A la luz de los acontecimientos, que actualmente se registra día a día en Venezuela, el proceso político y el avance hacia el socialismo del siglo 21, tendrá que seguir sujeto a la planificación del estudio, de una ideología originaria, en función de determinar la raíz ideológica acompaña estos cambios en el desarrollo para fortalecer la diatriba política que es nuestro acontecer diario.
¿Hay un plan que nos oriente hacia el estudio de esa ideología originaria, que nos permita enriquecer el carácter social y político que nos debe acompañar?
No lo creo, posiblemente encontraremos algunos compañeros muy dispuesto al estudio de las diversidades ideológicas del siglo pasado orientando ese conocimiento a la extracción de la matriz que nos permitiría coadyuvar con la ideologización programática que domine nuestra Revolución, con miras a enriquecer el conocimiento empírico en el cual esta inmerso en el pueblo.
Creo `profundamente en el nuevo rumbo que nuestro presidente esta impulsando a nuestro proceso, como lo es el comenzar con la autonomía del poder popular, con miras al desarrollo comunal que nos oriente de manera irreverente a un proceso de autonomía económica y de humanización de nuestro pueblo, es el ensayo mas extraordinario en el plano político que nos envuelve.
¿Como entrelazar, un proceso ideológico hacia la humanización y autonomía que nos debe regir, en el plano socio-político-económico, sin estar teóricamente preparados?
Podríamos trabajar empíricamente, el pueblo es sabio, pero ese saber es condicionado y limitado a estructuras tecnológicamente encaminadas hacia la eficiencia y logros a corto plazo, es humana la tecnología, se encamina entonces al desarrollo del ser social?
Serian muchas las preguntas a las que seguramente no encontraríamos respuesta, las deficiencias político-ideológicas que nos domina no ayuda a enfrentar las vicisitudes que vivimos , y nos orienta al socialismo del siglo 21 en minusvalía, carecemos de las herramientas ideologías, que nos permitan fortaleces las bases estructurales de la revolución, no contamos con planes reales que nos guíen, que nos preparen, para enfrentar los retos, que se nos avecina, ni las agresiones mediáticas, que nos inundan a diario, la debilidad ideológica, puede ser piedra angular del enemigo para el fortalecimiento de su lucha por descontarnos el sueño que hoy vemos plasmado en nuestra constitución.
Debemos diseccionarnos hacia objetivos claros que nos den repuesta y una autonomía revolucionaria en el manejo de nuestras cuentas para mejorar la calidad de vida, que se nos garantiza por derecho en la constitución, presidente Chávez la autonomía es vital y necesaria para desarrollar el cambio hacia la humanización de nuestra vida, y orientarnos en el montaje estructural de la matriz ideológica que nos conduzca victoriosos al socialismo del siglo 21.