PDVSA: Entorno, Amenazas, y El Segundo Rescate 2018

¿En cuál país y en que gobierno del mundo, en medio de una catástrofe financiera, de una situación de emergencia estructural, operativa y en medio de la urgente necesidad de corregir las cosas a profundidad, se pone al frente de una empresa medular, que genera el grueso de todos los ingresos en divisa que produce la nación, a individuos improvisados, inexpertos y que adolecen de la preparación necesaria?

No existe lógica detrás de ese tipo de decisiones que conlleva y ha conllevado, a la destrucción agravada de todas las otrora empresas emblemáticas y productivas de Venezuela y que en el caso de PDVSA contraproducentes para un gobierno que depende en más del 95% de sus ingresos.

EL ENTORNO

PDVSA asemeja un circo de mal gusto en donde todos viven el día posando, mintiendo, manipulando o cuidando cargos a través de las redes sociales. Ante la incapacidad de producir resultados optan por “halar mecate” para poder figurar, porque no conocen otra forma de  surgir. Una corporación petrolera en cualquier otra parte del mundo; llámese Rusia, Omán, China, Noruega o Pakistán, es una empresa manejada por expertos bien preparados y bien calificados para tal efecto, porque simple y llanamente cualquier error podría significar aparte de mucho dinero, muchas vidas.

En reciente alocución, Maduro instruye al responsable directo de una abismal caída de producción superior en promedio a 100.000 B/D por cada mes de desafortunada gestión, a elevar la producción de PDVSA en 1.000.000 B/D. A alguien quien aun con superpoderes otorgados hace algo más de mes y medio, no ha sabido hacer absolutamente nada con ellos, porque sencillamente ni el, ni su equipo tienen idea, no pueden y no tienen con que definir acciones de fondo que se traduzcan en resultados tangibles.

Como si ello no fuese suficiente, le invita a solicitar ayuda a la OPEP, a los árabes, China o Rusia  para elevar producción; vaya propuesta. Pedir ayuda a estos países, todos competidores entre si en ganar espacio en el tablero energético y todos a la vez activos recipientes del lucro de la desgracia en la que ha caído PDVSA, corporación que por si sola ha absorbido involuntariamente gran parte del recorte de producción de la mayor porción de los países de la OPEP acordado en Noviembre’2016 y ha a su vez también facilitado, el desarrollo de la producción de crudo proveniente de lutitas en los EEUU. Sobretodo a China y Rusia, cuyas operaciones en Venezuela han encarecido irracionalmente el costo de producción del barril criollo, como veremos más adelante. Sobretodo a los países/estados del golfo pérsico, cuya visión pragmática del negocio orientada hacia adentro; hacia lo nacionalista, los ha llevado a ser sociedades envidiables desde el punto de vista de nivel y calidad de vida.

Maduro nuevamente se equivoca. Lo que no sabemos es si es una “equivocación racionalizada u obligada”, ya que no se piensa en el país cuando se obra de esa manera, ni cuando se hacen semejantes propuestas. No se piensa en el país cuando se empeñan en poner al frente de instituciones medulares a paracaidistas improvisados, que a todas luces no tienen idea de donde están parados. No se piensa en el país, cuando a pesar de tener frente a sus ojos la huella del fracaso, no se actúa diligentemente para intentar un cambio en la dirección correcta.

LO QUE SE PODRIA DESATAR

No se debe perder de vista, que de cumplirse los pronósticos para Mayo’2018, la producción podría ceder a entre un máximo de 1.460.000 B/D y un mínimo de 1.390.000 B/D. Con ello el descenso total respecto al cierre 2017 sumaria unos 607.000 B/D y la baja anualizada al cierre de 2018 podría superar 1.030.000 B/D. Un escenario verdaderamente catastrófico para Venezuela y sobre todo para la estabilidad política del país, por las implicaciones que ello tiene sobre los flujos de ingresos y el cumplimiento de un denso abanico de compromisos internacionales.

