Esta es la historia de nunca acabar. Innumerables personas han fallecido a causa del hampa en estos caminos tras haberles espichado sus neumáticos o haberles lanzado objetos contundentes hacia los parabrisas y así pierdan el control de sus vehículos, se estrellen y una vez moribundos sean asaltados, secuestrados, heridos, violados y hasta asesinados.
Lo más increíble es que esto siga sucediendo en las autopistas de esta zona del país las cuales han quedado convertidas cada noche en un ring de disparos entre delincuentes y policías, donde muchas cosas pasan impunemente y nadie las detiene.
La verdad es que nada debe sorprendernos, pues estas bandas están conformadas en su mayoría por funcionarios de los cuerpos de seguridad, lamentablemente la mayoría de los asaltos son cometidos por policías. Como poder explicar que esta delicada situación no haya sido detenida durante años.
El presidente Hugo Chávez inaugura nuevos tramos de autopistas e inmediatamente son tomadas por el hampa, teniendo que pagar los platos rotos los camioneros, autobuses de pasajeros y vehículos que se atrevan a circular sobre todo en las horas nocturnas.
Mientras, todos como tontos nos preguntamos: ¿dónde están los cuerpos de seguridad, dónde está el CICPC, dónde anda el SEBIN y la DIM, dónde andan los cuerpos de inteligencia de las gobernaciones que atraviesan estas autopistas, porqué han dejado proliferar esta situación?
Muy sencillo, porque la mayoría de quienes asaltan son funcionarios policiales y esto lo saben quienes a diario transitan esas peligrosas vías. Pero quién puede denunciarlos o decirles algo, será para que le pongan el ojo e igual lo asesinen.
La verdad es que los funcionarios destacados en puntos de control en las principales autopistas de estas zonas geográficas del país se la pasan cobrando vacuna, extorsionando, esta trágica realidad también es practicada por la “nueva” Policía de Tránsito y por los funcionarios de la Guardia Nacional “Bolivariana.
Si nuestros organismos de seguridad tuvieran conciencia de este grave daño hace años hubiesen penetrado a las bandas que operan en estas áreas y ya estuviesen desarticuladas. Estamos frente a un grave problema de seguridad nacional, si el Estado no puede penetrar y actuar contundentemente en contra de las bandas que operan con total alevosía y desvergüenza, como podemos nosotros escaparnos mañana ante la infiltración de grupos desestabilizadores que a diario quieren derrotar a este gobierno.
Con qué funcionarios policiales y con quienes pudiéramos un día a las primeras luces desarticular los grupos armados que quieran derrocar al gobierno si ni siquiera hemos podido acabar con estas bandas dentro de las policías.
Al Director de la Policía del estado Guárico José Luis Arzola lo asesinaron porque nuestros cuerpos de seguridad son cómplices y están penetrados con muchos de sus “compañeros” quienes se han desviado de sus servicios constitucionales.
¡Acabemos
con la impunidad o la impunidad acabará con nuestro gobierno! Paz a
los restos de José Luis Arzola.
Para: www.aporrea.org
Febrero 07 de 2012