En una sociedad la lucha de clases se escenifica entre las clases y también dentro de éstas. Y podríamos decir que la lucha más importante ocurre al interior de la clase emergente, es allí que se incuba, se decide la restauración. Lo anterior adquiere carácter dramático en el caso de la Revolución Socialista, es la lucha de clases dentro de la clase obrera la que decidirá el rumbo.
La Revolución Chavista ha llegado a una encrucijada donde se decide el rumbo socialista o la captura definitiva de la Revolución por la socialdemocracia, por la restauración. En esta situación, la actitud de la clase obrera será decisiva. Estudiemos qué ocurre dentro de la clase obrera.
Para entender la lucha de clases dentro de la clase obrera en este periodo revolucionario es necesario recorrer un poco la historia. Veamos.
En el sabotaje petrolero la clase obrera tomó conciencia de su poder, participó como nunca en su historia en la disputa del poder. Allí, sin dudas, los obreros derrotaron a la burguesía en jornadas heroicas, fueron el núcleo alrededor del cual giraron el pueblo y los militares. A partir de esas jornadas se abrió un interrogante a la clase obrera y a la burguesía, y a su clase auxiliar, la pequeña burguesía. ¿Qué hacer con esa nueva fuerza que irrumpía en el escenario político? Se desató una feroz lucha de clases dentro de la clase obrera que había abandonado el economicismo para adentrarse en terrenos de verdadera política, de disputa del poder.
El objetivo de la burguesía y de la pequeña burguesía fue desactivar la posibilidad de que la clase obrera se convirtiera en motor fundamental de la construcción del Socialismo. Optaron por el extravío ideológico. Así la batalla se dio entre el "control obrero" opuesto al control de la sociedad por la clase obrera, todo en el territorio de un economicismo que dura siglos.
El "control obrero" propone la administración de la fábrica, de la unidad económica por los obreros que en ella trabajan, que funcionará como una unidad independiente y sólo dará al gobierno dividendos. De esta manera, se generará en esa unidad una conciencia egoísta, y los intereses de esta unidad, necesariamente, chocarán con los intereses de la sociedad toda. Es una solución a primera vista atractiva, da una sensación de poder obrero, por eso es tan eficaz en impedir que la clase obrera tome conciencia de su papel histórico, la construcción del Socialismo.
El control de la clase obrera se refiere al control de la sociedad por los trabajadores, es otra manera de decir Socialismo. Se propone una planificación central; las fábricas, las unidades funcionarán con el sistema presupuestario de financiamiento, de esta manera serán propiedad social y verdaderamente integradas a la economía de la sociedad, sus intereses serán los intereses de la sociedad. Será terreno fértil para la elevación de la conciencia del deber social, de la pertenencia a la sociedad, es el camino para el Estado Comunal: toda la sociedad, la nación una comuna. Esta propuesta, que venía adquiriendo fuerza a pesar de la resistencia de los factores reformistas internos, cuando es asesinado Chávez sufre un grave golpe, es desechada. Siendo así, el "control obrero" también se ve disminuido, ya no es necesario como extravío, como válvula de seguridad al Control de la Clase Obrera, el peligro de Socialismo había pasado... la clase obrera regresa al economicismo, que es lo que corresponde con la socialdemocracia que rápidamente se va instaurando.
En este primero de mayo del 2015 hacemos votos para que la clase obrera, sus dirigentes más avanzados, no dejen morir al Socialismo, al legado de Chávez, a la Esperanza en un mundo diferente del capitalismo.