En la misma medida en que Nicolás se crece y agiganta como nuevo líder hijo de Chávez, en esa medida el pentágono acelera sus planes para aniquilarlo y generar el caos que les abra la puerta a la invasión y masacre de los chavistas que lideran el proceso hoy.
Dudar acerca de que Chávez fue asesinado, en una inducción de cáncer a través de irradiación es ser muy torpes al evaluar el gran enemigo al que nos oponemos, lean este link quienes piensen que es una locura suponer su envenenamiento prolongado:
Cáncer inducido:http://es.anrrompedia.wikia.
Matar a Chávez no fue nunca una meta, era el principio de la gran conspiración imperial contra su gran obra revolucionaria.
Lo que vivimos hoy en Venezuela, el ataque infernal a nuestras estructuras económicas, el engaño y la guerra sicológica, son apenas el segundo paso inmediato luego de haberlo asesinado. Detrás viene la gran ofensiva imperialista y burguesa, como nunca antes vino. Esto ya no está en manos de la inepta oligarquía nacional, es la guerra silenciosa, invisible del mismo imperio.
Con una gran orquestación nacional e internacional se ha desarrollado una guerra económica bestial. Solo la bondad del petróleo y la riqueza que produce nos ha permitido oponernos a ella con importaciones urgentes de los productos que desabastecen, pocas victorias en la inflación inducida realizada por los oligarcas criollos, la guerra sicológica ha sido tan descarada que ella misma estáproduciendo su propio antídoto: la patria sabe que está siendo atacada por los enemigos de Chávez y se lanzará a las calles el próximo 8D, para hacerles saber lo que Chávez nos enseñó: ¡No volverán!
Los 14 años de ventaja hacen que estas recetas de golpes económicos que les resultaron en Chile, no les funcionen en Venezuela. Basta leer hoy a Marta Colomina en su escrito en el Universal, su desesperación ante la derrota que ya presienten es más que evidente. Terminan rogando a sus majunches que voten el 8D o tendrán Nicolás Maduro y Chavismo hasta el 2.019, ¡con toda razón!
Por tanto, no debemos estar desprevenidos, las opiniones de estos ineficaces líderes ya nada tiene que ver con los planes del pentágono.
El 8D es para nosotros el día de la lealtad a Chávez y eso seguramente sucederá y se tornará en una gran victoria.
Para ellos el 8D es la fecha del golpe, pase lo que pase, ganen o pierdan. Ya con la falta de participación en el simulacro electoral queda bien claro que se saben derrotados y que poco les importan los resultados: gritarán ¡Fraude! E inducirán nuevamente la violencia con dos atenuantes: ¡Que nada te detenga! Y realizarán un intento de golpe de estado con lo poco que cuentan en nuestras gloriosas fuerzas armadas bolivarianas.
Venezuela enfrenta una página difícil. ¡No se perderá la quinta República!, pero se deberá enfrentar a la burguesía y a su poder económico, al capitalismo oligarca se le deberá despojar el poder de inmediato, se deberá parar la extracción hacia Colombia cerrando la frontera, se deberán detener a sus dirigentes fascistas y asegurar la patria con el ejército y el pueblo en la calle, listo y prevenido desde tempranas horas del 8D.
¡Llegó la hora de los hornos y no se ha de ver más que laluz!
¡Chávez vive y la lucha y la patria siguen!!!
¡Patria o muerte: Venceremos!