Se dice fácil pero de esto no tiene nada, desmontar la madeja de trampas y mecanismos del capitalismo no es tarea sencilla, requiere de mucha dedicación, de mucho esfuerzo, de mucha pasión y de mucha consciencia. La revolución Bolivariana es el teatro de operaciones de todos los tanques pensantes del mundo pagados por el imperialismo... De donde uno menos espera salta la liebre, quien menos uno piensa le llega su chequecito o su remesa del dinero criminal imperialista. Decimos que sobre Venezuela se ha desatado lo que el imperio considera es su supervivencia; hacernos pensar como si fuéramos ellos, como si al defender los intereses de la oligarquía internacional estuviéramos defendiendo nuestros propios intereses. He allí una batalla de ideas dura, sin tregua, podríamos decir que es la guerra por la mente. En este contexto enfrentamos la guerra económica que nos hace un daño terrible pero creo que el peor daño nos lo hacen en la mente de quienes se prestan como carne de cañón de la burguesía para ejecutar sus vagabunderías y presentarse como los "impolutos" empresarios privados "exitosos" cuando en realidad no son sino un montón de fracasados dependientes de los designios de corporaciones foráneas ávidas de nuestros recursos.
Pero veamos lo que ocurre todos los días en la calle en medio de un sistema económico capitalista salvaje y despiadado que nos esquilma los recursos que poseemos con el esfuerzo cotidiano. Nos han atacado con la especulación monetaria, financiera y sobretodo con la especulación sembrada en la mente de quienes no les importa para sobrevivir ser "cómplices necesarios" de un montón de mafiosos que agreden nuestra economía.
Las mafias tienen sus modus operandi y sus mecanismos que han germinado en el sistema económico parasitario montado en Venezuela. Eso no es casual, es idea imperialista que hoy "la principal empresa privada del país", la misma que procesa alimentos, cuya materia prima es el girasol, maíz y arroz no promueva la siembra de una hectárea de esos rubros agrícolas, sin embargo, esa es una empresa "agroindustrial" que no produce su materia prima, teniendo como hacerlo, ni un grano de maíz, ni un grano de arroz... Empresas Polar son una trampa jaula cazadora de dólares del estado producto de la renta petrolera que la burguesía capta con el mecanismo de "papá estado, dame dólares". No estamos descubriendo el agua tibia, pero es bueno siempre tener presente la causa del parasitismo empresarial venezolano del cual empresas polar es el más significativo ejemplo. Este tipo de empresas trampa jaula arrasaron con las iniciativas privadas productivas porque al tener acceso a los dólares, éstas se fortalecieron con la ayuda del estado y por el contrario otras iniciativas privadas fueron condenadas a la desidia para que terminaran quebrando o cesando en el empeño productivo...
Vivimos los momentos del boom petrolero y del "ta barato dame dos" y condenamos a la agricultura y la agroindustria al abandono. El petróleo atrajo la fuerza laboral del campo a la ciudad que terminó formando los cinturones de miseria que en las principales ciudades del país encontramos perennemente. En pocas palabras, al sistema capitalista internacional le conviene que Venezuela sea tecnológicamente y orgánicamente una nación caotizada, desordenada y que no sea capaz de gobernar su economía. Para que fuese factible el desorden que hoy permite la locura de precios y el desborde de la capacidad estatal para controlar la economía del venezolano de a pie se implementaron mecanismos incontrolables, ineficientes e ineficaces.
Surgen los puntos álgidos que el gobierno seguramente atacará en los próximos días como: La especulación terrible con los puntos de venta, (uso de dinero electrónico en comercios). Es una especulación que oscila entre el 100 y 300%. Para el gobierno es complicada la situación, sobretodo tomar medidas; si elimina los puntos de venta, ante la escasez de efectivo, extraído hacia Colombia y otros países por las mafias, los puntos de venta son una solución, pero los delincuentes económicos, o mejor dicho, los chacales económicos que operan en esta guerra han ideado una forma más de robar al pueblo venezolano a través de los puntos de venta.
Las mafias se aprovechan de captar miles de millones de bolívares por esta vía de la especulación gracias al desorden y falta de gobernanza de la economía venezolana por parte del gobierno, que hace esfuerzos pero el sistema mafioso lo desborda, además del uso de la corrupción como mecanismo de descomponer todo el sistema, en buena parte lo han logrado y el salvajismo contra el pueblo en las calles promovido por el sector privado nos golpea duro... Es una forma de agredirnos por todos lados y el gobierno revolucionario seguramente estará trabajando en mecanismos técnicos que permitan ejercer un control férreo sobre los puntos de venta que haga posible respetar los precios y neutralizar las mafias dedicadas a la especulación que operan en todas las ciudades del país... Un precio en efectivo, el doble o el triple por dinero electrónico.
