No se puede decir que algo pasó y nadie lo alertó. La señora Pascualina Curcio, nuevamente, en su artículo Paradoja bolívar/petro del jueves 01 noviembre, alerta sobre un posible error en el anclaje del bolívar al petro. Háganle caso, ella aunque no es china, también es economista y desde hace tiempo ha mostrado interés en colaborar con sus opiniones en la búsqueda de soluciones o a maneras de enfrentar la guerra económica planteada en Venezuela, desde hace tiempo.
En base a esta opinión, el equipo económico debe revisar su metodología y no argüir o hacerse el loco respecto a enmendar situaciones que pudieran afectar a nuestra moneda. Ya Pascualina, alertó. No habría razón para decir luego, cuando pase o esté pasando lo que dice Pascualina, que nadie lo dijo.
En el artículo en cuestión, la economista ofrece detalles de por qué debería ser el Bolívar el que debe estar anclado a las riquezas naturales y no al petro, porque simplemente nuestra moneda es el bolívar. La intención, se puede resumir de su artículo, debería ser fortalecer el bolívar, no el petro, ya que siendo así, nuestra moneda, el Bolívar, y nuestro pueblo, estarían propensos a recibir ataques criminales.
De hecho, tales ataques menoscabarían el propósito de recuperar la economía nacional y serían el complemento al irrespeto de los empresarios y comerciantes en relación a los precios acordados, que definirían el fracaso del programa de recuperación económica, aunque el gobierno diga otra cosa. Pero, si la moneda es definitoria del éxito del programa a pesar de los abusos de empresarios y comerciantes, entonces, ¡Háganle caso a Pascualina!