Estamos en una encrucijada de los tiempos para la patria venezolana. Seriamos inocentes al desdeñar las innumerables amenazas externas e internas que se ciernen sobre nuestro pueblo heroico. Indudablemente el III Congreso del PSUV se constituye de hecho en una formidable oportunidad para quienes militamos en las filas del Chavismo. Ya en sí misma la posibilidad de congregarnos para debatir los grandes temas de la vida republicana es expresión de conciencia y fortaleza para la unidad de los patriotas bolivarianos y socialistas. Congregarnos es más que simplemente reunirnos y encontrarnos; es imbuirnos espiritual y políticamente del legado amoroso, pedagógico y doctrinario del Comandante Invicto Hugo Chávez principal bastión de la Revolución Bolivariana.
En todas las instancias congregadas desde las bases, movimientos y frentes sociales, concejos comunales, concejos de trabajadores, comunas y cualquier otra expresión de agrupación unitaria nos permitirá la revisión, discusión y debates de todos los aspectos principistas, programáticos y organizativos del PSUV y demás aspectos vitales para el funcionamiento orgánico del Gobierno Revolucionario. Un elemento fundamental de la espiritualidad e inspiración para la participación en este III Congreso es recordar que no solo de pan vive el hombre; por supuesto que en la comunidad local y regional hay suficientes necesidades materiales y de servicios, así como distintos problemas de gobernalidad que también sería pertinentes abordarlos con la seriedad que ameriten las reuniones; no obstante la finalidad del congreso no será cargarnos de innumerables casos y casos que distraigan las autentica finalidad de esta excelsa actividad. No dudo que igual como en el desierto cuando Cristo, se presentará más de un Satán con fines maquiavélicos para desviar la atención suprema del Congreso; otros estarán cuantificando tentaciones inimaginables del egoísmo más miserable.
Con la ayuda de Dios y Cristo Redentor de los Pueblos como testigo de nuestros debates, la unidad y el amor por la patria deben ser nuestras consignas. Estamos convencidos que La palabra de Dios nos dará el aplacamiento y tranquilidad en momentos de tensión y angustia. Nos dará descanso y paz en nuestras mentes y corazones ante el desasosiego; Nos dará la esperanza y la seguridad que la heredad y asistencia espiritual de Nuestro Comandante amado Hugo Chávez será inspiración perfecta del III Congreso del PSUV y sus resoluciones. Venceremos¡¡¡
@williamfarinas