Decíamos al principio que uno de los peores daños de esta guerra económica ha sido las mentes coptadas por las mafias para ser artífices y operadores de la especulación, nos referimos a comerciantes informales, comerciantes formales, empresarios del transporte, empresarios dedicados a la distribución, etc. Los otrora barateros mercados municipales ahora son más costosos incluso que los supermercados, allí se ha instalado mafias de revendedores que hacen mucho daño. El manejo distorsionado de estos mecanismos de comercialización contribuyen a crear una situación insostenible que desencanta a muchos y muchas, sobretodo de sectores medios que "huyen" hacia otros países buscando mejorías. No siempre lo logran, a veces es peor el remedio que la enfermedad, al enfrentar en esos países lo difícil del acceso a la salud, educación y otros servicios básicos para la vida, pero en la mente de estas personas, ante el bombardeo psicológico, no logran ubicar las causas de la situación en Venezuela. El gobierno hace esfuerzos denodados en medio del cerco financiero y bloqueo económico de las potencias imperialistas, pero, el tipo de guerra camuflajea al enemigo y no permite a muchos y muchas ver con claridad lo que ocurre.
El capitalismo logró hilvanar en el mundo unos mecanismos creados para el chantaje, el control y el dominio de las riquezas del planeta; Venezuela es una extraña excepción, por eso nos catalogan de "amenaza inusual y extraordinaria". De allí que la guerra económica ha sido "inusual y extraordinaria", usando a países vendidos al imperio como Colombia, Perú, entre otros para generarnos en la frontera una situación muy complicada y embarazosa.
Pero volvamos al tema de la mente del comerciante que se convierte en el especulador de oficio y se cree ser el "más exitoso de los empresarios", pues que esto nos genera una distorsión enorme, hay una especulación en cadena, los sistemas distributivos entran en estado de putrefacción y se incuba allí lo que en Colombia ha sido reconocido por el estado como la economía subterránea, que consiste en legalizar lo proveniente de delitos como el narcotráfico y contrabando, por eso es que todo lo que de Venezuela pasa a Colombia en contrabando allí es inmediatamente legalizado, ocurre con la gasolina o cualquier mineral estratégico que extraigan para allá.
Pero volvamos al tema de los precios y el abismo que se produce entre el ingreso en salario y los costos de los productos en la calle, el bombardeo ha sido tal que un kg de tomate casi que cuesta lo que percibe un trabajador en quince días... toda esta situación genera angustia, desactiva el ejercicio de la democracia social y participación ciudadana creando una desvinculación orgánica en las comunidades peligrosa y que debemos atender con prontitud. El gobierno ha tomado iniciativas importantes como los CLAP, pero los clap no han pasado de ser lo que señaló Aristóbulo cuando afirmó... "no podemos solo ser repartidores de bolsas de comida porque terminaremos siendo unos bolsas"... Pues lo productivo no arranca aún, salvo aisladas experiencias y eso es algo vital para cambiar el sistema, que los CLAPS se institucionalicen como los mecanismos idóneos de producción y distribución de la nueva economía del país.
Ahora bien, para lograr que los CLAPS eleven su presencia en el sistema económico es menester replantear un conjunto de cosas, por ejemplo, los rubros a los cuales se tiene acceso y la periodicidad con que estos rubros pueden ser adquiridos por la población. Los precios que tiene el gobierno son muy bajos en comparación a los que en realidad están en la calle, esto crea un caldo de cultivo factible para la corrupción, comprar un kg de leche en la caja clap a unos mil bolívares y venderla a los preciso capitalistas que llegan a los dos millones de bolívares se le hace atractivo a cualquier persona corrupta y no comprometida con la revolución, lamentablemente son muchos los que pululan en el estado por el solo hecho de portar camisa roja, he allí una debilidad terrible que pasa por la falta de control político en designaciones de funcionarios de importancia en el manejo de temas económicos... Claro que esa persona (el tonto útil especulador) luego es víctima del mismo especulador cuando le vende otro rubro, pero por lo pronto es usado como instrumento de esa economía subterránea que quieren implantar en Venezuela un montón de mafiosos.
