23-09-21.La Policía chilena arrestó este miércoles al sicario venezolano Rigoberto Socorro. Se trata de uno de los acusados en 2013 de participar en el asesinato del emblemático líder indígena yukpa Sabino Romero. El homicidio ocurrió en la sierra de Perijá, estado Zulia.
Socorro ahora trataba de entrar de manera clandestina a Chile.
"Respecto de este ciudadano procederemos al proceso de expulsión del país. Particularmente si se confirman los antecedentes de ser autor o imputado del delito que se le asigna". Así lo indicó el subsecretario del Interior chileno, Juan Francisco Galli.
La persona identificada como Rigoberto Socorro entró a Chile a través de Colchane, localidad de la frontera norte que colinda con Bolivia. Es una de las seis personas condenadas por el homicidio de Sabino Romero en 2013.
Cinco de los acusados, incluido Socorro, fueron condenados en 2014 por participar en el asesinato en grado de complicidad correspectiva. Mientras, el autor material, Ángel Romero Bracho, recibió en 2015 una condena de 30 años de prisión.
Por ahora las autoridades chilenas no han confirmado que exista una orden internacional de captura en contra de Socorro. Este se encuentra a la espera de la expulsión de ese país.
Sabino Romero fue un cacique de la etnia yupka que tenía entonces 44 años de edad. Fue asesinado en el marco de un conflicto territorial en Zulia.
Su muerte ocurrió cuando dos encapuchados que se desplazaban en motos dispararon contra el vehículo en el que viajaba junto con su esposa y un bebé recién nacido, quienes resultaron heridos.
El cacique Sabino Romero, de la comunidad Chaktapa en la Sierra de Perijá en el estado Zulia, fue asesinado por sicarios en marzo de 2013 cuando en compañía de su compañera Lucía se dirigía hacia El Tukuko a una asamblea que elegiría al cacique mayor de la comunidad. El asesinato puso aún más de relieve la lucha de los pueblos indígenas por sus derechos ancestrales, incluída la tierra que habitan.
El líder indígena había estado detenido desde finales de 2010, lo liberaron poco antes de ser asesinado. Fue la culminación de una serie de hechos violentos en su contra por parte de latifundistas y sectores vinculados a la minería del carbón.
La ONU pidió al gobierno de Venezuela que investigara de manera exhaustiva y castigara los casos de violencia contra indígenas yukpa, pueblo que habita la sierra de Perijá, que marca la frontera con Colombia.
*Con información de Efe