Hemos presenciado con interés y tristeza la polémica. El tema es crucial, hay que debatirlo. Hay errores en el gobierno, hay que reconocerlo.
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Como pueblo, exigimos debate de altura y respetuoso. Se pueden decir verdades sin ofender.
Es claro que el salario no alcanza, no hace falta ningún estudio científico para demostrarlo. Pasqualina demuestra claramente que los ingresos generales se han ido reduciendo, pero los de los trabajadores y jubilados en mayor proporción, no hay duda que la tasa de explotación aumenta cada vez más.
Creemos que ambas partes apoyan la revolución, reconocen el esfuerzo de Maduro en defender la capacidad adquisitiva del pueblo. Ambos identifican al enemigo principal y reconocen el impacto del bloqueo y demás medidas del Imperialismo contra nuestra patria (Pasqualina dice que el impacto de la manipulación al bolívar es 66%, y el bloqueo a PDVSA 34%). Eso no está en duda. No aceptamos que se manipule haciendo pasar a la otra parte como oposicionista.
Concordamos con que hay dinero suficiente, sólo que cada vez va más a los bolsillos de la burguesía.
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Apoyamos que se ate el salario al Petro y revisar si medio Petro es suficiente.
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Apoyamos aumentar las utilidades, 15% es muy poco.
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Apoyamos aumentar los impuestos (no el IVA), somos unos de los países en los que la burguesía paga menos impuestos.
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Apoyamos que se revise la política de subsidios que se da a la burguesía para el pago de salarios.
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Si el ataque a nuestra moneda es lo que más impacta, es vital fortalecer el Petro. Estamos de acuerdo en el uso masivo del Petro, que se paguen los salarios y pensiones en Petro.
Pero hay que resolver cómo usar el Petro en forma práctica. No podemos pagar el pasaje o un kilo de arroz en Petros. Muchos deseamos ver al Petro prosperar. El Presidente Maduro ha demostrado con hechos que ha puesto todo su empeño en lograr que el Petro crezca a nivel mundial y en Venezuela. A nivel internacional está tomando fuerza y tiene un valor excelente para grandes transacciones. Pero últimamente se ha hablado poco del Petro.
El problema con el Petro para su uso doméstico es su gran valor, lo que hace difícil para usarlo en las cosas menudas (transporte urbano, comida, etc.). El Petro tiene mucho valor (varios millones de bolívares), y el mene, muy poco (0,00000001 Petro, unos céntimos de Bolívar). Podríamos usar una denominación intermedia adicional.
- ¿Cuánto es el pasaje?
- 0,00033 petros
No, así no camina. Ni en menes, que es 0,00000001 petros.
- ¿Cuánto cuesta el kilo de harina?
- 1.200.000 menes
Tampoco. Propongo definir dos denominaciones intermedias, entre el petro y el mene: la hora y el minuto.
Si el PIB de Venezuela es unos 20 Petros/persona/mes (mi estimado, sólo un ejemplo), y aceptamos una distribución piramidal de los ingresos no perfecta (nuestra estructura es aún 90% capitalista), con una relación de 16 entre ingresos máximos y mínimos (las mejores y más justas propuestas apuntan a reducir esa diferencia a sólo 4), podríamos estimar que el ingreso mínimo por persona estaría en el orden de 1 Petro/persona/ mes. Es decir, el trabajo de un obrero básico representa 1 Petro al mes.
El petróleo es una de nuestras riquezas naturales fundamentales (y de ahí el nombre de Petro), pero también hay que considerar que el valor fundamental de los productos y servicios lo da el trabajo (desde Adam Smith, Marx hasta nuestros días). Así que podemos calcular la nueva denominación intermedia en torno a la productividad de una unidad de tiempo de trabajo.
Una hora de trabajo representa unas centésimas de Petro y varios miles de Menes, por lo que sugiero usar una denominación intermedia. Necesitamos una denominación, fracción del Petro y múltiplo del Mene, que permita pagar la camioneta de transporte, la comida, etc. En términos de hoy, una fracción de unos 1.000 Bs.
Aquí viene lo interesante, un minuto de trabajo son unos 10.000 Menes (unos 1.500 Bolívares hoy). Entonces estaríamos pagando un pasaje con el producto de unos 5 a 10 minutos trabajo, y un kilo de arroz, por ejemplo, con 2 horas nuestro trabajo.
Propongo entonces crear una nueva denominación intermedia del Petro, denominada "minuto" para el uso general por el pueblo, en el entendido que Petro (nuestro recurso natural) y el trabajo (en horas o minutos) están relacionados.
Aquí se abre un campo interesante, que es comenzar a estimar las estructuras de costo de productos y servicios en base a los minutos de trabajo (u horas, como se quiera) invertidos en ellos, lo que daría una relación justa de precios, pues lo que requiera más trabajo, es lógico pensar que tenga más valor, y por tanto, más precio.