Las redes de distribución de los productos del campo es otra falencia terrible, allí llegan a los mercados municipales que han sido tomados por mafias, allí hay que recuperar esos espacios con iniciativas locales y entregárselos a los vecinos organizados, a los clap, pero no pueden seguir en mano de un grupo de delincuentes. Los mercados en las calles, allí es la locura, hay ciudades en que esto se presta para cualquier cosa menos para beneficio a la población... Pero lo más álgido es el robo con los puntos de venta, algo hay que hacer urgente e ir con mano dura contra esas mafias, quizás hemos enfrentado el problema como si estuviéramos tratando con empresarios, los hay, y muy honestos, pero el sector empresarial fue penetrado por un grupo de delincuentes que nos está acabando al robarnos todos los días con los precios...A situaciones críticas, medidas drásticas, no podemos seguir colgados de las ramas, en serio hay que proponerse una profunda revolución del sistema económico venezolano que nos permita depurar de todos los vicios que nos afecta el sistema económico. La parte financiera no podemos soslayarla, allí se ha incubado parte de los factores distorsionantes de la economía, esto que ocurre con los puntos de venta forma parte de un plan sin duda alguna, igualmente nos han atacado con la permisología y complicidad para que nos extraigan el cono monetario permitiendo transferencias de mafias a personas que se prestan para extraer los billetes. En esto el gobierno colombiano y el de Panamá han funcionado en coyunda con quienes operan la guerra económica contra Venezuela, ellos potencian el ataque a través de páginas ilegales como Dólar today, avalaron los raspa cupos que le desangraron al país 16 mil millones de dólares aproximadamente. Esos dólares que los mafiosos compraron en 10 o 15 Bs para el momento ahora lo venden en 1.200 000,00 (un millón doscientos mil) Todo fue producto de acciones mafiosas y prácticas delictivas que permitió prácticas que enriquecieron a muchos y corrompieron a unos cuantos funcionarios, a dios gracias sancionados y huyendo algunos de ellos pero hay que ir más a fondo.
El gobierno de Maduro ha tenido que enfrentar la embestida criminal económica de todas las prácticas delictivas del sistema capitalista y todos los mecanismos creados para saquear a los pueblos, al perder el poder político del estado venezolano la burguesía, ésta se ha propuesto colapsarlo y desbordarlo en lo económico, allí se han creído invulnerables, pero como se dice popularmente, "Rondón no ha peleado", es decir, el pueblo no ha peleado todavía en esta guerra económica. Esta batalla requiere un inmenso despliegue del polo patriótico, del PSUV, de toda la estructura 4x4 en lo referente a la batalla ideológica que permita sensibilizar a todo aquel que está coptado ideológicamente y confundido por la campaña mediática de la burguesía enmarcada en el concepto de "la pelea de perros", es decir, el que el pueblo se divida y con el trabajo de la mente de muchos convertir a éstos en cabeza de playa para la penetración.
UNA MANZANA PODRIDA PARA QUE SE PUDRA EL SACO...
A nadie más que al imperialismo le conviene que la sociedad venezolana pierda todos los valores éticos y se convierta en una sociedad de corruptos y de cómplices, esto ya lo han ensayado en Latinoamérica, verbigracia Colombia, en donde un narcotraficante fue presidente de ese país durante 8 años y hoy es un encopetado dirigente de esa nación, nos referimos a Álvaro Uribe Vélez, jefe paramilitar y narco con el expediente número 82 de la DEA, brazo usado por el imperio para chantajear, a la vez, brazo "legal" del manejo del cartel de narcotráfico considerado por algunos como el más grande y poderoso del planeta. No por casualidad EEUU es el mayor consumidor de drogas del planeta y Colombia la mayor productora de cocaína de alta pureza. En Colombia esa economía subterránea, así la llamaron, la legalizaron y por ello la penetración gringa fue hecha de manera tal que sin disparar un tiro se adueñó de ese país y le instaló 7 bases militares so pretexto de "combatir el tráfico de drogas"; la realidad está muy distante de ese "combate al tráfico de drogas", la producción de drogas en ese país desde que está intervenido en la práctica por el ejército estadounidense, aumentó. El llamado plan Colombia fue el marco institucional diseñado por EEUU para apoderarse de ese país y controlar la revolución bolivariana. La estrategia es la misma, que la economía venezolana se llene de ilícitos y que la corrupción carcoma toda la estructura del estado es el plan