Muchos esgrimirán es demasiado pronto para medir el impacto del paquetazo de Maduro, pero no es así: infinidad de comercios cerrados, mayor escasez de productos pues quienes producen, distribuyen, comercializan están a la espera de nuevos precios y tarifas. Otra consecuencia ha sido mayor inflación, liquidaciones de personal y un alza incontrolable del dólar paralelo, todo esto apenas a unos días de tan cuestionadas medidas.
No podía ser distinto, creemos son tres los errores más destacables, el gobierno creyó poder controlar el precio del dólar paralelo sin inyectar divisas al mercado, solo subiendo exponencialmente la tasa oficial, provocando la inercial alza del paralelo, la tasa que ofrece el gobierno ya es insignificante, fuera del control cambiario se cotiza a casi el doble al momento de escribir estas líneas. En segundo lugar, la edificación de presuntas medidas económicas cuyo remedio es peor que la enfermedad, continuar inyectando escalofriantes cantidades del denominado dinero inorgánico. En tercer lugar, una vez más, la imposición de precios sin consultar ni conciliar con todos los sectores involucrados, así lo ha denunciado Fedecámaras entre otros sectores, este comportamiento gubernamental no es noticia nueva, ha sido una de las causas de los flagelos del desabastecimiento y escasez.
Hemos observado en estos primeros días una arremetida del Sundde contra establecimientos comerciales, deteniendo atropelladamente a sus gerentes, ha sido el comportamiento calcado de medidas anteriores, mismos que con el pasar de los días quedan olvidados volviendo la economía a su malfuncionamiento inducido por la antieconomía roja rojita ¿Cuánto tiempo durará este show mediático?
Con relación al tema político, el país continúa sumergido en la desconexión faraónica, el gobierno internamente dividido atendiendo solo a sus querellas partidistas, sacando a la luz pública más populismo salvaje. En la oposición continúan las voces sueltas, un TSJ en el exilio muy activo que acusa al mismo Capriles estar involucrado en el caso Odebrecht, entre otros peces gordos chavistas. La Asamblea Nacional sumergida en un torbellino de defensores y acusadores, sin poder impactar en la vida de los 14 millones de venezolanos que la eligieron. Brillan cada vez con menos luz mismos personajes políticos en los que el país día a día cree menos.
La población "dedicada a lo suyo", concentrada en la sobrevivencia personal/familiar ante la carencia de resultados de sus actores políticos (chavistas y opositores), la sociedad como cuerpo se encuentra desmembrada, no podemos hablar de un sentimiento nacional, Venezuela se ha extraviado, ha sido por mucho tiempo un conglomerado calamitoso, de sobrevivencia aisladas.
¿Qué viene? Lo hemos dicho, el empeoramiento progresivo de lo que ya hoy es caótico ¿Por qué? Porque continúan a la cabeza del país mismos gobernantes, mismo proyecto. El gobierno cerró todas las vía democráticas y constitucionales a fin de preservar el poder, sin embargo, calculó mal, se encuentra padeciendo las consecuencias internacionales de sus actos e internamente en el país comienza padecer la verdadera presión del pueblo, día a día se multiplican las protestas espontáneas de gremios, comunidades, etc. El venezolano comienza a reencontrarse a través de metas comunes, único antídoto ante este tipo de gobiernos divisionistas, opresivos.
