Reflexiones para el debate

Después del 6D: una nueva oportunidad para profundizar la Revolución Bolivariana

"Cada fracaso le enseña al hombre algo que necesitaba aprender". Charles Dickens (1812-1870)

El imperialismo estadounidense y sus lacayos de la oligarquía venezolana nos han mostrado nuevamente la efectividad de su mejor arma empleada contra todos los gobiernos soberanos nacionalistas y revolucionarios. La caída de los precios del petróleo (de 100 a 30 dólares por barril) y el sabotaje a la economía venezolana orquestado por el imperialismo estadounidense y la oligarquía importadora y comercial venezolana -quienes desde siempre han buscado apoderarse de la renta petrolera-, provocaron la escasez y largas colas, intensificaron el contrabando de extracción hacia Colombia, la especulación y la inflación inducida que la contrarrevolución supo achacar como "responsabilidad del gobierno Bolivariano". Es la misma estrategia de guerra económica empleada por Estados Unidos y la burguesía chilena contra el gobierno de Salvador Allende entre los años 1970 y 1973 para "hacer crujir la economía" *.

Nadie dijo que hacer la revolución socialista era tarea fácil, menos en un país cuyas fuerzas productivas se encuentran subdesarrolladas o en estado embrionario.

La Revolución Bolivariana heredó un Estado corrupto, desfalcado y endeudado, y una economía pobre, completamente dependiente de la renta petrolera, con atraso tecnológico abismal, monoproductora (petróleo) y extremadamente dependiente del capital extranjero. Venezuela forma parte de lo que algunos economistas han denominado: "típica economía de la periferia capitalista" o neo-colonial, sometida a la hegemonía de Estados Unidos.

Construir el socialismo bajo condiciones de atraso y de dependencia extrema al extranjero podría parecer una locura de seres racionales y utópicos a la vez, dispuestos a "tomar el cielo por asalto" para emprender una epopeya parecida a la del Libertador, Simón Bolívar, quien cruzó los Andes con un ejército pequeño y poco pertrechado, en comparación con las tropas españolas, pero con la moral suficientemente alta y la clara convicción que los llevó a liberar cinco países.

Hoy, la libertad de todos los pueblos pasa por romper las cadenas de la dominación neocolonial, desarrollando todas las fuerzas productivas necesarias bajo el modo de producción socialista. No cabe de otra.

Hacer la revolución socialista es, por lo tanto, tarea compleja. Ella demanda mucha paciencia, inteligencia (teoría y práctica revolucionaria) y astucia para enfrentar y derrotar en el plano de las ideas y la batallas políticas a la derecha venezolana. A su vez, demanda la formación política y técnica de la clase obrera de forma continua.

La batalla pérdida por la Revolución Bolivariana el 6D, no es el fin de la guerra. La contrarrevolución lo sabe, aunque en su discurso pretenda decir lo contrario cuando augura el "fin de la Revolución". ¡Que nadie se llame a engaño!

El imperialismo estadounidense sabe que la Revolución Bolivariana no fue derrotada el 6D, porque para vencer al proyecto político Bolivariano y Socialista tendrá primero que vencerlo en las ideas. Y en ese campo han sido ya derrotados.

A los revolucionarios nos asisten suficientes e irrebatibles razones para transformar la sociedad venezolana, también, verdades que resultan difíciles de ocultar por la derecha, e ideas justas. Son nuestras y poderosas las banderas de justicia y de igualdad social; que los términos: revolución, cambio, paz, igualdad, justicia, fraternidad y socialismo nos pertenecen, aunque la derecha pretenda aprovecharse de éstos para manipular; que mientras existan las desigualdades sociales y perviva el régimen capitalista de opresión, de explotación del hombre por el hombre, éstas seguirán despertando la rebeldía de los pueblos y alentando revoluciones. Ningún régimen burgués, por más apoyo imperial y represión que ejerza, puede permanecer estable.

La derecha venezolana, esta vez controlando la Asamblea Nacional (AN) sabe que su discurso es vacío, cargado de vanalidad y demagogia, que sus mentiras tienen las patas cortas. Y en el momento en que decidan hacer uso del poder conquistado por medio del engaño para desaparecer las Leyes revolucionarias y aplicar las pretendidas políticas económicas neoliberales que tanto han asomado, su capital político y base social se esfumarán en ese mismo instante. El pueblo venezolano explotará de rabia, así como lo hizo antes (27 de febrero de 1989), se rebelarán contra la traición y el robo de sus reivindicaciones sociales alcanzadas en 16 años de revolución. La burguesía conocerá nuevamente la bravura del pueblo de Simón Bolívar que supo despertar el Comandante Hugo Chávez para acompañarlo en vida en su titánica e histórica tarea.

¿Quién venció el 6D?

