Claro que es necesaria la revisión de las condiciones salariales y sociales de los trabajadores universitarios. Este desafío requiere de un análisis para guiar la lucha ante nuevos escenarios y realidades lo cual también requiere de nuevas estrategias para el logro de los objetivos. Pero esta premisa no parece ser considerada por FAPUV.
La dirigencia de FAPUV ya nos tiene acostumbrados a derrotas, salvo que en esta oportunidad los únicos derrotados serán ellos y no la base profesoral quienes tenemos toda nuestra expectativa en la firma del I CONTRATO COLECTIVO de los trabajadores universitarios.
Desde hace muchos años esa dirigencia viene dejando un reguero de platos rotos producto de su torpe comportamiento ante la dinámica política del país y la lucha profesoral por mejores condiciones salariales. La ruta que escogió FAPUV va poco a poco al despeñadero (¿no hay alguien en esa directiva con otra voz?). En sus haberes tienen: A) es una de las primeras instituciones en reconocer el gobierno golpista de Carmona Estanga y por lo tanto cómplice de las consecuencias de tan cuestionado hecho. B) es una dirigencia que desconoce el marco jurídico vigente haciéndole comparsa a las autoridades universitarias para no aplicar la Ley Orgánica de Educación, lo cual ha dificultado el avance del proceso de democratización de las universidades. C) han hecho caso omiso a la aprobación y vigencia de la Ley Orgánica del Trabajo colocándose al margen de la discusión de la normativa laboral, pues decidieron no hacer la conversión de Asociación a Sindicato tal como lo exige la Ley. D) convirtieron la lucha gremial en un apalancamiento de intereses político partidistas irrespetando la pluralidad del pensamiento de los diferentes agremiados, esto los ha llevado a participar en actos comprometiendo el nombre del gremio cuando lo han podido hacer a título personal. E) han promovido una supuesta “unidad intergremial” y rechazan incorporarse a la discusión de la primera acta convenio de los trabajadores universitarios evidenciando el interés de utilizar a los demás sectores como son los obreros, empleados y estudiantes para otros fines.
Los profesores universitarios tenemos muchos años sin disfrutar de victorias gremiales, siempre hemos tenido que aceptar lo que el gobierno decide unilateralmente, que por cierto ha sido beneficioso, como fue el reconocimiento de la deuda por pasivos laborales y el pago a través de los petrobonos, rechazado también por FAPUV. Lo que lamentamos es que teniendo escenarios tan oportunos para fortalecer la educación universitaria venezolana, nuevamente se quedarán sin argumentos cuando anuncien muy pronto los acuerdos correspondientes. ¿Qué les explicarán a los profesores? Otra derrota más, para ellos.
Si FAPUV es coherente con su discurso, entonces suponemos que mantendrán el paro indefinido. Cuando llegue ese momento en los próximos días tendrán que verse las caras con la comunidad universitaria.
S C. 4-6-2013