imperialista contra Venezuela. Lo de la corrupción en PDVSA no es casual, ellos siempre andarán buscando como penetrar y como corromper a los cuadros de la revolución. PDVSA siempre estará en la mira y por otra parte el ejército y órganos de inteligencia del estado venezolano también. El objetivo es que se pudra el saco, si ellos lograren que la corrupción carcoma la estructura del estado y que los cuadros de la revolución le vendan el alma al diablo acabarían con esta revolución, sin embargo, nosotros no somos ni estamos cerca de ser traidores como la oligarquía colombiana santanderista que traicionó a Bolívar. Si algo le valora el pueblo venezolano a Nicolás Maduro es la capacidad de resistir en condiciones muy adversas, más adversas quizás que las enfrentadas por Chávez. La llegada de la revolución bolivariana y la recuperación de la soberanía petrolera nos permitió un salto exponencial en la inversión social, de un tiro la inversión de algo que rondaba entre el 35 y 40 % superó el 60% con Chávez... los pobres comenzamos a comer carne y pollo con regularidad, se lanzó las misiones para atacar la pobreza extrema, se lanzó la misión vivienda, etcétera. A Chávez le dieron un golpe de estado, un paro petrolero, llevaron la producción petrolera a cero durante un tiempo pero no lo bloquearon financieramente ni ejercieron presiones tan bárbaras para las importaciones a un país que históricamente desde la llegada del petróleo fue convertido en factoría petrolera. Chávez tuvo mayores posibilidades de maniobra, además que en Suramérica se configuró un mapa político con fuerzas progresistas en Argentina, Uruguay, Brasil, Bolivia, Paraguay (hasta el golpe a Lugo) y Ecuador. Esa realidad política bloqueaba cualquier posibilidad imperialista de agredirnos de manera directa y abierta, de esos países apenas nos queda Bolivia en manos progresistas, los demás han caído en garras de la derecha más anti venezolana y más reaccionaria, verbigracia el grupo de Lima; un grupo de presidentes corruptos que han convertido en plataforma de agresión a Venezuela.
Pero volvamos al tema de cómo podrir el saco de manzanas: las distorsiones del sistema económico venezolano, sus características parasitarias y dependiente de lo que se produce fuera concentra en el poder financiero y comercial el equilibrio del sistema económico. Al producirse una recesión económica en Latinoamérica, al cambiar el cuadro `político de la región, las dificultades para Venezuela son aún mayores. Para un comerciante venezolano especular es algo de "éxito financiero"; acumular riqueza aprovechándose de la renta petrolera y las dádivas del estado han hecho crecer sus empresas y engordar sus cuentas en el mundo. Se calcula que los depósitos de empresarios venezolanos en bancos del mundo superan los 150 mil millones de dólares, esto no es concha de ajo, todo eso ha sido robado al estado venezolano con prácticas truculentas y mecanismos especulativos.
Al llegar la revolución e iniciar una profunda redistribución de la riqueza, al democratiza el acceso a la renta petrolera, la burguesía ideo el plan perfecto para extraer de los bolsillos de los venezolanos todos estos logros a través de la especulación, todo esto en acuerdo con el imperio que se encargó de presionar a la baja el precio del petróleo y perseguir financieramente a Venezuela en el mundo para cerrarle todo oxígeno en lo financiero y crediticio. Es así como con la especulación extraen todos los beneficios sociales impulsados por el gobierno con precios excesivos. Luego del triunfo contundente de Maduro el pasado domingo, el pueblo ha enviado un mensaje claro, es el momento de pasar a la ofensiva y avanzar con fuerza en una economía autónoma. Una economía sana, sanear la economía del poco de malandros que hoy la manejan es prioridad, acabar con las mafias que corrompen y distorsionan es tarea de estado. Acabar con el parasitismo del sector financiero nos permitirá sanar las heridas causadas por esta guerra económica. Aupar el surgimiento de un nuevo modelo distributivo que tome en cuenta el concepto chavista de impactar los ámbitos de PROPIEDAD-PRODUCCIÓN-DISTRIBUCIÓN Y CONSUMO. Esos 4 ámbitos principales hay que impactarlos. Sanear la propiedad y blindarla haciendo inexpugnable la apropiación de bandas de delincuentes de los espacios en donde se distribuyan bienes y servicios; aquí hay que meterle la lupa al sistema financiero, a la banca, a los propietarios de locales y redes de abastos y supermercados; no permitir que entre allí la pudrición; fortalecer la propiedad social, comunal y estatal.