La derecha parásita venezolana no venció a la Revolución Bolivariana el 6D. Cuando un número importante de personas votan por la opción contraria sin conocer a los candidatos y su verdadero programa político, es clara señal de que los votantes pretendían castigar a uno de los bandos.

El 6D venció el descontento del pueblo contra la economía importadora rentista y dependiente, venció el descontento contra la incapacidad del Estado para hacer frente a quienes especulaban y escondían los productos de primera necesidad, también venció el descontento del pueblo contra los errores del gobierno para transformar al Estado enfrentando la corrupción de ese aparato burgués. En otras palabras, venció el descontento del pueblo contra el capitalismo salvaje especulativo desatado por la oligarquía importadora y comercial venezolana.

El enfado del pueblo fue aprovechado por la derecha para responsabilizar al gobierno. Una vez más, el capitalismo rentista y el Estado burocratizado, ineficiente y corrupto, en otras palabras, el Estado burgués, se descubren como los principales problemas a enfrentar por la Revolución Bolivariana. Tampoco en Venezuela triunfó la prostituida "democracia" y la trampa de la "alternancia", sino la estafa y el robo, en otras palabras, triunfó su disfraz: "la democracia burguesa". No triunfaron los candidatos de la burguesía y su propuesta neoliberal, sino su estrategia: la guerra económica y el engaño.

Fortalezas de la Revolución Bolivariana

La derecha venezolana menosprecia las enormes fortalezas del gobierno revolucionario. Son cerca de 6 millones de conciencia claras, de votos duros chavistas que han soportado toda la campaña de desinformación, guerra mediática y guerra económica, largas colas, especulación desatada, tentativas de división, ineficiencia y corrupción del Estado y la prepotencia y malversación de quienes, desde dentro con posiciones de poder, desmoralizan y desmovilizan al pueblo para perjudicar a la Revolución Bolivariana.

Hoy se abre un espacio para la reflexión crítica y constructiva, para la autocrítica revolucionaria y sincera. Para decirnos todo y hablar de todo, sin tapujos, pero con respeto y conciencia de nuestro deber revolucionario y del contexto político. Nuestra mayor fortaleza se encuentra representada en las ideas y el legado del Comandante eterno Hugo Chávez.

La derecha venezolana, con mayoría en la AN, y por ende, controlando ese poder, se muestra embriagada y ansiosa de venganza. Por su naturales infulas de superioridad y su razón criminal, pero motivado mas por su triunfo electoral, ha jurado la pronta "muerte" de la Revolución Bolivariana para iniciar la vuelta al pasado de entrega y sumisión al imperialismo. Es por ello que la respuesta revolucionaria para la actual coyuntura debe ser la más audaz, consensuada y la más eficiente posible.

No basta con responsabilizar a la burguesía de la guerra económica, sin dar una respuesta eficiente y mortal contra la misma. No es suficiente con cubrir la deuda social del país por medio de las misiones sociales: Misión Vivienda, Mi Casa Bien Equipada, Barrio Nuevo Tricolor, subsidio a los alimentos, pensiones, o entregando celulares, tabletas electrónicas, etc., sin atender a la organización, la politización y movilización del pueblo.

El pueblo debe entender que esos beneficios son logros de la revolución, y que sólo podrá conquistar nuevos beneficios en socialismo.

¿Cuál es el margen de acción del gobierno revolucionario?

Durante y después de la campaña electoral, días previos y en los días posteriores al 6D, varios voceros de la derecha venezolana asomaron la posibilidad de iniciar un proceso de investigaciones e "imputaciones" que les permitan finalmente destituir al presidente de la República, Nicolás Maduro, repitiendo en Venezuela la experiencia de la derecha hondureña contra Manuel Zelaya (2009) y paraguaya contra Fernando Lugo (2012). Para desgracia de la derecha, y suerte del pueblo de Venezuela, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV) aprobada en 1999, blinda al jefe de Estado de esta posibilidad y establece un equilibrio de poderes para evitar estos casos.

Un proceso semejante necesitaría que la AN cuente con la complicidad del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y del Contralor General de la República, que es imposible obtener. Para que la AN pueda destituir al Presidente de la República, antes tendría que controlar al TSJ, para ello requerirán sustituir a todos los magistrados, pero la CRBV establece que dichos cambios deberían contar con la aprobación del Poder Ciudadano. Es aquí donde reside la mayor traba, puesto que la derecha en la AN tampoco controla al Poder Ciudadano, y para sustituirlo por uno complaciente a sus propósitos tendrían también que contar con la aprobación del TSJ, según lo establece la misma CRBV. Es lo que se conoce como el equilibrio de poderes. El juego está cerrado.

