PREMISAS:
1.- Desde las primarias aquellas en que se incendiaron los cuadernos de la MUD, sabemos que su voto duro ronda apenas los 2 millones. El chavismo sigue demostrando que su voto duro está siempre por encima de los 4 millones. Es decir: hay 2 millones y pico de votantes que son como las velas de un velero: para donde el viento sople, ellos van por automatismo.
2.- Por lo menos nos quedan varios reductos/bastiones del chavismo fiel en el país: Apure, Cojedes, Delta Amacuro, Guárico, y Portuguesa y las vastas regiones del Tuy y Barlovento en Miranda. Ahí más o menos vamos con Sucre, Trujillo y Yaracuy. De resto, el Distrito Capital, Amazonas, Anzoátegui, Aragua, Barinas, Bolívar, Carabobo, Falcón, Lara, Monagas, Nueva Esparta, Táchira, Vargas, Zulia y todo el norte de Miranda, más el caso atroz de Mérida, son ahora emporios de la oposición. Pero partamos de que no todo está perdido.
3.- Las diputaciones indígenas también las domina la Derecha… A todas luces, el Ministerio para los pueblos indígenas como que no convence a sus principales beneficiarios.
EVIDENCIAS:
4.- Este revés electoral es producto del puro avance sin profundización. Década y media dando beneficios socioeconómicos al pueblo antes que formación. Y no me refiero a la alfabetización, las misiones educativas, ampliación de las universidades, ni garantías de educación gratuita y además con beneficios extras o adicionales como las famosas tablets. Me refiero al eterno problema de ver la política cultural como agencia de festejos, como adorno panfletario para actos meramente político-partidistas, como acto de complacer “tiernamente” a las masas aplaudidoras. Para nadie es un secreto que la formación política, consciente, filosófica, sensible-social y sensible-estética siempre ha sido soslayada o puesta en segundo lugar de importancia, porque se supone que ese es el “materialismo” de nosotros, ¡oh grandes marxistas!: primero la materia y después las ideas. Si con este resultado electoral no nos damos cuenta de una vez por todas que con espectáculo, escolaridad y deporte salvamos al muchacho de las drogas pero no de los antivalores burgueses y capitalistas, no sé cuándo nos daremos cuenta.
5.- Pero es urgente también una formación no panfletaria. No se puede ser consignero. Hay que hacer énfasis en la formación sensible, cambiar los valores de la sociedad actual. Aún la competencia sigue siendo más importante que la solidaridad, aún la ventaja siegue siendo más importante que la igualdad, aún el amor individual sigue siendo más importante que el amor a la sociedad. Este revés electoral es producto de valores burgueses en mentes desclasadas, gente que cree que una tablet, un carro o un celular son derechos, son “su gota de petróleo” y su “Misión Agarre”, no saben que son lujos que sólo nos podemos dar en Revolución Socialista, y que con un eventual gobierno de Derecha jamás obtendrán esos objetos/mercancía. Pero también es producto de mucha ideología o “comedia de las equivocaciones”, como decía Ludovico Silva, y poca consciencia verdaderamente revolucionaria, vale decir, mucha gente con camisa roja que a lo mejor hasta vota sinceramente por el GPP, pero tiene muchas actitudes de burgués, a veces tan evidentes que fastidia el sólo hecho de verlos hablando, y de este tema todos tenemos muchas anécdotas. Pero lo más cumbre es que cada vez que un “escuálido” (por que nos gustaba insultarlos a cuenta de que eran poquitos, ahora que son más que nosotros ¿qué les vamos a decir, “inflados”?) se ponía a opinar en contra del gobierno y nosotros en vez de atraerlo hacia nosotros, “seducirlo”, sensibilizarlo, tratar de deconstruir su discurso sin destruirlo, lo que hicimos fue convertirnos en los sectarios más eficaces en materia de espanto de opositores, convertíamos lo que podía haber sido una conversación constructiva en un ring de boxeo. A veces ellos también fueron responsables de que una conversación no llegara a nada, pero admitamos, sinceramente, que todos nosotros hemos caído en esos grados de intolerancia alguna vez. El que esté libre de contradicciones que lance el primer axioma.
