Ha fallecido Hugo Chávez Frías en su condición de Presidente de la
República Bolivariana de Venezuela, Comandante en Jefe de la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana y líder popular, amado y venerado por una gran parte
de la población venezolana. Ha fallecido el hombre que logró canalizar las
fuerzas devenidas de las rebeliones populares del 27 y 28 de febrero de
1989 y del 13 de abril de 2002, y las rebeliones militares del 4 de
febrero y 27 de noviembre de 1992. Ha fallecido el político que con su
discurso y su accionar de gobierno ha legitimado ambos tipos de rebelión,
la popular y la militar.
Comienza una nueva etapa en la política venezolana, la cual estará signada
por la permanente comparación entre lo que se hará y lo que seguramente
habría hecho Hugo Chávez. Su forma de gobernar, su vinculación con las
grandes mayorías populares, su política social y la preeminencia que le
dio al componente militar, serán los principales elementos de
comparación. Todo aquello que se salga de ese gran eje conductor,
seguramente que provocará reacciones.
Esas reacciones tendrán dos fuentes de emanación: los sectores populares a
quienes él les devolvió una esperanza de vida y que lo acompañaron
masivamente hasta su última morada, y los sectores militares a quienes él
les dio un gran protagonismo político y que lo acogieron y protegieron
hasta sus últimos momentos de vida. Ambos sectores se sentirán llamados y
legitimados a actuar y pronunciarse ante todo lo que considerarán como
una traición al legado de Hugo Chávez Frías. ¿Por cuánto tiempo? El
devenir histórico escribirá pocas o muchas páginas en ese sentido.
* alportillo@ula.ve