La ética es una rama de la filosofía, se refiere a la teoría de la moral y está basada en el conjunto de principios y normas de comportamiento de las personas que regulan las relaciones de estas entre si y también con respecto de la sociedad, a una clase determinada, el Estado, la patria y la familia, etc. (A. F. Shiskhin, Teoría de la moral). En la doctrina bolivariana, la moral está indisolublemente unida a la política ya que es transformadora del hombre y de la sociedad como forma de conducta pública: “la mejor política es la honradez” escribía a Santander, el 17-08-1820).
Hoy la idea moral y la acción política se unen para forjar al ciudadano ético bolivariano, --el ciudadano de la República Bolivariana de Venezuela-- para la vida, para la lucha por la patria y para la muerte si fuese necesario. ¿Cómo se perfila el ciudadano o la ciudadana en el socialismo bolivariano?. Un ser abnegado y útil que busca el bien de la patria. Bolívar decía al Presidente de Kingston, Jamaica, 10-07-1815, “El que abandona todo por ser útil a su país, no pierde nada, y gana cuanto le consagra”. Esta praxis reinvidica la correspondencia entre acción y palabras grabadas en el juramento del Monte Sacro, en Roma, 15-08-1805, “…juro por mi honor, y juro por mi patria,…hasta que haya roto las cadenas que nos oprimen…”.
La axiología de este pensamiento reconoce, “el amor a la patria es primero”, Bolívar a Rodríguez Picón, 25 07-1813. Hoy en el siglo XXI, es corresponsabilidad de los ciudadanos, según la CRBV, artículo 130 y 322. Similarmente; en Proclama a los ciudadanos de Cundinamarca, 17-12-1814, a los “soldados que exponen su vida por defender la vida y la libertad de sus conciudadanos, merecen la gratitud general”. Sacrificio, honor, utilidad y gratitud, he allí los valores de los (as) ciudadanos (as) bolivarianos (as).
En vida; el ciudadano o la ciudadana bolivariano (a) es un constructor de Repúblicas libres y democráticas puesto que no admite la esclavitud. “El alma de un siervo rara vez alcanza a apreciar la sana libertad”, (Carta de Jamaica, 06-09-1815). Los bolivarianos por su aptitud frente a la “naturaleza, la justicia y la política piden la emancipación de los esclavos…”. En Venezuela, con el proceso de transformación de la justicia, la libertad, igualdad y lucha por la segunda independencia dejarán de existir las clases sociales: capitalistas y proletarios para que liberados del sistema capitalista e imperialista pueda crearse “de aquí en adelante (…) en Venezuela una clase de hombres, todos serán ciudadanos”. (A los habitantes de la Provincia de Caracas, 06-07-1816).
¡Unámonos y seremos invencibles¡ decía el Libertador a M. Cedeño, 10-01-1817. El o la ciudadano (a) bolivariano (a) en sus relaciones con los demás ha de actuar de modo que --escribía Bolívar a J. Felix Blanco, 22-09-1817-- “un buen ciudadano debe siempre pensar con respecto a si, lo que calcularía para con los demás…”. Aquí, la moral identifica al ciudadano a tener el mismo interés para si como para con los demás. Según Bolívar-- ha de reinar sobre el corazón de cada hombre hecho ciudadano nada mas que su conciencia, escribía a F. Iturbide, 19-09-1812; ni la tiranía, ni el vicio ni el engaño y ni siquiera las supersticiones y la ignorancia de todo género religioso o no reinarán sobre el ciudadano bolivariano, solo reinará la verdad, la razón y la justicia.
Bolívar escribía al Mariscal A. J. Sucre, 04-09-1824, “Usted sabe que yo no se mentir, y también sabe Usted que la elevación de mi alma no se degrada jamás al fingimiento”. ¿Como formaríamos tales seres libres, verdaderos, solidarios y ciudadanos consecuente para con la nueva república bolivariana?. Bolívar en el Discurso de Angostura, 15-02-1819, responde “…los códigos, los sistemas, los estatutos por sabios que sean, son obras muertas que poco influyen sobre las sociedades…”, explica que nada sirve las normas si ellas no son capaces de formar ciudadanos, esto es, hombres iluminados en su acción y respeto a la justicia social. “...hombres virtuosos, hombres patriotas, hombres ilustrados…”, estos, construyen las repúblicas y es obligación de este, “…inspirar (…) amor a la patria, a la libertad, a la virtud y al trabajo”. (Proyecto de Constitución, 15-02-1819).
La forma en que se alcanza tal virtuosidad es a través la educación como expresara Bolívar al decretar un colegio para los hijos de los mártires de la patria, 17-12-1819, “...el principio mas seguro de la felicidad general y la mas sólida base de la libertad de los pueblos”. El ciudadano bolivariano se orienta por “…el culto a la conciencia; la religión de las leyes…” para hacerlo probo, consciente de sus actos, que respete a la reina de las virtudes republicanas: la justicia a semejanza del libertador, capaz de renunciar a las riquezas. ¿Qué importa tener o no tener cosas superfluas? reflexionaba Bolívar a F. Iturbide, 08-10-1812 renunciado a su fortuna familiar --en aras y gloria de la patria--estimada en 1906 en Bs. 5.000.000.000 según Gil Fourtoul en Historia Constitucional de Venezuela.