ESCENARIO:
6.- Ahora bien: ¿Qué esperan esos votantes que pusieron la Asamblea Nacional en manos del Fondo Monetario Internacional? Ellos esperan que se acaben las colas ya, rapidito, y sobre todo que haya cada vez menos inseguridad. Lamentablemente ese es un Ragnarok, una caja de Pandora, cuyos monstruos al ser liberados son incontrolables y sólo traen destrucción y pestes al mundo. Los encorbatados ladrones de cuello blanco que ahora dominan la Asamblea Nacional con los dos tercios necesarios para hacer prácticamente lo que les dé la gana con el país no van a controlar al bachaquero que ya se acostumbró a ese “modus vivendi y operandi”, a ese malandro atracador o asesino que ya una sociedad capitalista que nunca pudimos desmontar de verdad lo ha engendrado en el seno de sus desigualdades sociales y conductas aprendidas. Cuando Fedecámaras autorice a sus súbditos empresarios altos, medianos y bajos a volver a llenar los anaqueles, el bachaquero volverá a llevarse todo lo que pueda, y las colas seguirán. Cuando las desigualdades sociales vuelvan a encumbrarse y las conductas aprendidas del “choro” necesiten ser saciadas como la enfermedad que son, los atracos, secuestros y asesinatos continuarán. Allí comenzará la nueva Asamblea a decir “es que 16 años de desastre chavista no se acomodan en un año o dos”, pero lo cierto es que como su promesa de campaña fue esa, que solucionarían todo rápidamente, el voto blando volverá a virarse hacia este lado… y allí es donde debemos esperar a esas personas alguna vez confundidas, alienadas, y hacerles evidente, lógica y necesaria para ellos la lucha revolucionaria.
7.- Lo que habrá será liberación de precios, liberación del cambio de moneda, desregularización laboral, congelamiento de sueldos y pensiones, estancamiento del poder ejecutivo, saboteo a las misiones, ahogamiento de ministerios como el de Comunas y Movimientos Sociales, para cortarle la respiración a los consejos comunales, salas de batalla y comunas; Finanzas, Planificación, y otros relacionados con el manejo de los dineros del Estado, serán tomados por ellos. El de Comunicación será colonizado. Educación, Cultura, Turismo, Deporte, serán ahogados al negarles presupuestos…
8.- De todo esto se deduce que ese famoso clima de ingobernabilidad ahora sí que va a gestarse, sobre todo porque los dueños de la Oposición no sabrán administrar su triunfo. Ya comenzaron a darse los primeros avisos de desacuerdo. Recordemos que para un chabacano de la política como Ramos Allup, los Chacao Boys de Julio Borges para abajo son unos “lechuguinos”, es decir, unos sifrinos. Son sus palabras textuales y lo peor es que tiene razón. En fin, ellos en sus ansias locas de poder ya no necesitarán de la MUD, volverán a fragmentarse en sus partidos habituales: la firma empresarial de dudosa procedencia que es Primero Justicia, la franquicia de abolengo de burgueses que es Copei, el aquelarre de entreguistas que es Acción Democrática, la fachada neonazi que es Voluntad Popular, y esa señora disparatada que anda por ahí dándoselas de independiente y a la que seguramente le tienen prometido uno de los poderes públicos... Sí: lo más triste del escenario es que en medio del clima de ingobernabilidad se montarán sobre el Poder Judicial, el Poder Moral (que tal vez terminen desmantelándolo si efectivamente reforman la Constitución) el Poder Electoral (el que más desean) y así cercarán al Poder Ejecutivo no para torcerle el brazo, sino para desmembrarlo como hicieran los colonizadores con Tupac Amaru II.
PROPUESTAS:
9.- Ahora los revolucionarios volvemos a ser oposición. Lo bueno es que ya la izquierda revolucionaria venezolana tiene amplia experiencia de este lado, del lado de la exclusión, y no podemos más que empeñarnos en hallar de nuevo esos caminos de “grandes alamedas” como diría Allende. Ser oposición nos permitirá tener un rol mucho más crítico, impulsor de debates fuertes con criterios contundentes, con los que el pueblo que votó hoy por la Derecha, no podrá evitar sentirse identificado porque, al fin y al cabo, somos la misma clase, y son muchos más los intereses que nos unen que los caprichos que nos separan. En ese camino debemos abrirnos paso, deben ser nuestros objetivos: propiciar, fomentar, exigir, crear, garantizar, y hacer permanentes los espacios de debate público sobre lo político, lo social, lo económico, lo cultural y lo jurídico. Todo lugar donde un debate pueda darse, debe darse. La esquina del barrio, la planta baja del edificio, la plazoleta de la comunidad, el sancocho al que vamos en grupo o familia todos los fines de semana, el comedor universitario, la hora del almuerzo de los trabajadores, los mercados, las plazas de los pueblos, el medio de comunicación audiovisual comunitario, y siempre por allí los textos impresos, distribuidos así sean poquitos, gracias al aliado en la fotocopiadora al que podemos pedirle fiado porque siempre vamos, como revolucionarios honestos, a pagarle. Aún tenemos muchos aliados de la revolución en todos lados… ¡En todos lados! Por lo menos, por ahora, que la Derecha legislando no tiene capacidad de perseguirnos, encarcelarnos y desaparecernos, podemos hacerlo libremente y a vox populi. Depende de nosotros mismos permitir que toda esta situación se siga agravando o recuperemos el amplio terreno perdido por nuestra ineficacia.