En la producción aplicar un plan fuerte de organización y control que permita planificar para poder producir en base a las prioridades de consumo. Distribución; he aquí la manzana de la discordia, he aquí el enorme problema. Solo el pueblo salva al pueblo, solo la conciencia nos salvará; los CLAP hay que elevarles la misión, para ello se requiere de proponerse el reto de producir. Pero no se trata de hacer planes que no tienen la sustentabilidad necesaria y al final de cuentas se pierde la semilla, se usan los animales como mascotas y se banaliza cualquier plan. Vamos a proponernos jornadas en donde todo aquel que quiera trabajar en la producción de alimentos tenga las condiciones mínimas requeridas para subsistir mientras se hace productivo. Allí está el carnet de la patria, ya deberíamos saber cuántos desempleados hay, cuantos funcionarios públicos obstinados de estar en una oficina subutilizados estarían dispuestos a ir a producir. Ya deberíamos tener un mapa de todo el territorio ubicando las tierras productivas. ¿Cuándo carajo vamos a potenciar el trabajo voluntario? En medio de este ataque capitalista con los precios el estado le garantiza comida y donde quedarse a venezolanos y venezolanas y muchas y muchos se irían a producir con ganas, fuerza y alegría. Pero como decía Chávez, en toda iniciativa hay que cerrar el círculo completo, no dejarlo a medias, si vamos a producir debemos saber cuánto y que vamos a producir, y a quien se lo vamos a distribuir, garantizar la logística para que esto no se desvíe hacia el contrabando, caso del café trujillano; la especulación, caso de los mercados de las principales ciudades, etc.
Los ensayos del pan por ejemplo hay que profundizarlos, en comunidades no necesariamente hay que entregarle a unos panaderos mafiosos y bandidos la harina para hacer el pan... ¿por qué no se la entregamos a la comunidad, o es que acaso la gente de nuestro pueblo no sabe y puede preparar el pan? Con la harina en manos del pueblo se golpea a las mafias de las panaderías que hoy llevan un pancito a costar miles de bolívares, además que se presta para la corrupción de funcionarios que reciben un bulto de harina y pueden desviarlo para beneficio de mafias. Así mismo pasa con empresas productivas en manos de gobernaciones y otras instituciones, a todo eso hay que meterle el ojo, allí hay vicios y corruptelas terribles que es menester erradicar. El tema de la distribución ha generado distorsiones como el bachaqueo, contrabando de extracción etc. Pues ataquemos de una vez y desmontemos todas esas mafias, es la tarea más urgente y más dura para liberarnos e independizar el sistema económico, para ello hay que sanearlo primero, liberarlos de mafias capitalistas que entraron en metástasis y ya no tienen ningún tipo de escrúpulos a la hora de robar cuan choro declarado, por supuesto que no te roban con una pistola, te roban con un punto de venta y una sonrisa sarcástica todos los días y a todas horas.
La burguesía para desviar el tema ha intentado hacernos creer que la crisis es del modelo socialista. En Venezuela el socialismo ha llegado a lo social y lo político, en esos ámbitos tiene números interesantes que mostrar. En lo social la inclusión de millones de personas en misiones como la Misión Vivienda, en Amor Mayor, Misión Sucre, etc. En lo político la incorporación de amplios sectores y de la comunidad a la democracia participativa y protagónica, aunque ciertamente allí haya falencias, pero está la base jurídica para que el pueblo se empodere, esto no se ha desarrollado adecuadamente pero forma parte del proceso que avanza. Ahora bien, en lo económico poco o nada se ha avanzado y el capitalismo controla casi todo el sistema distributivo y de comercialización del país; el gobierno ha lanzado iniciativas interesantes como los CLAP, en lo particular considero la vía adecuada, sin embargo, ese ensayo pasa por fortalecer el sistema de manera integral y que se asuma formalmente la escalada en el empoderamiento económico productivo de la sociedad (pueblo) de todo lo inherente al sistema bajo los ámbitos antes señalados (Propiedad, producción, distribución y consumo).
