Aunque Chávez diga por su Twitter que “Hemos obtenido una sólida victoria” NO es la verdad verdadera. La oligarquía y sus aliados gringos y no gringos aquí caben Tirios y Troyanos en un mismo saco “incluidos los golpistas del once de abril” han logrado esta vez ponerle al proceso bolivariano un freno, las gríngolas de plomo que frenaran poco a poco el proceso revolucionario, a ese caballo blanco de nuestro escudo que marchaba ahora a la izquierda.
A pesar del 66,45% de votantes y sus 94 diputados de 165 en total, esto no tienen ahora la fuerza suficiente y necesaria para continuar haciendo leyes a troche y moche, no, no, ahora no tienen ya la mayoría necesaria de los dos tercios para aprobar ciertas y determinantes leyes que necesita el proceso y el pueblo revolucionario. Ahora deben dialogar, parlamentar, llegar a acuerdos con las fuerzas opositoras.
Esto puede sea beneficioso, pues es una lección que la vida da a los que con arrogancia y pre potencia se olvidan del pueblo en alpargatas, de cubrir sus necesitadas diarias y perentorias y de sus problemas del diario vivir llano y sencillo, aquellos “líderes”, que desde sus pináculos cupuleros, se volvieron ciegos y sordos como piedras.
Se olvidaron de dialogar con su pueblo de escucharlo y de resolverle tanto a las personas como a las comunidades esos pequeños, pero importantes problemas del diario vivir, que de no resolverlos con prontitud y con celeridad se convierten en una pesada carga para el pueblo que las padece.
Si bien el PSUV, es el primer partido en el gobierno, también ahora la oposición es la primera fuerza opositora en la Asamblea y en el Parlatino. –Esto es una realidad-
Lo que ha de suceder sucede, pero era lógico pensar que ante una Asamblea Nacional ciega, sorda y prepotente, estos sean los resultados, puede ser que sean muy buenos para algunos, pero quien sabe, puede ser también el principio del final de un sueño inalcanzable. O el comienzo de otra historia. Una cosa es segura nada será igual a un trece, y por ahora, todo será diferente.
De quienes son ahora las culpas y la comedia de las equivocaciones, de muchos pienso yo, hasta del mismo pueblo por castigarse con la misma soga del ahorcado.
Algo lo que nos llama mucho la atención es ese empate técnico de votantes electores en El Parlamento Latinoamericano, que interpretación podemos darle a esto, no hay otra sino que: muchos votaron cruzado, será por aquello de los “infiltrados, y de la quinta columna, de cómo decía el brujo de Guatire –segundo padre de la patria para los adecos- “adeco es adeco hasta que se muere” y tiene su corazoncito de guanábana digo yo.
Muchos que votaron por candidatos chavistas votaron por el Parlatino Adeco también, ¿camaleones?, ¿alacranes? ¿Mimetizados como yo les digo?, todo es posible en la dimensión desconocida. Por ahora, todo es posible, hasta puede ser que, existan alacranes blancos, y alacranes rojos.
Pero para continuar desde la Asamblea Nacional “Haciendo revolución” como antes hacían los señores diputados, no es suficientes noventa y tantos diputados. Con una simple regla de tres, se saca la cuenta ¿cierto Presidente? Ahora tendrán que parlamentar y no con su pueblo como debieron haber hecho con antelación a esto, sino con la oposición aquella del golpe del 11 de abril, la que juega con dos barajas, y el AS bajo la manga.
La que aún tiene la lista de los que no firmaron para que Chávez se fuera
No hay duda que, seguimos siendo por ahora, una democracia al buen estilo burgués, pero que se llama ella misma socialista y bolivariana, que poco a poco pierde el rumbo y el camino de su pueblo.
Así se lo hicieron saber con sus votos a los señores del gobierno.
No será acaso, que el pueblo pedía que lo escucharan de verdad no de mentirijillas, y que el pueblo quisiera más revolución verdadera y no de timoratas medidas revisionistas al mejor al estilo de la democracia burguesa.
Los apóstoles “líderes” deben predicar con su ejemplo. ¿Lo hicieron acaso?
Para cada cosa hay que saber tomarle el pulso a la historia y no equivocarse, pero noventa y tantos no son suficientes por ahora.
¡Hasta la Victoria Siempre!
