- Cuando el mal es de curarse, cualquier remedio es medicina…
- Llega el mes de mayo, y con él las lluvias: sentimos la gran necesidad de ir a sembrar en nuestro terrenito situado en El Valle de la Luna. Sembrar en el campo o en la ciudad: una de las mejores formas de hacer revolución: la revolución del alma, de la esperanza, del corazón. A las revoluciones ciertos farsantes les han puesto nombre románticos para así mejor apuñalearla por las espalda: Revolución de colores, Primavera árabe, Revolución de los claveles,…
8-5-2019:
7:30 partimos hacia La Coromoto, en uno de los momentos más difíciles de la república, bajo la mira bestial y bélica del criminal imperio gringo. Uno va a un albur, no sabrá si vuelve, cuándo vuelve… bueno así es la vida.
Ha estado lloviendo sin cesar todos los primeros días de mayo. No son lluvias intensas porque éstas se definirán en julio o en agosto. Pero es hora de comenzar a sembrar.
Desde que llegamos a nuestra casa El Valle de la Luna, no ha salido el sol.
Hoy he salido caminar con Solita y llegué hasta el quinto portón.
El señor Corsino Mora, el patriarca de la aldea La Coromoto, quien nos hace una visita, ha estado engripado, con mucha tos.
El señor Corsino, nuestro amado amigo, sabio maestro de la aldea La Coromoto, quien ya tiene 85 años, lamentablemente ha perdido la visión. Pero así ciego, puede recorrer sin problemas todos los recovecos de la aldea: ordeña, hace quesos, prepara algunas comidas, le lleva alimentos a los cochinos y hasta siembra. Él se conoce de memoria cada palmo de todos los caminos que le han sido tan amados, y va con su bastón por ellos tan fresco y seguro como un muchacho. Llega a veces solo a nuestra casa con el bastón en una mano y en la otra el regalo que nos trae: una vasija con leche.
El señor Corsino tiene una memoria admirable, una gran vitalidad, y se expresa con una coherencia precisa y hasta científica en todo lo que dice. Le pregunto al señor Corsino si se va a inscribir en la Chamba Mayor, y me dice que qué puede hacer él ciego, y le contesto que mucho. Que su experiencia de tantos años debe ser trasmitida a los jóvenes. El sonríe y calla.
Mi esposa MEU le prepara al señor Corsino un pudin y se lo vamos a llevar como a las 3 de la tarde. Los cortes de electricidad son diarios y duran entre siete y ocho horas. Hoy vino Ángel (hijo del señor Corsino) y sembró en nuestro terreno más de 20 matas de maíz.
Anoche estábamos jugando scrable con Ángel y a eso de las 8 de la noche se fue la luz. MEU y yo nos quedamos escuchando música hasta la media noche en una tablet Kindle, regalo de mi primera EX.
Sábado, 10 de mayo:
a las 6 de la tarde bajamos hasta casa del señor Antonio Rojas, suegro de Alecio (también hijo del señor Corsino), para asistir al rezo de Miguel, un nieto del señor Corsino (hijo de Arcángel) quien murió el año pasado, en un accidente, en Barinas. De nuestra casita a la de donde don Antonio media aproximadamente un kilómetro, a través de un sendero muy hermoso, con sembradíos de lado a lado, y va uno viendo las faldas cultivadas con café, cambures, yuca, cebollas, mandarinos, limón, ocumo, y al lado corre un fragoso río, cristalino, que se confundirá ladera abajo con el río Canaguá.
Estuvo presente en el rezo gran parte de comunidad: varios hijos y nietos del señor Corsino. Solamente Alecio tiene diez hijos, saquen ustedes la cuenta.
Al final de rezo, nos dieron a cada uno de los presentes una paledonia y una taza de café. Al regreso, apenas oscureciendo, Ángel se montó en una empalizada y cogió mandarinas para MEU. El señor Corsino sigue con mucha tos, y así también está Alí, el hijo de Alecio quien semanalmente se está dializando en Mérida.
Como pudimos resolver el problema de una antena de CANTV, ahora seguimos con interés por televisión las noticias sobre el permanente asedio a Venezuela por parte de EE UU.
Domingo: 6 a.m.: Algo extraño, la electricidad ha mantenido ininterrumpida desde ayer a las 3 de la tarde.
En las casas, la gente escucha por la radio la santa misa que se oficia en la iglesia de Canaguá. Ha llegado un nuevo sacerdote al pueblo, reemplazando al anterior, quien tenía cerca de ochenta años y está recién operado.
MEU prepara almácigos para berenjenas, lechugas repollos y brócolis. También sembró cilantro, zanahoria y rábano. Se pudo trasplantar matas de pimentón y se seleccionaron para el huerto cebollin y ajoporro.
Nos hemos dedicado a desyerbar el terreno para luego comenzar a sembrar mañana. Nosotros lo hacemos usando escardilla, rulas, palín, piqueta y pico. El señor Corsino nos dice que desde que llegaron los venenos para la siembra al campo la gente se olvidó de estos instrumentos.
El señor Corsino nos va a reglar una buena porción de semillas, y estamos limpiando, digo, el terreno para sembrar unas doscientas matas.
Ángel nos trajo por la mañana requesón y mantequilla, y por la tarde un trozo de torta de yuca y un trozo de torta de fororo.
Hoy no ha llovido.
Por la tarde tuvimos la visita del señor Corsino y de sus hijos Manuel y Enrique, y estuvimos departiendo como una hora, siempre sobre el asunto de la agricultura.
Por la noche nos hemos puesto a jugar scrable con Ángel. Ángel se retiro como a las 9 y luego nosotros nos pusimos a ver una película venezolana que estaban echando por el canal TVFANB, muy vieja, en blanco y negro, sobre la gente de la Península de Araya.
NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA: Un barco gringo se acerca a nuestras costas, y nuestros patrulleros salen a advertirle de que no entren en el mar territorial nuestro. Los gringos hacen el intento. Qué orgulloso me siento con el espíritu patriota, bolivariano y chavista de nuestras Fuerzas Armadas Bolivarianas. Cómo hemos cambiado positivamente en tan poco tiempo.