Como si lo anterior no fuese suficiente, el costo unitario de producción se verá adversamente impactado para el ejercicio 2018, como consecuencia no solo del severo y sostenido descenso de su producción, sino como derivación de una incesante degeneración en la eficiencia operacional y un aumento desmesurado en la incidencia en ilícitos ambientales, incidentes y accidentes operativos.

A pesar del evidente y limitado nivel de inversión, se espera un salto importante en los gastos operativos como resultado del cabalgante clientelismo, de una fuerza hombre desmoralizada, reposera y poco productiva; que atenta contra el rendimiento. De una galopante corrupción, de procesos operacionales ineficientes y de un acelerado envejecimiento de su infraestructura que ha tornado a PDVSA en una empresa altamente riesgosa y poco productiva.

Las operaciones de campo/pozo se han visto afectadas no solo por la reducción del número de equipos y taladros activos, los cuales pasaron de cerca de 90 como promedio 2017, a unos 78 para el cierre de Abril’2018, sino que además por un alarmante y abrupto desplome en la eficiencia operacional, al haber migrado de más del 90% antes de 2008, a menos del 35% en la actualidad. Ello significa que lo que antes tomaba producir o generar un taladro, hoy día se requieren alrededor de 3 taladros para lograr el  mismo objetivo o resultado, con el consiguiente impacto en los costos, en una proporción similar en el mejor de los casos.

A lo anteriormente expuesto se suma el preocupante y creciente aumento en los costos de producción de las empresas mixtas. Según el informe anual PDVSA’2016 el impacto en los costos de producción de las operaciones de dichas empresas; a todas luces poco supervisadas, sobre el barril corporativo se incrementó por encima del 980% entre 2010 y 2014, al pasar de 0.3 US$/Bbl a 2.96 US$/Bbl en dicho periodo. Desafortunadamente no existe “data actualizada confiable” para el ejercicio 2017, sin embargo sumado a todo lo anterior y como resultado del aumento de la fracción de pesado/extrapesado (X/Xp) en su volumetría, así como la creciente necesidad de crudo y productos importados y mejoramiento, es sencillo advertir que dichos costos se hayan catapultado y lo sigan haciendo notoriamente.

El único recurso a la mano de esa directiva que hoy destruye y torna disfuncional a PDVSA y que pudiese servir para maquillar u ocultar unos muy adversos resultados en los costos de producción, serian los llamados “Ingresos Financieros”. Esa misma triquiñuela que le sirvió a Rafael Ramírez y Eulogio del Pino para matizar los costos de producción más allá de 2014, fecha para la cual excedieron los US$18 por barril.

EL RESCATE EN SU SEGUNDA VERSION

La ruta de la recuperación de PDVSA se torna cada vez más compleja, pero lo que es irrebatible es que irremediablemente debe pasar por eliminar de cuajo la demagogia, el clientelismo y el irracional dogmatismo de su seno. Debe pasar por desincorporar a toda esa junta directiva que hoy la destruye y que se empeñan en mantener. Por sacar de raíz a la corrupción en todas sus formas; no solo al robar y destruir como en efecto lo han hecho, sino incluso al colocar elementos no preparados a ocupar cargos de alta responsabilidad, por amiguismo o “conchupancia”. Debe pasar por el rescate de la mística de trabajo y sobretodo de la eficiencia, pero también por entender que dirigir las lides de una compleja industria como PDVSA, amerita conocimiento, preparación y lealtad al país, más allá de un servilismo incondicional a un color político o una individualidad determinada.

Teniendo lo anterior por delante, no tiene sentido alguno tener incondicionales que son incapaces de producir resultado frente a PDVSA ni ninguna otra institución, ya que se atenta contra si mismo. Si la lealtad incondicional es el tema de preocupación para algunos radicales, pues para eso están los mecanismos que otorga la ley para llamar a botón y exigir resultados a tiempo a cualquier directiva o presidente de cualquier ente nacional o privado. O es que acaso no se cree en esas instituciones?

