"Huele a 2012, el viento del 2012 está llegando, la pasión (…) ya huele al huracán que viene, estos vientos anuncian los huracanes de 2012, cuando iremos a elecciones presidenciales otra vez para los próximos seis años y la oposición ahí está, quién es el líder de la oposición", dijo Chávez.  

El Mandatario venezolano buscará una segunda reelección en los venideros comicios y para ello aseveró que “la batalla ya comenzó, va a ser dura y buena”. En el debate, “la oposición política tratará de convencer de que el camino que ellos proponen es el mejor, y nosotros con argumentos certeros tenemos que convencer de que éste es el camino, porque tenemos que seguir por el camino bolivariano, democrático y socialista”.  

Cuando faltan  22 meses para los comicios, los partidos que adversan al Gobierno Bolivariano no tienen un candidato que los represente, e internamente existe una infinidad de precandidatos entre los que se encuentran el Gobernador del estado Zulia, Pablo Pérez, los diputados Alfonso Marquina, Omar Barboza, Delsa Solórzano, Willian Ojeda y el ex Gobernador del Zulia, Manuel Rosales, quien se encuentra exiliado en Perú, luego de que la justicia venezolana le imputara el cargo de enriquecimiento ilícito durante su gestión como Gobernador del Zulia.  

A nivel internacional el tema ya fue abordado por el Secretario General de la Organización de Estados Americanos-OEA- José Miguel Insulza, quien expresó  que “si en Venezuela va a haber reelección, lo importante es que se desarrolle dentro de las normas democráticas”. Además, sostuvo que  que si los venezolanos eligen otra vez a Chávez, “nosotros naturalmente no vemos razón para tener sobre ellos una actitud crítica, pues es una decisión del pueblo venezolano”. Reiteró que “no hay nada en la Carta Democrática Interamericana que inhiba a los países adoptar reformas que permitan la reelección”.  

El Jefe de Estado, quien cumplió 12 años en el poder, tiene  el  54,7% de aceptación a  su gestión, así lo reveló el Director de la encuestadora Grupo de Investigación Social Siglo XXI - GIS XXI- Jesse Chacón, quien indicó que más de la mitad de la población considera como buena o muy buena su  administración. Recordó que el incremento del respaldo popular a Chávez está vinculado con el manejo de la situación de los damnificados por las lluvias registradas a finales de diciembre de 2010, las cuales afectaron al 30 por ciento de la población venezolana. 

A la par, el Presidente de la encuestadora Hinterlaces, Óscar Schemel, indicó que el índice de popularidad del Primer Mandatario Nacional mantiene niveles importantes de aceptación. “En el más reciente monitor país, el Presidente tiene 49% de evaluación positiva de gestión; esto significa un incremento de 7 puntos con relación con la evaluación que tenía en vísperas de las elecciones parlamentarias, hay una recuperación”.  A juicio del analista, el Jefe de Estado mantiene, a través de su aparato de propaganda, una renovación constante de la fe y la esperanza. 

Cabe destacar, que desde inicio de la gestión del Comandante Presidente en el año 1999, los sectores que le adversan han mantenido una férrea posición en contra de las políticas gubernamentales que se han implementado. La oposición venezolana ha objetado en doce años de Gobierno todos los aspectos y en variada intensidad, relacionados con la figura presidencial, tanto pública como privada; asimismo han ensayado diversas formas para intentar asumir el poder incluyendo entre las opciones las salidas violentas: golpes de Estado, paros petrolero y patronal, saboteos eléctricos, así como el suministro de combustible. Sin embargo, el mismo Presidente Chávez los ha encauzado por la vía democrática en sus intentos para acceder al poder.

  
 
Llegados a este punto y forzados a respetar la Constitución de la República Bolivariana de Venzuela, criticada y objetada por la oposición  desde su implementación, se vislumbra para el año 2012 las apeticibles elecciones presidenciales para un importante número de actores que hacen vida en la oposición. Para la derecha venezolana en pleno las elecciones presidenciales más que una opción política se les ha convertido en un importante obstáculo a vencer en la carrera por intentar llegar al Palacio de Miraflores.

  
El principal problema que enfrenta actualmente la oposición es que a escasos 22 meses de las elecciones presidenciales no cuentan con una figura política fuerte que aglutine a un importante número de personas que supere el número de seguidores del actual Presidente y desde ya pre candidato Hugo Chávez. Inclusive para llegar a ese nombre que tanto necesitan en estos momentos, deben sortear varios obstáculos ¿Cómo van a lograr ponerse de acuerdo en un sólo nombre habiendo tantos intereses por medio? ¿Por qué vía van a escoger a ese candidato? ¿Consenso? ¿Elecciones primarias? ¿Cuándo? ¿A finales de este año o principio del próximo? Además, deben ajustarse a las dierctrices que emanan del exterior.

 
El tiempo en todas sus expresiones atenta contra los grupos de oposición, deben encontrar una figura política fuerte que pueda enfrentarse al Presidente en las elecciones y tener tiempo suficiente para que ese candidato recorra el país en búsqueda de apoyo, pero también, escogerlo con un margen amplio de tiempo, atenta contra el propio candidato, habida cuenta que los adversarios nunca han contado y no lo hacen en este momento con un proyecto político atractivo para la población. En estos momentos pensar en escoger un candidato de la oposición, implica arriesgarse a que ese nombre, sea femenino o masculino,  se desgaste antes de tiempo.

  
En Venezuela la derecha tiene una lista aún no definida pero numerosa de posibles pre candidatos (de los que quizá el Gobierno de Estados Unidos tenga su preferencia o su candidato que aún no ha hecho visible) en tanto que la mayor fuerza política en el país encarnada en el Partido Socialista Unido de Venezuela, ya tiene su candidato claramente definido y sin divergencias.

Sólo queda esperar cuanto tiempo pasará para que la oposición se ponga de acuerdo y por fin tenga  un aspirante para las elecciones presidenciales y además si son capaces de mantener un sólo candidato, o comenzarán a presentarse sub grupos dentro del grupo con otras opciones presidenciales, tal como ocurrió a una semana de la instalación de la Asamblea Nacional, donde los diputados de la derecha se mostraban en principio como un grupo monolítico y a las pocas horas comenzaron a fragmentarse en función de sus intereses y ambiciones capitalistas.

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(*) La autora es licenciada en comunciación social, analista político en Venezuela y colaboradora para este medio de comunicación.-