Algunos voceros de la derecha en la AN han dicho que en 2016 convocarán un referendo revocatorio contra el Presidente de la República y propondrán la destitución del vicepresidente y los ministros mediante votos de censura, al tiempo que intentarán derogar la Ley habilitante y todas las leyes que han traído beneficios sociales (Ley de Precios Justos y la Ley del Trabajo). También han expresado que promoverán una Ley de Amnistía para liberar a los políticos presos por diferentes delitos. Sin embargo, el artículo 29 de la CRBV, expresa claramente que la Amnistía no procede cuando existe violación a los DD.HH. Ésta última se convertirá en el primer choque entre los poderes Legislativo y el Ejecutivo.

De la misma forma, voceros de la derecha han manifestado que romperán los contratos y acuerdos internacionales con Cuba, y revisarán los acuerdos con China y Rusia. Tampoco aprobarán más créditos adicionales y trabajarán por la restitución de la Nómina Mayor de PDVSA, que en 2002 y 2003 intentó destruir a la principal industria del país para derrocar al gobierno del Presidente Hugo Chavez y recomenzar el proceso de privatización de PDVSA junto al resto de las empresas estratégicas (industrias básicas), que fueron nacionalizadas o detenido su proyecto de privatización durante los primeros años de su gobierno. Sin embargo, la CRBV le otorga poderes al Presidente Nicolás Maduro para vetar todas y cada una de las medidas que ejecutará la derecha en detrimento del pueblo venezolano, la seguridad y estabilidad del país.

La oligarquía sabe que no lo tiene tan fácil, y que si actúan con la misma estupidez e irracionalidad que han manifestado en todos estos años, podrían estrellarse contra la propia CRBV y perder su nueva conquista. Si el poder legislativo se dedica a entorpecer el desarrollo de los mandatos constitucionales en su empeño por satisfacer los intereses económicos de sus amos capitalistas, derogando las leyes de protección social y extra-limitándose en su mandato claramente expreso en la CRBV, el poder ejecutivo tiene la potestad de disolver la AN y llamar a unas nuevas elecciones legislativas, tal y como lo establece el artículo 236 de la Carta Magna.

Por último, un recurso desesperado de la AN podría resultar el artículo 87 de la CRBV, numeral 11, que le entrega la potestad de legislar para autorizar la intervención de una misión militar extranjera en Venezuela, pero el mismo artículo manifiesta que esta debe ser solicitada por el Presidente de la República y vetada por él mismo.

Pero no debemos llamarnos a engaños. La oligarquía venezolana nunca ha respetado la CRBV, y mucho menos lo harán ahora en la AN. Intentarán, con apoyo mediático y diplomático de Estados Unidos, interpretar y manipular las Leyes de acuerdo a sus propósitos políticos para provocar la confrontación nacional y acentuar el desgaste del gobierno. No dejarán pasar esta nueva oportunidad. El gobierno debe estar preparado para escenarios de duras confrontaciones nacionales e internacionales.

¿Dónde centrar el debate?

En los días posteriores al 6D, el pueblo chavista se movilizó de forma espontánea convocando varias Asambleas Populares en diversos lugares públicos, Plaza Bolívar (Esquina Caliente), en sitios de trabajo (instituciones públicas) y en Miraflores. Durante el congreso extraordinario de PSUV, celebrado el pasado 10 y 11 de diciembre, el Presidente Nicolás Maduro convocó a realizar el próximo miércoles 16 un "Congreso Económico de Pensamiento Socialista", que estará bajo la responsabilidad de los compañeros Tony Boza, Jesús Farías y Luis Salas. Dicho congreso tendrá el objetivo de retomar los planes del Congreso del PSUV celebrado en 2014, para llevar a la práctica sus decisiones e impulsar definitivamente el modelo productivo nacional con enfoque socialista.

El debate debe estar centrado en cinco frentes fundamentales:

1.- La recuperación económica. Será tarea del congreso económico conducir un debate urgente sobre los asuntos que conciernen a enfrentar con éxito la guerra económica y señalar las vías que nos permitan romper con el sistema rentista petrolero dependiente impuesto al país desde hace un siglo. El objetivo es definir las vías (aliados), rubros estratégicos y planes que permitan desatar las fuerzas productivas necesarias para sentar las bases de una economía productiva socialista, soberana y autosustentada, de acuerdo con el Plan de la Patria 2013-2019. Para ello se requiere continuar los planes existentes y promover nuevas áreas de desarrollo, también perfeccionar la técnica gerencial para hacer más eficientes las industrias básicas y demás industrias, en razón de satisfacer las necesidades esenciales del país, apuntando a generar mayor valor agregado. Desarrollar la producción agrícola para procurar la autosuficiencia en rubros alimenticios estratégicos de alto consumo nacional. Fijar metas de producción de alimentos, y de ser posible, con miras a la exportación. Destinar la renta petrolera para la industrialización y producción de bienes básicos de consumo. Organizar y apoyar con más fuerza a los pequeños emprendedores, cooperativas y demás formas asociativas que presentan proyectos productivos.

