Cuando se utilizan las encuestas preelectorales, es porque se pretende medir la intención de voto de la opinión pública, para proyectar con bastante precisión cómo se comportará la mayoría. Sin embargo, alrededor de ellas, en los últimos tiempos, ha proliferado lo antiético, que no se condena, pero si, se celebra.
Particularmente, los políticos, se han dado cuenta que las encuestas pueden ser utilizadas para afectar y revertir la situación que se mida, sobre todo si le es conveniente. Es decir, pueden intentar desviar el rumbo de los hechos, informando como verdadero, lo que es flagrantemente falso. Pero, esta situación, sin duda, requiere de la complicidad y para eso están las compañías encuestadoras que se prestan a graves manipulaciones metodológicas que las conduce a mentir.
En base a este comentario, creo que lo antiético se impone en las encuestadoras que contrata la oposición. Y, entonces, las encuestas que son manipuladas se transmiten a sus seguidores y les hacen crear falsas expectativas, hasta el extremo de convertirlos en una especie de “Encuestofagos” que se alimentan de encuestas, desde que se supo por ejemplo, la fecha de la celebración de las elecciones legislativas. Es decir, los lideres, han preferido abandonar el contacto con sus seguidores, y hacer de las encuestas su modo de vida, sabiendo que con ellas, creando falsas esperanzas, los pueden mantener atados a su liderazgo. En efecto, no puede negarse que todas ellas, muy buenas, muestran grandes ventajas, que a lo mejor le han hecho soñar con otro gobierno y no este, que de paso, ya ni se acordarán desde cuando lo tienen.
De hecho, la encuesta Hercon, dice que la oposición ganará las parlamentarias con el 65,1% y eso sin duda, debe alegrar a quien la lea, sobre todo sabiendo que es una de las ultimas en aparecer; igualmente, de reciente data está el estudio Venebarómetro correspondiente al mes de noviembre, en donde se da una ventaja de 15 puntos a los candidatos de oposición sobre los chavistas. Cualquiera brincaría en una pata, si las encuestas, hoy en duda, estuvieran provistas de ética. Por eso es que, pienso que no se debe ser tan incauto a la hora de tomar una decisión muy importante al votar por cualquier candidato.
Claro, como siempre se vive dudando, una encuesta puede ser efectiva, al contrastarla y compararla con actos masivos de calle, los cuales no formaron parte de la estrategia opositora, por lo que es difícil hacer una constatación válida. De allí, que las encuestas son las únicas cartas de presentación de la oposición, de las cuales solo se oye decir: “Todas las encuestas indican el triunfo de la oposición en las parlamentarias” Entonces, los seguidores empiezan a repetir como un loro, lo que no les consta, hasta que convierten en verdad una mentira, porque creo que la oposición usa el 1x 10, pero para regar mentiras.
Sin embargo, de aquí al 6D, pueden suceder muchas cosas, desde saltos de talanquera hasta la decisión de votar por el chavismo en el momento de estar frente al tarjetón, porque yo no creo que por culpa de encuestadores antiéticos, el venezolano siga creyendo y votando por gente que le miente.