Felipe González, socio político y económico de Carlos Andrés Pérez se encuentra muy alarmado por lo que está sucediendo actualmente en España y dice que ‘”Es lo peor que le puede pasar a España que este influenciada por la alternativa bolivariana”.
El expresidente del Gobierno ha reconocido que existe un malestar social “mundial” por el incremento de la desigualdad pero se ha mostrado preocupado, por la respuesta a este problema. “La alternativa bolivariana sería una catástrofe sin paliativos. Si llega, yo tendré el consuelo de decir que yo ya lo dije”, el entiende esto como una moda..
Venezuela vive un gran proceso histórico tan importante, tan fundamental que debemos preservar en todo momento; a pesar de todas sus debilidades que, incluso, muchas de sus instituciones han sido tomadas como ejemplo por gobiernos de otras naciones.
Nunca hasta ahora se había visto en la historia republicana de Venezuela las transformaciones o cambios tan importantes, como se realizan actualmente en un proceso, en el que su cabeza principal fue, indiscutiblemente, el presidente Hugo Chávez y ahora el presidente Maduro.
Las estadísticas han demostrado que a nivel de América Latina el país menos desigual en la distribución del ingreso es Venezuela. Eso tiene que ver con la circunstancia de que la pobreza extrema y la pobreza clásica han disminuido muy considerablemente. Esto habla muy bien y constituye un reconocimiento al gran proceso histórico que vive el país.
El proceso de cambios revolucionarios de Venezuela está presente en el mapa internacional de la oligarquía económica y de la hegemonía político-imperialista, pero también lo está en la mente y en los corazones de los pueblos oprimidos de América Latina, del Caribe, de Suramérica y porque no decirlo del mundo entero.. Es la confrontación histórica inevitable entre los apetitos devastadores del neoliberalismo y la necesidad de nuestros pueblos de ser libres, desarrollarse y vivir con dignidad. Es una lucha histórica que libran con mucha conciencia todos los pueblos oprimidos del mundo. La consecuencia práctica de esta realidad para los compatriotas bolivarianos es que asumen la dimensión de militantes revolucionarios del mundo. Cumplir las tareas necesarias para el éxito de la revolución de nuestro país es trabajar solidariamente por el avance revolucionario internacional: La globalización política y social de las luchas populares.
Si para los centros de poder imperialista y sus aliados del continente, la Revolución Bolivariana resulta negativa, es porque conviene a los intereses nacionales de Venezuela y de los pueblos de América Latina. Este antagonismo inevitable en el contexto de nuestras luchas no deja duda de que los enemigos de la Revolución Bolivariana son los defensores del neoliberalismo que opera desde los espacios ideológicos contrarrevolucionarios transnacionales, usando como fachada para sus operaciones políticas encubiertas a partidos de la oposición, medios de comunicación, organizaciones no gubernamentales y empresas privadas que actúan por encargo en contra de los intereses de la Nación. Esa es la verdadera razón por la cual la oposición quería salir del Comandante Hugo Chávez , y ahora del presidente Maduro contando con el apoyo internacional, lo que les ha sido y les será difícil porque los sentimientos patrióticos del pueblo y el amor por la libertad no lo permitirán.
La oposición venezolana no pudiendo vencer con fuerzas propias en suelos patrios, carentes de toda autoestima y dignidad republicana, busca en ,los enemigos históricos de Venezuela protección para sus intereses particulares y padrinos políticos transnacionales para retomar el poder. Pero es el caso que ninguno de los organismos internacionales que les sirven de instrumento al imperialismo, tiene legitimidad para sancionar o intervenir a Venezuela por las siguientes razones que son fortalezas morales de la democracia: 1) Origen electoral del gobierno 2) Defensa del proyecto político dentro del marco constitucional y legal; 3) La violencia insistentemente es fomentada por la oposición; 4) En Venezuela no tienen cabida los niveles de terrorismo y narcotráfico que registran otros países; 5) En Venezuela funciona el Estado de Derecho con autonomía de los poderes públicos; 6) Las libertades públicas y el respeto a los derechos humanos son realidades innegables; 7) La fortaleza de la institucionalidad y gobernabilidad se han puesto a prueba sobreponiéndose al golpe de estado del 11 de abril de 2002 y el sabotaje petrolero de diciembre del mismo año, lo que ha permitido que el Estado venezolano honrre sus obligaciones contraídas con la banca acreedora internacional y cumplir con los convenios de suministro de materia prima a los EEUU. Y a otros países.
Algunos incautos han criticado la estrategia internacional de defensa de la revolución venezolana, llegando a la insensatez de afirmar que hacen más daño que bien esta lucha en el campo internacional. A los enemigos de los intereses de Venezuela, que son los mismos enemigos de la justicia internacional, hay que combatirlos en donde quiera que se encuentren. Como dice el camarada Eustoquio Contreras.
Se necesita estar fuera del país, para darse cuenta como en el exterior se respeta y se quiere al pueblo y Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela . Aunque no lo reconozcan los apátridas de la oposición.