En entrevista realizada por el diario Correo del Orinoco al intelectual, Luis Britto García, el experto hace énfasis en "aplicar estrictas medidas de control sobre la banca y nacionalizar algunos de sus establecimientos cuando sea indispensable. Reformar el sistema tributario para pechar los altos ingresos, y disminuir o eliminar el IVA, que castiga al consumidor pobre y que casi no es entregado al Fisco por los comerciantes que dicen retenerlo. Disminuir la proporción del PIB que va a los empresarios, e incrementar la que remunera a los trabajadores. Denunciar sin excepción todos los tratados que someten nuestros contratos de interés público o nuestras decisiones soberanas a la decisión de Tribunales, Cortes o Juntas arbitrales extranjeras. Sancionar drásticamente los delitos contra la cosa pública y contra los intereses generales y los bienes de la Nación" (Britto, 2015)

2.- El Partido. El Partido debe trascender de ser una maquinaria electoral para convertirse en un verdadero Partido de la Revolución que se apropie de la teoría revolucionaria y del legado del Comandante Eterno Hugo Chávez. Un partido que se fusione con el pueblo, los movimientos sociales organizados y los intelectuales. Un partido con poder y vida propia, con una estructura independiente del Estado y con pocas responsabilidades, o preferiblemente sin ataduras a la administración pública.

3.- El Estado. Es evidente que los esfuerzos realizados por el gobierno para contrarrestar la estrategia vencedora de la derecha no fueron suficientes. La experiencia de los hermanos sirios que desde hace 5 años enfrentan una terrible guerra mercenaria financiada y dirigida por el imperialismo estadounidense nos sirve de ejemplo. En ese país árabe no faltan los alimentos. ¿Por qué? La respuesta se encuentra en la eficiencia de su Estado.

La primera acción rectificadora y moralizante la hizo el propio Presidente Maduro cuando reconoció públicamente los errores de su gobierno para enfrentar la guerra económica, la ineficiencia y corrupción dentro del Estado, por lo que solicitó a todo su gabinete ministerial poner los cargos a la orden, tal y como lo exigió el pueblo chavista en la Asamblea Popular celebrada en la afueras y dentro del palacio de Miraflores.

Se impone la necesidad de combatir la corrupción, el nepotismo, el amiguismo y reducir los privilegios de los burócratas del Estado. Los Consejos de Trabajadores deben activarse en todas las instituciones públicas, así como la formación técnica e ideológica de todos los funcionarios.

El compañero Britto también propuso la creación de escuelas de formación ideológica, ética y técnica de todos los cuadros que ocupen puestos gerenciales en el Estado. Britto manifestó que éstas deberían estar destinadas "tanto para las responsabilidades de la dirección partidista como para las de la conducción de entes públicos. Inquieta presenciar cómo se le encomiendan tareas y poderes a seres sin la menor formación ni moral. Al poco tiempo fracasan o traicionan, para cubrir un desfalco o porque el Imperio les paga mejor". Asimismo, Britto propuso "habilitar mecanismos eficaces para la denuncia, que sepan discriminar entre situaciones verídicas o infundios interesados para descalificar personas o instituciones. Y reinstaurar el control previo del gasto público, lograr mediante las facilidades informáticas que dicho control sea integral y no selectivo o al azar, y extender el control externo a entes descentralizados y autónomos, fundaciones, empresas del Estado y otra infinidad de entes en los cuales el control se diluye hasta hacerse inexistente" (Britto, 2015)

4.- renovación del liderazgo político. La revolución enfrenta tiempos difíciles, una batalla de múltiples frentes, y así como suele suceder en el ámbito militar, tras una derrota, los responsables son rápidamente sustituidos para no desmoralizar a la tropa que se alista para futuras batallas. Esta tarea debe ocurrir no sólo en la dirección del Estado (Ministros, Directorio y demás instituciones), sino también en la dirección política de la revolución: PSUV.

5.- Poder constituyente. El PSUV y el GPP debe dedicarse a la movilización permanente y formación de conciencia en las bases del pueblo, amparado en los artículos 4 y 5 de la CRBV, para que ejerzan legítima oposición a la derecha en la AN creando Asambleas Populares en todo el territorio nacional.

Fuentes:

*Palabras del entonces presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, en referencia a la estrategia empleada con la economía chilena entre 1970 y 1973.

Entrevista a Luis Britto Garcia, Correo del Orinoco, 2015.



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Basem Tajeldine

Marxista. Investigador de temas geopolíticos internacionales en el Centro de Saberes Africanos. Moderador del programa VOCES CONTRA EL IMPERIO, RadiodelSur y RNV.

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