Fascismo.- Del italiano fascio, agrupación.
Por definición, es la tendencia más reaccionaria en el mundo capitalista, la dictadura terrorista descarada de los círculos más chovinistas[1] (excluyentistas) y agresivos del capitalismo monopolista (o rentista y parasitario), cuando pierde el control político de Estado.
El régimen fascista fue instaurado por primera vez en 1922, en Italia, en 1933 en Alemania, y posteriormente en España y algunos otros países.
La burguesía imperialista recurre al fascismo cuando en virtud de un ascenso extraordinario del movimiento revolucionario de las masas populares, no está en posibilidad de dirigir y ejercer el poder con los métodos del parlamentarismo y la democracia burguesa[2].
El fin principal del fascismo consiste en salvaguardar el régimen capitalista, en liquidar totalmente los derechos y libertades democráticas en el interior del país, aplastar el movimiento obrero y de liberación nacional y preparar y desencadenar guerras agresivas[3].
La ideología fascista está destinada a apuntalar esta política criminal y hostigar el pueblo. En ella ocupa un lugar central el anticomunismo, cuyo contenido principal es calumniar el socialismo y falsificar la política y objetivos de los partidos comunistas y obreros, la teoría del marximo-leninismo. Típico en esta ideología fascista es el culto a la fuerza y el poder personal y la prédica de la guerra como algo consustancial al hombre.
Los ideólogos del fascismo utilizan con profusión la demagogia social para engañar a las masas (se valen de lo que hoy llamamos mediática comunicacional de amplio espectro: medios escritos, radiales, televisivos internetianos y afines).
A pesar de su tremenda derrota sufrida en la Segunda Guerra Mundial (1945), el fascismo se halla latente y hoy por hoy es alimentado por el imperialismo capitalista del momento ante el despertar de muchos pueblos del mundo contemporáneo que luchan contra la monopolaridad.
La lucha activa e inflexible contra el peligro del fascismo es la lucha contra la guerra, por la paz, la democracia y el socialismo, y en Venezuela, la lucha por el socialismo del siglo XXI.
Tomado de: I. Blauberg, Diccionario Marxista de Filosofía (Ediciones de Cultura Popular. México, 1978) p. 113.
[1] Chovinista = nacionalismo barato, clasista y racista.
[2] Evidente caso venezolano de la Venezuela actual Bolivariana.
[3] Las llamadas guarimbas son acciones belicistas puntuales que buscan rencillas focales dentro de grupos sociales aislados de la clase media, la más susceptible de sentir odio visceral contra los movimientos populares que la revolución emprende con prioridad en favor de los más humildes y marginados por esa misma clase media alienada, infatuada y servil de la clase burguesa.