El rescate de PDVSA no necesita de su privatización. La privatización traería beneficios a todos aquellos mediadores o traficantes de influencia; pero cero beneficio de largo plazo a la nación; no es ni necesaria ni conveniente.

Es que acaso, Kuwait, Arabia Saudita, Emiratos o Qatar; por cierto este ultimo el país más rico per capita del mundo, han necesitado privatizar para ser exitosos, o son sus leyes, cultura e instituciones las que con su nacionalismo, vigilancia, apego a su constitución y amor a la patria han hecho grandes a esos países? Ha sido acaso el capital foráneo de alguna manera beneficioso luego de más de 20 años de destrucción sistemática para Iraq o Libya; países estos con la mayor densidad de inversión foránea petrolera por kilómetro cuadrado en el orbe?

Quienquiera que sea del bando radical opositor que piense que en caso de un eventual cambio de gobierno va a entrar triunfalmente a tomar PDVSA, esta totalmente equivocado. Por el contrario, la pondría aun en mayor riesgo. Allí conviven más de 150.000 trabajadores que merecen ser respetados y que sin lugar a dudas van a reclamar su espacio a “toda costa”.

Por allí asomó la cabeza L. Giusti recientemente y casualmente en vísperas de las recientes elecciones. El mismo personaje que no solo llevo a la quiebra a Alange Energy, sino que además manipulo sus cifras para internar ocultar la gusanera que había creado. El mismo que tiene el “merito” de que aun a pesar de una producción de 3.45 MMBD para entonces (1998), ostenta el “honor” de tener el record del menor ingreso neto jamás registrado en la historia de PDVSA de $663 millardo; aunque quizá Quevedo lo destrone ahora en 2018.

El cambio amerita reconsiderar las leyes y los esquemas de negocio prevalecientes, para poder liberar a PDVSA del lastre creado por Ramírez y Del Pino con el plan siembra petrolera y más recientemente por el lastre que se esta tejiendo alrededor de su actual administración. Amerita hacer una jerarquización de las opciones y reeditar el portafolio de negocios. Amerita retomar la tecnología propia y reducir a lo estrictamente necesario el apalancarse en las empresas de servicio. Amerita racionalizar, la debida vigilancia de los activos, el control y seguimiento cerrado de la gestión financiera, operacional, gerencial y directiva.

El plan a 6 años apunta a 2.9 MMBD y considera un barril a US$42.5 en previsión a la entrada de ese volumen perdido por las fallidas administraciones. Considera el MMBTU en US$1.1, asignado al uso exclusivo del desarrollo del parque industrial y termoeléctrico domestico. Posee varios componentes, inclusive la Faja Petrolífera del Orinoco y Costa Afuera, pero desde una perspectiva operativa y de negocios distinta. La actividad desplegada ameritaría un CAPEX lineal sostenido en el rango de US$2.7 a US$3.1 millardo, con una tasa de descuento del 10% y una depreciación del 12%, con lo cual se apuntaría hacia un UTC de US$5.8 a US$6.1 per barrel.



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Einstein Millán Arcia

Asesor Petróleo y Gas "Upstream" & RE SME/Estudios de Especialización a nivel de doctorado en flujo de fluido en medios porosos – The University of Oklahoma, 1991 / Master of Science Petroleum Engineering – The University of Oklahoma, 1990 / Ingeniero de Petróleo Universidad de Oriente, 1979. Ha publicado y presentado en diversas revistas y conferencias internacionales más de 12 trabajos especializados en materia de Petróleo y Gas. Ha escrito más de 300 artículos de opinión y sido citado en materia de petróleo y gas en: spglobal.com, aporrea.org, NoticiasVenezuela.org, Plattsblog, Oilpro.com, las armas de coronel, Vanguardia de España, segurosybanca.com, The Slush Pit (Oklahoma Oil & Gas News), Energy Economist, Kaieteur-news & Stabroeknews Guyana, Sputnik-news y Los Ángeles Times.

 emillan7@hotmail.com      @EinsteinMillan

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