Algún apasionado me criticará el relacionar al Che y a Fidel con el comandante Raúl Reyes. Quien seguramente no tuvo el peso político que el Che y Fidel, que no tuvo la influencia en Latinoamérica y menos en el mundo que con quienes lo comparo. Tampoco tuvo la preparación académica de ellos. Pero en algo esencial son tan iguales como tres gotas de agua: Sus espíritus revolucionarios y su infinito amor por el pueblo y en especial por los más desposeídos.
La desaparición física de Raúl Reyes, solo física porque recordando y parafraseando al panita Alí Primera “Los que mueren por la vida no pueden llamarse muerto” aunque, a partir de este momento si esta permitido llorarlo, le pesará por siempre a esa sociedad Colombiana indiferente a la paz y a la vida, le pesará en el alma, si tiene, al asesino Uribe. Los verdaderos revolucionarios lo lloraremos eternamente. Hoy estas con Camilo, Gaitán y el Che. Seguro te fuiste triste por no ver a Colombia Liberada, pero pleno porque entregaste lo mejor de tu vida a la revolución, a la lucha por una Colombia con justicia social y del Pueblo. Por un mundo diferente. ¡Hasta siempre, Raúl Reyes!
En este instante estoy observando Aló Presidente. Chávez expresa su análisis de lo ocurrido en Ecuador por parte del ejército colombiano. Considero acertada, justificada y necesaria la posición del líder presidente. Es una situación de extremo cuidado y me conforta la claridad del presidente.
Sin temor a equivocarme, ojalá en el tiempo se diga toda la verdad de lo ocurrido, creo que el operativo donde asesinan a Raúl Reyes se enmarca dentro de lo que es el comportamiento de grupos elites de Estados Unidos e Israel. En cincuenta años de guerra jamás el ejército colombiano se acerco al secretariado de las Farc. Lo más que hizo ese ejército fue disfrazarse de Paramilitar para asesinar campesinos, incluyendo mujeres y niños. Los únicos que pasarían las fronteras de Ecuador, para asesinar y sin ningún respeto por su soberanía, son los mercenarios citados. Entrenados y acostumbrados a eso. Así que ese regocijo enfermizo, mostrado por el ministro y los militares colombianos en el comunicado de lo ocurrido, no es más que una demostración de su poco amor a la patria, la pobreza de sus mentes y de su espíritu.
Las FARC, están obligadas a revisar todos sus esquemas políticos y militares. No tengo la menor duda de que la estructura de esa organización, no ha sufrido un golpe mortal. Pero ha venido siendo un blanco fácil que da más cabida al discurso guerrerista de Estados Unidos a través de Uribe.
El ELN, ha venido siendo utilizado por Uribe en el sentido que los mantiene de bajo perfil con un discurso falso de diálogos por la paz. Los ideólogos elenos deben reaccionar y analizar con detenimiento los verdaderos alcances de esos diálogos. Deben analizar junto con las FARC, la posibilidad cierta de unir fuerzas para dar mejor respuesta a la oligarquía colombiana. Ya basta de que sea casi imposible que dos ejércitos, en un mismo territorio, un mismo ideal y un mismo objetivo social y militar, puedan unir esfuerzos para obtener mejores resultados.
Los exprisioneros de guerra, disfrutan de su nueva condición. Ojalá no olviden que su liberación es un gesto unilateral de las FARC, que al gobierno de Colombia no les interesó nunca. Que para Uribe daba lo mismo si vivían o morían. Que alguna vez también fueron parte de esa oligarquía colombiana insufrible por los más desposeídos y que si llegaron a donde estaban es por que de una u otra manera han sido, o son parte de ese estado que no tiene más condición democrática que la de sus propios intereses y beneficios.
Difíciles sus momentos vividos durante 6,8, ó 10 años, cierto. Pero no es menos cierto que el pueblo colombiano lleva 50, mejor dicho, 200 años viviendo en peores condiciones.
Que los “terroristas” de las Farc los sometieron a tratos inhumanos. Y que creen que se vive en la selva o en las cárceles de Colombia. Me sorprendería saber que desconocen que a un comandante del ELN, Francisco Galán, le difundieron un video donde lo violaban los mismos funcionarios militares que lo custodiaban mientras estuvo preso en una de esas cárceles de Colombia. Y seguro que ninguno de ellos llamo Terrorista al estado Colombiano. O que hagan como la señora Clara Rojas, que se la llevo Uribe a exhibirla como trofeo por Europa.
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