Un gobierno que se caracteriza por la “jactancia” de defender “Derechos Humanos”, es peculiar que cuando se trata de supuestos “azotes” son las propias fuerzas especiales quienes se encargan de resolver los problemas a plomo limpio, cuyas acciones dejan mucho que desear cuando tiene que justificar tales masacres.
Así ocurrió con Oscar Pérez y su grupo de rebeldes, quienes una vez rendidos – tal y como fue visto por un video que circuló por las redes – bastaron pocas horas para aparecer masacrados, supuestamente porque habrían negado su rendición ¿Y quiénes fueron los ejecutores de semejante acción? Pues, las “fuerzas especiales” del madurismo. Por supuesto, toda la artillería que el gobierno desenfundó contra ese grupo plenamente identificado contra el régimen que controla el poder político, no sólo fue desquiciante y exagerada, sino que lo que de fondo intentó demostrar el madurismo, palabras más, palabras menos, “aquellos quienes se levanten contra mí, este será el castigo”.
¡Claro! Ya saldrá el ministro del interior y justicia con su respectiva “rueda de prensa”, mostrando todo un prontuario sobre los desconocidos delincuentes, mientras curiosamente criminales como Valentín Santana y su grupo armado mal llamado “La Piedrita”, quien tiene orden de detención desde que Hugo Chávez era presidente y Tareck El Aissami era el ministro responsable en tal aprehensión, no solamente continúa en libertad, amenazando a los venezolanos de muerte, sino que se retrata con lo más selecto de la cúpula madurista sin que haya pronunciamiento oficial. Entonces, ¿cómo es eso de que son masacrados supuestos “azotes” que ni siquiera conocemos por alguna noticia de sucesos, y por otro lado, delincuentes convictos y confesos se desplazan a sus anchas por la ciudad y el país, y ni siquiera son detenidos?
Asimismo, no es nada creíble que unos supuestos antisociales van a buscar el sector de Fuerte Tiuna para “esconderse” de quienes los estarían buscando. Es como si el alcohólico buscara un bar para rehabilitarse de sus problemas de bebida. O cómo si al obeso, lo enviaran a hacer dieta con una faja de billetes a McDonald's. O que al ludópata le recomendaran que para solucionar su enfermedad tuviera que ir a un casino con una tarjeta de crédito ilimitada.
Sobre esta masacre también llama la atención que unos días antes, tal y como lo denunció la periodista Sebastiana Bárraez, haya sido detenido el mayor general Rafael Oropeza [1], - quien fungió como ministro de alimentación de Hugo Chávez y fue luego de varios días por presiones de sus familiares que finalmente reconocieron que el alto militar estaba detenido. Así es como el gobierno “defiende” los Derechos Humanos de los detenidos, en donde por cierto, la detención de este general en nada difiere de la que fue objeto el diputado Juan Requesens, mientras casualmente ambos están aislados de familiares y abogados.
Es obvio que la situación militar está tomando mucha inconformidad en los cuarteles, aunque el madurismo intente mostrarnos otra verdad. Hay varios oficiales y tropa detenida de la cual nada se habla en diversos estados como Delta-Amacuro, Apure, Bolívar, Guárico, y Barinas. Pero de esos tenemos a unos medios silenciados, y prácticamente asesinados en su libertad de expresión, con familiares desesperados quienes no encuentran manera ni siquiera de acceder a los expedientes ¿Esto es democracia o el más exabrupto de los regímenes totalitarios?
Que nadie se llame a engaño, el mal llamado grupo de exterminio denominado Fuerza de Acciones Especiales (FAES) no va a masacrar a unos simples “delincuentes”. Si eso fuera así, Caracas y las más importantes ciudades estarían libres de criminalidad y “azotes”, y hace tiempo el colectivo “La Piedrita” junto con Valentín Santana serían parte de la historia.
Hay mucha tela que cortar en esa masacre de varios individuos en Fuerte Tiuna ¿Será que acaso estos “delincuentes” estaban planeando un asalto para el robo de armas en la sede militar? Y fue desde allí, que el madurismo al darse cuenta de los planes, decidió actuar con el FAES, tal y como lo hicieron con Oscar Pérez y sus rebeldes, pero para aliviar las tensiones mediáticas y de defensores de derechos humanos, y obviamente ante la crisis política y militar que se multiplica, ahora salen diciendo que fueron “azotes”.
Nos tiene sin cuidado, las declaraciones post-masacre que digan las autoridades. Aquí la única verdad es que es muy difícil de creer que el FAES va a liquidar a todos los delincuentes, denominados “azotes” que estaban “escondiéndose” en Fuerte Tiuna ¿O es qué éstos tampoco se “rindieron” y la orden final fue echarles plomo?
Muy curioso, cuando aparece el FAES, nadie se rinde, nadie queda herido o por casualidad se salva, sólo aparecen cadáveres y totalmente masacrados. A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.
[1] "Funcionarios de la Dgcim detuvieron a hijo de ex-ministro de Alimentación, Rafael Oropeza" https://www.aporrea.org/contraloria/n331135.html
