"Es que no puedo con ella
Mamá no puedo con ella
Es que no puedo con ella
mamá no puedo con ella"
I
La Múcura
El porro colombiano "La Múcura", como canción popular, fue descubierta en 1030 y grabada en 1948. Dicen que es del compositor Crescencio Salcedo. Se trata de una vasija de barro que debe ser llenada de agua, suponemos que, del río, y que debía llevar a su casa por mandato de su madre. Ese porro fue muy popular tanto en Colombia como en Venezuela y otros países latinos.
"La múcura está en el suelo mama no puedo con ella".
"Muchacha porque no puedes con esta múcura de agua".
"Muchacha llama a San Pedro pá que te ayude a cargarla"
"… Es que no puedo con ella"
"Muchacha quien te rompió tu mucurita de barro"
"Fue Pedro que ayudó pá que me hiciste llamarlo".
La muchacha no podía llevarse a la cabeza, la vasija de barro. Su mamá la hizo llamar a San Pedro para que la ayudara y el resultado fue que se quebró y se perdió el agua.
En ese sentido, estuve tarareando la canción sin darme cuenta, y de tanto tarareo me hizo acordar de lo que acontece en la Venezuela actual, bajo la dirección de un sistema revolucionario, del cual munchos desconfían, dado los resultados, y que hoy, esa revolución la lidera el presidente Nicolás Maduro Moros.
II
El Poder del presidente Maduro.
Antes de escribir este artículo, pensé mucho, mis quebrantos de salud siguen de mal para peor. Sin embargo, un genuino revolucionario siempre saca fuerzas de lo más recóndito de nuestro ser. A pesar de que vaya a ser catalogado un pésimo revolucionario, que le hace el juego a los traidores, sigo escribiendo. Nada me para. Soy íntegro y de pura cepa como el roble. Pero distinto a muchos. Yo nunca he callado. Ese principio siempre lo he llevado conmigo en donde quiera que he estado, incluyendo el largo tiempo que estuve, junto a mis compañeros, en la isla del Burro, en la década de los 60.
Es el caso de que nuestro gobierno dizque revolucionario está por cumplir 20 años en el poder. En estos momentos tiene todo el poder político en sus manos: casi todas las gobernaciones, casi todas las alcaldías, y en un 98 por ciento los legisladores de los estados. Cuenta con el apoyo de la Asamblea Nacional Constituyente, con la Fiscalía General de la República, con la Defensoría del Pueblo y con el TSJ. Las policías y todos los organismos de seguridad. Y, como si fuera poco, con el apoyo incondicional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Tremendo poder. ¡Inmenso poder! Todo el poder para un hombre.
III
No puede con la múcura
En efecto, el señor Presidente de los venezolanos y venezolanas, no puede levantar la múcura. Está pesada, muy pesada, desde hace algún tiempo, y, no parece que pueda levantarla en un corto plazo.
Todos los esfuerzos que ha hecho y está haciendo, resultan fallidos.
Veamos por qué afirmo que este peso no lo aguanta, es decir, no lo puede levantar, así como así.
La corrupción no para. Estimado lector, chavista o no, usted puede contactar a través de las declaraciones del propio Fiscal
General de la Republica. Ya no es PDVSA. Ahora se están destapando ollas podridas en la distribución de los medicamentos, al estilo de una famosa cadena de farmacias en el país. Operan mafias bien orquestadas y apoyadas. No se diga del SAIME. Allí la podredumbre se salió de control. Cada día hay información de Guardias Nacionales detenidos por estar incursos en hechos delictivos, relacionados con robos de alimentos, de medicinas, y productos de los CLAP. Así aparecen señalados también oficiales de la PNB. Y eso que el Fiscal no ha jurungado a la CVG y a las empresas de Guayana, llamadas básicas. Es lamentable decirlo, pero el país, de banda a banda, es un antro de corrupción. Usted lo percibe en las calles, y las aceras, etc. Negarlo es no vivir en Venezuela, o estar ciego, o hacerse de la vista gorda…
El transporte a nivel nacional es un verdadero caos del otro mundo. La gente se monta en camiones, como ganado. Las perreras volvieron con todo.
El sistema eléctrico a nivel nacional metido en una profunda crisis. Ya las excusas no sirven para justificar el caos.
La subida de precios. Esto se pasó de maraca. No es abuso, sino un atraco a mano armada contra los usuarios de panaderías, supermercados, restoranes, taguaras, y pare usted de contar.
Ahora nada tiene un costo menor a los dos millones, dentro de una semana pasarán a tres millones y dentro de un mes sólo se hablará de 10 millones. En esta afirmación no hay ni un ápice de exageración.
La falta de medicamentos, peor que peor.
El bachaqueo en su apogeo. No hay quien le dé un parao. Bachaquean en la calle, en las aceras, por teléfono, por internet, etc.
Con razón la múcura del presidente Maduro pesa tanto, y no puede con ella. No es fácil la tarea de levantar esa vasija. Van 20 días desde que el presidente fue reelecto. En su campaña ofreció que el 21 de mayo, sería el comienzo de una nueva vida para Venezuela, a través de la aplicación de una nueva economía. A esta fecha nada se ve. Todo sigue peor y peor. Eso es lo que se percibe en las panaderías, en los supermercados, en las farmacias, en las clínicas, en los hospitales, en los comercios, en general. En el maltrecho transporte, y en las calles y en las aceras. ¿Estoy mintiendo?
AGREGADO
A estas alturas sigue gobernando el mismo gabinete. Con razón seguimos como estamos. Arruinaron a PDVSA. Destruyeron a la CVG. Acabaron con las llamadas empresas básicas. ¿Qué producen las empresas expropiadas? ¿Los centrales azucareros? ¿Las empresas cementeras? ¿Hasta cuándo tanta desidia? ¿Dónde están los buenos hijos de esta revolución? Un puñado de ellos en Miami disfrutando de los dineros que robaron al Estado. Hay otro puñado que sigue en el poder, disfrazados de rojos, rojitos. Raspando y raspando.