Alguien ha dicho, yo lo he oído: El socialismo debe ser humanamente gratificante. Lo creemos y es por ello, que nos atrevemos a soñar como debería ser ese socialismo del siglo 21 que estamos implantando en nuestro país. Aun cuando suene a imposible, a utopía, estamos seguros que con diligencia, con amor, con solidaridad y con un buen uso de la sabiduría y la tecnología lograremos, concretar los conceptos de BUEN VIVIR y la MAYOR SUMA DE FELICIDAD para el pueblo.
Qué mas gratificante, para un humano, que levantar la mano arrancar una naranja del árbol pelarla comerla y calmar la sed, sin miedo, sin tener obligatoriamente que pagar mas que el precio justo, sin tener que robarla, hasta sin haber tenido la necesidad de sembrarla. Pues así mismo, sin mayores dificultades es humanamente gratificante, tener la posibilidad de acceder a la educación, a la formación académica pertinente sin tener que pagarla, sin tener que pasar por pruebas o permisos, sin tener que humillarse, o sin tener que cumplir condiciones, cuyo objetivo primordial es producir lucro con ello, para un reducido grupo de personas.
Este ejemplo que acabamos de explicar pudiera parecer extraño o incongruente, con lo que sugerimos con el titulo de este trabajo. Por ello permítame explicarle, la razón del uso de este ejemplo: Para las personas que hemos nacido y crecido en el campo, donde se realizan actividades agrícolas, siempre recordamos que muchas veces nos castigaban por haberle lanzado palos y piedras a los arboles para tumbar frutas en los patios o plantíos siempre ajenos, y como quiera que por lo general los que vivían y trabajaban los campos, no éramos precisamente los propietarios de esos predios, entonces era muy común inmovilizarnos, con un rosario de prohibiciones: no toques, no cortes ,no tumbes frutas porque el amo se pone bravo.
De allí que, como los campesinos, sobre todo los niños y adolescente éramos muy pobres pero no éramos estúpidos, razonábamos; ¿acaso nuestros padres y mayores no nos dicen a diario, que todo lo creó Dios o la naturaleza y, es para el consumo de los humanos?, ¿entonces por qué hacemos daño con tomar una parte del regalo que la naturaleza a puesto en el árbol de naranja?
También es humanamente gratificante, poder acceder a la asistencia medica necesaria sin tener que pagarla sin tener que mendigar la posibilidad de obtener lo propio. Además de ser la asistencia una especie de apostolado, y de ser un derecho consagrado y garantizado en nuestra constitución nacional, la asistencia medica es aplicada por profesionales de medicina quienes son parte del pueblo y reciben la formación profesional en todos sus niveles, por el estado venezolano en absoluta gratuidad, es la medicina la única o tal vez la única carrera universitaria que es totalmente impartida por el estado venezolano. Solo por ellos la asistencia médica debería ser gratuita, y no me refiero a que los médicos no reciban emolumentos por su trabajo.
De la misma manera. Acceder a una vivienda cuando la requieras, sin tener la necesidad de hipotecarte, o sin tener la necesidad de pagar un alquiler. En fin, acceder a una vivienda como realmente la requieres, donde quieras y la necesites, pero que la obtención de esa vivienda no sea objeto de lucro para nadie ni siquiera para el estado. Eso también debería ser definitivamente humanamente gratificante.
Alimentación. La alimentación de todos y cada uno de los habitantes de un estado socialista debe ser humanamente gratificante, porque el acceso a todos los alimentos, de buena calidad en suficiente cantidad y de características suficientes para el disfrute y la nutrición, debe ser una situación inherente al humano en forma natural como cualquier aspecto de su vida particular como reír pensar soñar dormir tener sentimientos, o sea también la alimentación no debe ser objeto de lucro.
Educación. Esta actividad humana tan necesaria, tan vital -no tenerla es morir-, también debe ser reconocida como una actividad humanamente gratificante. Formarse como ciudadano, conocer, viajar cultivarse debe ser gratificante. Obtener una formación para la creación, para investigar, para producir los rubros alimentarios necesarios para la subsistencia de la vida, para proveer al ciudadano de la asistencia medica y de salud pertinente, Formarse para enseñar, formarse para crear elementos de ocio y esparcimiento de la población.
La actividad laboral, normalmente conocida como trabajo también debe ser gratificante. Porque la ejecución de las obras y actividades, que nos van a proveer de los elemento que cubrirán nuestras necesidades, no deben verse como un trabajo o actividad pesada, además de ello clasificado con diferentes valores y escalas. Ya que definitivamente, esa actividad que llaman trabajo no necesariamente tendrá que ser calificada como un costo; de manera que no se convierta la mano de obra en un objeto de lucro, ya que realmente la actividad laboral se ejecuta para favorecer a todos los ciudadanos, no para enriquecer a pocos.
Ya antes de la era precolombina nuestros pueblos originarios, se desenvolvían en su diario quehacer y existir de una forma muy parecida a lo que consideramos socialismo, por ejemplo. La forma como distribuían las tierras dedicadas a la labranza y la cría y también al hábitat del pueblo, así como la distribución de la riqueza el trabajo, toda de una manera solidaria integral justa y equitativa. Sin entrar en detalles, acerca de las culturas precolombinas, podemos concluir que; la convivencia en esas organizaciones humanas, esta cercana -muy cercana- al logro de una importante suma de felicidad para el pueblo.
¡PATRIA SOCIALISTA O MUERTE! ¡VENCEREMOS!
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