El reto de la revolución pasa por construir junto al pueblo un poderoso sistema económico en concordancia con los logros sociales de la revolución, que sea financiera y tecnológicamente sostenible, que mire mucho hacia lo interior de la patria y sus capacidades, que permita desencadenar el crecimiento integral y convertir a un país dependiente del exterior en un país capaz de satisfacer las necesidades de la población e incidir tanto en el caribe como en todo el continente de manera decisiva. Las riquezas de Venezuela nos permiten, logrando la independencia económica totalmente, avanzar hacia un modelo que impacte toda la región. Esto no es secreto para el imperio, por eso los ataques contra la revolución se incrementarán en la medida en que se vayan consolidando objetivos claves en el marco de la diversificación económica e independencia tecnológica. El imperio tiembla cada vez que se imagina a una Venezuela potencia activando en la región y guiando pueblos.
Para avanzar en este orden de ideas requerimos ensayar en un conjunto de iniciativas políticas y económicas que representará la creación de nuevos paradigmas; estamos obligados a inventar salvo caer en el error de copiar. Todo esto lo tenemos que hacer en medio de la profundización de la democracia participativa y protagónica en lo político, lo económico y lo social. Cerrar el círculo de manera integral. Esto no es sencillo con muchos factores internos haciendo contrapeso, las dificultades están a la orden del día, los enemigos de la patria están conviviendo con nosotros en muchos aspectos y con un gran poder económico, poder operativo y de chantaje, a esto aunamos una cultura rentística y oportunista que hace factible que actos delincuenciales como los actos especulativos generados en el país se cometan sin siquiera ruborizarse. Elementos como la negligencia y corrupción pululan en un montón de instituciones enmarcadas en la cultura de servirse del poder. El concepto chavista del sacrificio para servir, aquello que el hizo con el ejemplo de entregar su vida cuando afirmó, citando un pasaje bíblico; "me consumiré gustosamente al servicio del pueblo venezolano"... el cumplió, muchos hoy cumplen con ese compromiso, pero también muchos no lo cumplen, se siguen aprovechando de esa vieja cultura del oportunismo, y lo más grave, siguen auspiciando la cultura parasitaria en los ámbitos económicos y eso propicia el desorden porque bajo aquella conseja de "en río revuelto, ganancia de pescadores", son muchos los que aprovechan el desorden de la economía para usufructuarlos personalmente o en grupos de poder, grupos que son creados para apropiarse de espacios de poder con prácticas similares a los de la burguesía, eso hay que erradicarlo cueste lo que cueste.
Una revolución económica propone el presidente Maduro, hay que reconocerle a este líder, primero, mantener la dignidad chavista al frente del ejercicio del poder, segundo, el haber avanzado en medio de la más grave tormenta contra el proceso bolivariano, a mi entender, con Maduro hemos tenido las mayores dificultades pero a la vez esto nos ha permitido enrumbarnos hacia la vía correcta que es atender el tema económico, impactarlo y transformarlo totalmente. Esto no quiere decir de lo terrible del paro petrolero cuando Chávez, el golpe de estado que puso en vilo la vida de Chávez, pero Chávez es Chávez y su carisma y liderazgo, además de unos precios aceptables del petróleo hacía manejable la situación, con Maduro se han venido con todo, eso nos ha permitido dotarnos de un líder probado en la batalla y seguro de conducirnos a la victoria, al imperio le salió el tiro por la culata.
Maduro ha enfrentado situaciones muy difíciles y con valentía ha desencadenado procesos históricos que profundizan en medio de la batalla contra el capitalismo, no obstante, el mayor reto está en lo económico, esto requiere una profunda renovación o revolución, mejor usar este término, en lo político para que el impacto sea efectivo. Los problemas del socialismo se resuelven con más socialismo, este pareciera ser un axioma, es una máxima, jamás buscar en los recovecos podridos del capitalismo la solución de los problemas sino aprovechar éstos para avanzar en el socialismo y la construcción de nuestra nueva sociedad y el nuevo hombre social. Pasa por un asunto cultural, educativo y formativo en los valores socialistas que deslastren definitivamente los antivalores del capitalismo.
Es decisión del alto mando político de la revolución tomar las medidas adecuadas, si me permitieran una recomendación les diría que se deberían tomar medidas muy drásticas para corregir los errores y avanzar de manera efectiva en lo económico y en la creación de los nuevos mecanismos de distribución de bienes y servicios. Medidas como la de la criptomoneda son herramientas adecuadas pero a lo interno debemos desplegar toda la inteligencia, capacidad y fuerza para gobernar la economía, es la colina que nos falta para cerrar el ciclo glorioso de construir la sociedad que queremos, una sociedad socialista.