"Todo lo que va a ocurrir bajo el sol tiene su hora"... Pues llegó la hora en esta revolución bolivariana de hacer la revolución económica, la cual enloquece al imperialismo y coloca a los capitalistas del mundo en severa crisis nerviosa porque han tenido que demostrar su rostro fascista tal cual es en esencia, sin importarles el ámbito, bien sea económico, político o social. Sin embargo, la economía venezolana está aún en el campo capitalista en su gran mayoría y los injertos que la revolución ha impulsado están allí con un impacto aún pequeño en comparación al tamaño de nuestra economía. El modelo rentista petrolero burgués absorbe la inmensa mayoría de los logros sociales de todo un pueblo llenando sus bolsillos, más aún cuando desde los centros de poder capitalista del mundo han dado la orden de desbancarnos a través de la economía. Una terrible campaña psicológica coadyuva para que se desate la locura consumista que llega a extremos de intolerancia y de la noche a la mañana surgen los especuladores como arroz para contribuir en la estrategia capitalista contra el pueblo todo de sacarle a como de lugar sus ahorros del bolsillo.
Son muchos los ciudadanos de a pie y de la clase media, fortalecida en esta revolución, que se obnubilaron con los llamados raspa cupos, esto sirvió para que unos burgueses se enriquecieran más. Luego la escasez de productos ha contribuido al desarrollo malsano de una economía especulativa que llega a la grosería, no obstante, para muchos es normal dejarse robar por un especulador que coloca un producto que cuesta 300 Bs en 3 mil; no solo que lo compra, entre otras cosas porque hay un enorme poder adquisitivo, sino que además le agradece que le roben quitándole la bicoca de 2700 Bs sin son ni ton. La mediática hace lo demás: campañas de desabastecimiento, temores inoculados y una paranoia colectiva cada vez que aparece un producto escaso. Mientras esto ocurre, el gobierno trata en lo posible de controlar el contrabando de extracción, el contrabando interno y toda modalidad nueva de delito económico. La burguesía por su parte pretende hacernos creer que todo se perdió, que es un problema del modelo socialista cuando en la realidad si no existieran los ensayos socialistas (Mercal, PDVAL, Bicentenarios, etc) a estas alturas estarían ganando la guerra económica, solo por estas iniciativas socialistas el pueblo ha sobrellevado esta terrible guerra económica.
El comando de la revolución encabezado por el presidente Maduro esta librando una gran batalla, pero la derrota definitiva de la economía burguesa es una obra colectiva de todo un pueblo, incluyendo a sectores de la burguesía que entran en el marco del plan de la patria. El tema de la distribución de productos, bien sean alimenticios u otros, requiere del esfuerzo no solo del estado. Si algo hemos comprobado es que a la hora de las chiquitas hasta el bodeguero "chavista" se metió a especular, pasó con los buhoneros también, lo que indica que son sectores sociales que no han madurado aún y son presa fácil de las estrategias burguesas para doblegarnos por el estómago, sin embargo, la oportunidad para impulsar un nuevo modelo económico socialista que abarque todos los ámbitos es extraordinaria, no se puede dejar pasar. Del paro petrolero surgió la recuperación para la patria de PDVSA, del golpe de estado surgió la depuración del FANB y de los voceros de la derecha en el movimiento revolucionario; los burgueses en su brutalidad y prepotencia han llevado la batalla a la economía y allí hay que vencer o morir, no hay términos medios y eso los hace más peligrosos porque entran en una etapa de desesperación que raya en la locura.
Ahora bien, la batalla no solo es de Maduro, Diosdado y la principal dirigencia de la revolución, es de todo aquel que detente algún poder en cualquier ámbito de la vida del país. Me sorprende la tranquilidad de algunos gobernadores y alcaldes, no debe ser de gratis, es entonces en donde la direción de la revolución debe tomar correctivos urgentes; allí está el método Chávez con el caso del estado Apure y el ex-gobernador Aguilarte; envió a Carrizales y se enderezó la cuestión. Creo llegado el momento de revisar muchas cosas, pero donde exista un alcalde chavista no debe existir ni siquiera un bodeguero especulador, mucho menos donde no solo existe el alcalde sino el gobernador también.
El poder popular aún no ha dado el salto, pero donde existe debe activarse con fuerza en la batalla contra los especuladores y los funcionarios corruptos que permiten la existencia de esa especulación. La batalla es palmo a palmo, no está fácil, hay mucha gente que cree llegada su oportunidad en el negocio especulativo y lo ejerce. Así como una revolución combate la traición, los traidores no salen de escena y siguen operando. Los grandes laboratorios del imperialismo, su estado mayor de guerra económica situado en el norte se creen vencedores, pero no se hagan ilusiones señores imperialistas, "Rondón no ha peleado", el pueblo no ha peleado, pero está despertando, no jueguen con nuestra paciencia porque los arrasados van a ser ustedes, no el gobierno revolucionarios que estará al frente de ese contragolpe mortal para la economía capitalista.
Esta guerra abre las puertas para un gran salto en la construcción de una economía socialista en el contexto del plan de la patria; la burguesía será derrotada, está siendo derrotada, a pesar de la confusión de muchos y de las críticas malintencionadas de otros que hacen esfuerzos por dividir y separar a la vanguardia revolucionaria del pueblo. Así ocurre, por eso las críticas cuando se denuncia a un pequeño comerciante que a varias zonas provee de productos escasos a precios exorbitantes, es lamentable pero se oye a personas que lanzan frases como: "Especulaba pero traía las cosas y sin hacer cola", es la falta de consciencia. Pero esto lo podemos considerar como parte del proceso, la falta de consciencia y ésta se exacerba por la campaña de rumores burguesa lanzada desde los poderosos medios de comunicación.
El gran salto en la economía no puede ser otra cosa sino el gran salto a la economía socialista, expulsando todo el bandidaje incubado en el sistema capitalista que prevalece en la economía venezolana, cómo lograrlo, con la justicia y la aplicación de la ley, negocio o local que se preste para el contrabando y la especulación... "ven a mí que tengo flor" como lo decía el comandante y de esta forma la burguesía corre o se encarama pero lo que no podemos permitir es que nos coloquen contra la espada y la pared muchas veces por omisión de cuadros medios que desde gobernaciones y alcaldías no contribuyen mucho en esta batalla del pueblo... Ojo pelao.