10.- Hay que hacer un trabajo de Inteligencia, casi que una lista de Tascón, pero sin el chantaje laboral, por supuesto. Todos fallamos en meter a gente en nuestro 1x10 de la que no sabemos más que su nombre y que vive ahí mismo cerca de mi casa, pero no compartimos con esa persona, no estamos ahí cuando nos necesita, sus hijos y los nuestros comparten mucho más que nosotros. De manera que no sabemos las dudas que pueda tener esa persona con respecto al proceso revolucionario, no sabemos qué nivel de formación tiene, a lo mejor y hasta tiene muchas lecturas y experiencias que nosotros no tenemos. Es la hora pues de que tu cuadra, tu edificio, tu esquina, tu vereda, sea un bunker revolucionario. Pero nosotros como patrulleros con 1x10 no bastamos en este trabajo de Inteligencia. Las estructuras de los partidos del Gran Polo Patriótico Simón Bolívar, todo nivel, deben abrir grandes ciclos de socialización de conocimientos y sistematización de experiencias. Formación conjunta, ciclos de lectura que no sean meros análisis de coyuntura. La gente debe aprender, pero de verdad verdad y urgentemente, eso que llaman Análisis de la Realidad Sociocultural. Hay que saber lo que piensan nuestros camaradas, escucharlos atentamente, no sólo para rebatirlos porque nuestros conceptos son más claros que los suyos. Es hora de que los revolucionarios expertos en dar prominentes y acalorados discursos, muchas veces llenos de lugares comunes y panfletos que sólo sirven para estimular el tic nervioso del aplauso y los vítores, se vuelvan expertos también en escuchar. Es hora, no hay más tiempo, ahora sí que no lo hay. Es hora de que todos subamos juntos a ese nivel que decía el Che Guevara que está por encima del simple ser humano: el ser revolucionario. Aquí no puede haber nadie más revolucionario que nadie. En la medida en que yo evidencie una contradicción en un camarada, le hago la crítica constructiva y vemos quién de los dos está errado. Pero también en la medida en que un camarada me demuestre que soy yo el de la contradicción, debemos estar preparados para asumirla y tratar de corregirla. Es tiempo también, obviamente, de ser humildes, sencillos como el pueblo, no escolásticos y doctrinarios como la alcurnia.
11.- Pero también hace falta un trabajo de guerrilla comunicacional. Expresar algunas de las verdades revolucionarias que todos conocemos, en cualquier contexto, por adverso que sea, se hace ahora necesario, siempre y cuando no arriesguemos la vida tontamente. Decía también el Che, parafraseo, que el único revolucionario útil a la causa es el que sigue vivo, porque muerto ya no puede ayudarnos. Nuestros disparos guerrilleros serán nuestra palabra, expresada sin miedo a quien herir, porque a lo mejor hiriendo alguna susceptibilidad, depositamos allí una semilla de duda que en algún momento puede germinar hacia la luz. Soltar un comentario de vez en cuando en una conversación que no nos incumbe, sea en pro o en contra de la Revolución, sea en la camionetica por puesto, en la cola del cajero automático, en el banquito de la plaza, se hace ahora necesario. Esa es nuestra guerrilla comunicacional, lo ha sido siempre, sólo que ahora debemos agudizarla. Hacernos nuestras propias franelas con mensajes revolucionarios y pasearnos por toda la ciudad dejando que la gente las lea y hasta causando alguna interpelación de alguien que pase, también será muy útil en esta etapa de la Revolución. No basta una franela del PSUV con los ojos de Chávez o del PCV con el gallito, Me refiero a tomar una frase de algún líder o pensador revolucionario y llevarla con nosotros a todos lados. Me disculpan la comparación, yo soy ateo, pero mucho tenemos que aprender de los Testigos de Jehová, que hasta con la ropa uno los identifica. Y andar todo el tiempo con la Atalaya en la mano rinde sus frutos. Pues seguramente andar con cualquier material teórico revolucionario en la mano, también. Leer cuando vamos parados en la camioneta, ferrocarril o metro, por poner un ejemplo, un libro como “Elementos fundamentales de la filosofía” de Georges Politzer, no sólo hará que más de uno nos vea como el loco que se montó hoy, sino que tal vez a alguien allí le llame la atención al ver el título, tal vez hasta nos pregunte de qué se trata. Leer en el transporte público siempre es un buen ejemplo para los niños pasajeros. Leerle todas las noches un cuento a nuestros pequeños antes de dormir es fundamental para desarrollar el comportamiento lector en los niños. Leer es un acto revolucionario, de resistencia, de liberación, de amor al conocimiento. Esa es nuestra principal guerrilla comunicacional. Formarnos para que no nos venza el automatismo y el “para donde sople el viento”. Seamos nosotros el soplo de la vida de nuestra Revolución, reanimémosla. Aún no está ahogada. Podemos salvarla, y con ella, a la Patria y al Equilibrio Universal.
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