Si bien es cierto que en la actualidad las izquierdas en el mundo, han avanzado en el contexto de un capitalismo cada vez más depredador y violento, igualmente lo es, que la izquierda en su conjunto representa ideas a veces encontradas en un mar de infinitas discusiones y aparentes contradicciones. Uno de los aspectos a considerar a mi juicio es el análisis parcial de las condiciones objetivas y la realidad económica y social en cada país donde esta actúa y hace vida.

Podríamos preguntarnos y no es la primera vez que lo hacemos, porqué la izquierda no ha tomado el poder en algunas partes del mundo, por ejemplo España o Italia, cuando han presentado fuerzas suficientes para dar el siguiente paso, acaso es el adolecimiento de un liderazgo que hilvane las fuerzas y presente un programa único, cosa que regularmente la izquierda pretende ignorar, el caso mas patético es el de Venezuela donde históricamente la izquierda se consumió en quien asumía esa responsabilidad y mas tarde con la aparición del Comandante Eterno, de alguna forma unos y otros sintieron no la envidia sino la gran perdida de oportunidades en la elaboración de políticas verdaderamente nacionalistas y defensa de las causas patrióticas.

Ahora bien, estamos en presencia de un gobierno de izquierda, antiimperialista y profundamente nacionalista, qué representa ello en la Venezuela de hoy, si no es el cumplimiento de un sueño o el principio esperado de la utopía hecha verdad y aún por realizar, pareciera una contradicción pero no lo es, nuestra lucha antes de Chávez estuvo signada por la meta de alcanzar el poder por la vía armada que fracasó por diversas causas, entre ellas, una de suma importancia, desconocimiento de la realidad política y alejamiento de las propuestas patrias que luego asumió Chávez, el equilibrio de fuerzas fue ignorado y en lo particular creo que se cayó en el inmediatismo secular por decirlo de esta manera, donde el enemigo provocó el mayor descaro ocurrido en Venezuela luego de la caída de la dictadura de Pérez Jiménez, consistió y abrumados por el triunfo de la Revolución Cubana se consideró que las condiciones estaban dadas, cosa que nunca fue cierta. Otro elemento que ha perjudicado a las izquierdas en sus luchas, ha sido el foquismo y la perdida de la realidad de fuerzas, además que el contexto ideológico jamás estuvo realmente claro.

Esa es la verdad y lo vemos en quienes para entonces en buena proporción aparecían como líderes del movimiento guerrillero y de masas y hoy están subsumidos del lado de la contra revolución, inclusive de manera hostil y decadente. Dicho esto, hagamos un parangón con la situación actual, conservando las distancias debidas y el respeto por ambos proyectos de luchas.

La situación de ataque permanente de las fuerzas de la oposición dentro y fuera del país, exige ante todo y de manera definitiva la mayor unidad posible y blindada hasta los tuétanos, no se le debe otorgar armas provenientes de nuestras filas más allá de las críticas constructivas y el deseo de la defensa de todas las fuerzas, no es el momento para que alguien dicte clases del como se debe dirigir la revolución bolivariana y mucho invocando teorías de cualquier origen por supuesto sin renunciar a ellas, por ejemplo el legado del marxismo hay que verlo solo como un instrumento para el análisis y la lucha, un método extraordinario para avanzar, las revoluciones triunfantes hay que verlas como eso sin pretender trasladar a nuestro país, independientemente de la solidaridad pertinente estratégica y tomar de ellas por vía de la solidaridad y el internacionalismo sus verdades en el campo político.

Dado el razonamiento anterior, no debemos en las actuales circunstancias echarle leña al fuego porque toda chispa es tomada por la oposición para el cumplimiento de sus planes, el que no entienda eso y traslade sus pensamientos a este hecho concreto mejor que calle y se relaje, en esta Revolución no hace falta protagonismo para inducir por ejemplo que ese no es el camino, por el contrario, búsquese la tribuna deseada a nivel interno y haga comunicativa sus inquietudes.

A los compañeros Toby Valderrama y Aponte, humildemente les hago un llamado a la sindéresis política y militante, a quienes considero necesarios en esta lucha y de este lado, así que piensen bajar la guardia y ofrecer sus servicios y conocimientos de sus experiencia militante de muchos años y colocarlos en el lado correcto y dedicarse si es posible a descarnar y desentrañar las ardides del enemigo que son buenos para ello.

Obedeciendo al titulo de la presente entrega, es bueno agregar que estamos en los albores de una nueva realidad en la lucha de las izquierdas, lo que se justifica aun más en lo que sucede en nuestro país y con la esperanza firme de no perder este legado hermoso que nos ha dejado el líder indiscutible de la proximidad de una revolución mundial, debemos inventar y adaptar los conocimientos a esta primigenia revolución bolivariana y ofrecerle sin ambages ni dudas lo mejor de todos nosotros, para ello, necesario es cumplir el mandato del Comandante supremo. Unidad, Lucha, Batalla y Victoria.-