No recuerdo la escuela a la que fue Inca Valero con el Gobernador Carneiro a donar juguetes y equipos deportivos. Ese día le conocí personalmente y vi en él a un triunfador, a un ganador. Cuando se dirigió a los escolares les dijo que estudiaran y obtuvieran un título profesional, que se portaran bien, que no consumieran drogas y que respetaran a sus padres, a sus maestros y a sus amiguitos. Cuan lejos estaba yo de pensar lo que le depararía la vida al Campeón.
Valero es el clásico producto la descomposición social. Su caso no es aislado. Está integrado a la cultura de la violencia generada por esa falsa escala de valores sembrada por La Sociedad de Consumo.
La mayoría de los muchachos de extracción humilde cuando escalan posiciones de ídolo, de estrellas deportivas no están preparado para disfrutar de las mieles de la fama, del poder. Por eso incurren en hechos desconectados con la conducta de un ser racional.
Recuerdo en este instante a Carlos Monzón, el Campeón Argentino y el desenlace con su esposa. También al mexicano Púas Olivares cuando en Acapulco desfiló desnudo acostado en su Rolroy. O cuando le entró a golpes a una mesonera en el bar de Mantequilla Nápoles, de San Juan de Letrán, DF México.
Recuerdo también a nuestro campeón mundial Lumumba Estaba, que lo primero que se compró fue un Motorhome en lugar de construirle una casa su vieja, que vivía en la humilde vivienda donde él nació y se crió en el barrio Los Yaques, de Puerto La Cruz.
Ricardo Arredondo, mexicano, también campeón mundial super pluma, en un programa de televisión que moderaba en Televisa en unión de su esposa, le preguntó al Púas Olivares por el escándalo de Acapulco y de San Juan de Letrán. Y el campeón mundial, de apenas 23 años, le respondió arrodillado y llorando como un bebé: "Ayúdame. No sé que hacer. A Mi edad he disfrutado de todos los placeres y ya no encuentro que hacer. Ayúdame."
El Púas Olivares y el Inca Valero son de origen humilde. Nacieron en la pobreza, y de la pobreza, a base de puños, conocieron la gloria y la fama, dinero, viajes, hoteles de lujos y mujeres hermosas y fáciles. Y eso afecta si no se está preparado mental y espiritualmente.
Quién no recuerda a Arguello, mismo que se suicidó dándose un tiro en el pecho. O a Tyson, quien le voló de un mordisco una oreja a un rival.. O a Paiva, quien terminó en un manicomio. o al Loco Marcano quien se mató borracho al volcar su auto luego que le arrebatara las llaves del auto a un vigilante que le había retenido hasta que se le pasara la borrachera. Los ejemplos huelgan.
No estoy en condiciones ciertas para manifestar una opinión en torno al entorno familiar y social del finado pugilista. Pero a juzgar por su discurso en la escuela varguense. su infancia y su adolescencia no fueron nada fácil. He leído algunas cosas. Pero no voy a comentarlas. Que se encarguen de eso los sádicos mediáticos, mismo que quieren inculpar a Chávez de tan lamentables hechos. Conducta, que por lo demás, no me sorprenden en absoluto viviendo de una gente que le prendió velas a los santos para que no lloviera y se secara el Guri.
Carneiro ayudó a Valero. Lo llevó a La Guaira para que defendiera su corona. Lo llevó a las escuelas. Le animó. Le demostró afecto sincero. Le llevó a los barrios.
Me contó el Sargento Guzmán. Campeón Mundial Aficionado en pluma y único vencedor ante los cubanos en cuatro torneos Batalla de Carabobo y actual miembro del equipo de seguridad de la residencia oficial del Gobernador de Vargas, que siendo Carneiro G/D y Comandante de la Tercera División autorizó el ingreso de Inca Valero a la ·3ª División para que se integrara al selección de boxeo. " Mi General quería ayudarle,que le tratase médicos especialistas, neurólogos, sicologós. Pero duró muy poco, como tres meses"-
-"Si Valero se hubiese quedado en el Ejército, dijo Guzmán, se salva. Porque le hubiesen atendido. Se hubiese "autodisciplinado". Le hubiesen inculcado los valores de la solidaridad, humildad, dignidad, autostima. Le hubiesen tratado clínicamente. En fin se hubiese sanado, graduado de hombre y de Campeón Mundial. Me consta que mi General García Carneiro estimó y ayudó mucho a Inca. En estos días lo he visto muy triste".
Alguien me comentó que Inca podía haber estado en el calabozo con pantalones cortos y utilizar los largos cuando fuese a los tribunales. Aunque hasta ahora no había conocido un caso donde un detenido se ahorcase con un jean. De ahora en adelante a los detenidos no se le permitirá utilizar pantalones largos. Aunque no sé si eso se estila en las policías.
Paz a su alma y resignación a familiares y amigos.
americoarcadio@yahoo.com