El significado de la expresión latina "Alma mater", es el de engendrar y trasformar al hombre y mujer por obra de la ciencia y del saber. ("madre nutricia", "alma" es un adjetivo derivado de alo / alere, que significa alimentar, hacer crecer). 

I. La derecha conservadora

En estas elecciones de la UCV, -como siempre-, no hay sorpresas: la derecha reaccionaria con el mismo discurso y persistente en su torpeza, se lanza dividida en tres planchas para la ansiada rectoría.  La Profesora Cecilia García Arocha, que obtuvo en esta primera vuelta el 50% del ‘apoyo electoral’, bajo el slogan de ‘Gestión, diálogo y autonomía’, va para la segunda vuelta con el Profesor Jorge Pabón.   Estos tres equipos invadieron los espacios académicos empapelando con su propaganda las paredes, exhibiendo sus trajes conservadores, de lúgubres colores, almidonados y planchaditos y sus impenetrables ¿sonrisas? (plancha de Arocha),  pa’ que no se dude que ell@s garantizaran el orden, el control y progreso, según manda la santa inquisición universitaria.  Es lo que llaman, el lenguaje subliminal del mensaje.  Y por supuesto, no podía faltar, la vaciedad dialéctica en la programación de estos equipos, cuyo fuerte precisamente es ostentar el poder para mantener el status quo universitario. Pareciera haber una relación: entre más vacío el mensaje mayor la opción de triunfo. 

Así que la misma historia, las propuestas, una mera exposición de líneas gruesas, operativas, sin ninguna discusión sobre lo qué llaman ‘filosofía universitaria’, es decir, una disertación de lo qué fue, lo qué es y lo qué el colectivo universitario sueña para la UCV.  Alguien mencionó, que los académicos e intelectuales, no tienen tiempo para largas lecturas y debates, o algo parecido, ellos están dedicados a sus elucubraciones, investigaciones y proyectos (incluido tumbar gobierno) para el bien de la nación y la humanidad. Tal “negligencia analítica’ (Expresión de Pedro García Olivo), la entendemos como un ahorro energético: ¿para qué esforzarse, si no existe contrincante? ¿O tenemos en cierne una avasalladora fuerza con un proyecto radical?  Pero en honor a la verdad, se debe hacer notar, que en los programas aparecen algunas frases de soporte para la polisémica autonomía en aras de justificar la continuidad de la Edad Media universitaria donde “los hombres de ciencia son a la vez señores feudales y monjes, inquisidores y cruzados” (1).

II. La izquierda domesticada

¿Recuerdan el debate durante la reforma con el Artículo 109?  Allí, se reivindicaron  luchas estudiantiles de años contra la pseudo democracia de las universidades.  La modificación de este artículo, incluía la paridad de voto entre profesores, estudiantes, administrativos y obreros universitarios, amén de reafirmar la autonomía universitaria. Es decir, rompía el oscurantismo del claustro universitario, donde el voto de los docentes es más que el de los estudiantes (1 profesor(a): 40 ó 50 estudiantes), aunado a la invisibilidad de los profesor@s instructor@s, administrativ@s, obrer@s y profesor@s jubilad@s a quienes se les cercena el derecho al voto, en una institución que en los últimos tiempos se ha convertido en un reducto de lucha por la democracia y las libertades en el país.

Entonces, una se pregunta, ¿cómo es que la izquierda entra en el juego de estas pseudo elecciones? además, con un proyecto ‘socialista’ encallado en el mismo cientificismo-reduccionismo, propio del positivismo, que no les distancia en lo sustantivo de la derecha.  Con esta conducta avalan la política universitaria de desvincular al colectivo universitario de su participación en la toma de decisiones. Ya saldrán algunos con aquello de no es el momento político?   Entonces, ¿a diez años de este proceso cuándo llegará ese momento?  ¿O seguimos jugando a que perdure la misma estructura? ¿Será que esta es la única política posible? ¿O estamos entrampados?  ¿Cuándo la izquierda universitaria iniciará un debate y una discusión para impulsar un cambio radical que convierta a la universidad en un acompañante para derrocar la explotación y dominación de las mayorías?  ¿Dónde está la propuesta para la construcción de una sociedad justa y equitativa?  ¿Se quedaron en la nostalgia aquellos años dorados de la ‘búsqueda de conciencia’?  ¿De la “imaginación al poder”?

III. La docilidad de los y las estudiantes

Asistimos a "un rechazo hacia cualquier tipo de actitud que conlleve enfrentamiento o contradicción con el poder legalmente constituido” (2).  En la universidad persisten los mismos personajes, la misma retórica, la misma pseudo democracia, la misma organicidad para la dominación, y no se escuchan los estudiantes de Violeta Parra…, no se escucha su “rugir como los vientos” ante la destrucción de nuestro único habitad, ante la pandemia del hambre que se cierne sobre la humanidad, ante la explotación y opresión… Ausente el “combate por la vida” (expresión de Alí Primera).  Aquí, si se le arruga el corazoncito a una.  Que bien hemos hecho el trabajo, dóciles para nuestro beneplácito.   

Por cierto, si mal no recuerdo, ninguno de estos temas fue abordado por los candidat@s al rectorado o decanatos ¿será que no es un problema de la universidad?  ¿Habrá algún tema más importante que la sobrevivencia? 

IV. ¿Qué hacer?

“Para conquistar la libertad no es necesaria una súbita explosión de heroísmo; se la logra mejor con una actitud de no-obediencia, con una persistente y tenaz no-colaboración, con una altiva y serena no sumisión” (3). 

¿Será que sólo el Pueblo salvará a la Universidad? 

*Docente-Investigadora. Fagro-UCV.  polando.delia@yahoo.es  
 

Referencias citadas

(1)Cappelletti A. (1994). Positivismo y evolucionismo en Venezuela. 1ª edición. Monte Ávila editores Latinoamericana. Caracas, Venezuela.

(2)Roitman Rosenmann M. (2003). "El pensamiento sistémico. Los orígenes del social-conformismo". Siglo XXI Editores. México.

(3)Boétie E. (2006). Discurso sobre la servidumbre voluntaria. 1ª edición. Libros de la Araucaria, S.A. Argentina.