Insistimos, los escenarios son de luchas y este pueblo venezolano está luchando férreamente contra el capitalismo salvaje. Un capitalismo que está en su fase senil, en plena decadencia y casi sepultado en sus propias contradicciones. Todos los indicadores macroeconómicos lo certifican a sí. Leamos.
Lo que dicen los organismos multilaterales y los propios gobernantes imperialistas. El mundo enfrenta una enorme crisis de desempleo que amenaza la posibilidad del crecimiento económico, según un reciente informe del Banco Mundial (BM). Para que la creciente población del planeta tenga trabajo, tienen que crearse globalmente 600 millones de puestos de trabajo antes del inicio del año 2030, reveló el informe del BM dado a conocer precisamente, en la reunión del grupo de los 20 (G20), en Australia.
"Poca duda hay de que se trata de una crisis global", alertó el director principal para el trabajo del BM, Nigel Twose, tras agregar: "Este informe deja claro que hay escasez de empleos, empleos de calidad".
Son indicadores que develan que el capitalismo ya exterminó los paradigmas que soportan el capitalismo salvaje para tener engatusado a los pueblos. "Parece que nos esperan tiempos bastante difíciles", comenta Twose, develando que: "También preocupa que vemos la creciente diferencia entre los salarios e ingresos en los países miembros del G20".
El informe del BM además sostiene que más de 100 millones de personas en los países del G20 son desempleados y 447 millones trabajan, pero viven con menos de 2 dólares al día. Son parámetros de miseria extrema Para encontrar una salida a la situación "no hay ninguna varita mágica", comentó Nigel Twose.
Están a la vista las contradicciones indisolubles del agónico sistema capitalista. A lo que agregamos, además, el deterioro ambiental y la carencias de recursos energéticos. Recordemos que lo que la naturaleza tardó en forma en 400 millones de años, los hidrocarburos, en apenas 200 años se están agotando.
Pero, lo cruel y criminal es que la derecha vende patria se escuda tras las instituciones financieras, las corporaciones transnacionales y el imperio, para agredir sin misericordia alguna a nuestro pueblo. Para estos desmanes criminales cuenta con sumas multimillonarias de dólares que está recibiendo. Lo cual incluye organizar escenarios golpistas y hasta el magnicidio del presidente obrero Nicolás Maduro.
Los teatros de operaciones de estos pitiyanqui para agredir irracionalmente al gobierno revolucionario que lideró e inspiró Chávez, son de los más diverso donde priva la mentira, el engaño, el saboteo, el boicot, la manipulación mediática y los asesinatos, entre otras vagabunderías. En el discurso evitan ahondar en cualquier punto y sólo favorecen las consignas y el chismorreo.
Son aliados incondicionales de EE.UU. un país que gasta casi lo mismo que el resto del mundo junto en fuerza militar, y está mucho más avanzado en la tecnología de la destrucción. Está solo también en la posesión de cientos de bases militares por todo el mundo. Y contempla en su agenda de dominación una política de militarización en América Latina.
Venezuela desde hace más de una década comenzó a liberarse de ese yugo, que pretende imponer la derecha criminal venezolana con el apoyo de los hombres y mujeres de esta Patria, y al igual que un conjunto de países que marcan distancia con el imperio, entre otros están, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Cuba, Argentina, Nicaragua, China, Rusia, Irán, Bielorrusia, Corea del Norte, Libia, Vietnam, China, es decir, Venezuela no está sola internacionalmente, tiene aliados que seguramente le están quitando el sueño al Pentágono y a sus socios imperialistas.
El legado de Chávez ofrece como se ha venido confrontando los intereses vitales estadounidenses, en lo económico y lo geopolítico. Venezuela, durante varios siglos transito durante todo un proceso histórico de agresión. La vergüenza, el insulto, el atropello, el maltrato y el desconocimiento de los más esenciales derechos humanos, tras la opresión, crímenes, avasallamiento y tantas otras marramuncias que existían, toleradas por las administraciones norteamericana, es decir, todas estas perversidades estaban a la orden del día; luego esta infamia que vivió su “grandiosidad” durante más de 40 años en la IV República, trajo como parto al comandante Chávez, un presidente Bolivariano que solo representó la dignidad, el arrojo y la solidez inyectándole pasión y amor a los pueblos revolucionarios frente al engreimiento del imperio gringo, y desde luego, erigió las primeras piedras sepulturera de la derecha fascista.
Hay que poner al desnudo que la calaña de los apátridas orquestan las añejas pretensiones de EE.UU. Venezuela está en el ojo del huracán. Aunque los yanquis están confrontando una quiebra de su hegemonía. Están desesperados, pues tienen un consumo diario promedio de 21 millones de barriles de petróleo diario, lo que significa un tercio de la producción mundial diaria. ¡Na´guara! Se les acabo el pan de piquito. Su `plan expansionista configurado desde 1823 con la denominada doctrina Monroe, actualizada en forma continua y sucesiva ya por más de dos siglos consecutivos, está mortecina. El sablazo chavista debe ser concluyente contra los vende patria.
¡¡¡Viviremos y venceremos!!!