con su voz. Devolvamos
las palabras reunidas
a su auténtico dueño
Algunas interrogantes quedan suspendidas, vigentes, imperecederas, presentes, que sólo la lectura del libro, la realización de los ejercicios y el recorrido documental del trabajo ofrecerá pistas para su desenlace, para atreverse a pensarlas o, por lo menos, volver sobre otroras ideas y conceptos que siguen en la órbita de la reflexión teórica o están como un pasado, siempre heredado, tanto para el presente como para el futuro. Acrósticos, constelaciones semánticas y abstracción poéticas seguirán siendo atisbos, intuiciones, embriones y puntos de partida. Acabo de apagar / una sonrisa falsa/ en el instante en que me sentí/ viernes cansado de la tarde. Dadaísmo, Futurismo, Cubismo Surrealismo, Ultraísmo, seguirán siendo tendencias de obligada consulta y estudio; investigación y acercamiento. Qué es la poesía. Qué elementos tiene la poesía que no posee la prosa. Cuál es el origen de la poesía. Cuándo la filosofía y la poesía se separan. Todavía la inspiración juega su papel en la poesía. Cuáles son los fines de la poesía. Leer poesía cambia a las personas. La palabra poética se distingue radicalmente de las formas efímeras del lenguaje. Cotidianidad y poesía. Y así surgen las interrogantes e incógnitas; entresijos y enigmas; secretos y misterios. Escribir poesía debe ser un saber y un sentir, incluso en el aula de clase. En el tiempo destinado para el aprendizaje lingüístico es menester señalar un tiempo y espacio para su realización. Es menester crear contextos de aprendizaje, contextos de investigación, situaciones lúdicas, entre otras, para la lectura y la creación poética. La mejor droga es que los participantes perciban y sientan que la lengua materna, la palabra, son liberadoras. Así como el arma del devoto puede ser el santo Rosario; el arma de la soberanía cultural y lingüística es la palabra creadora. Vítor Moreno cita a Ben: el arte no se ha de comprender, el arte deja impresiones y esparce gérmenes, ésta es su ley.